BEAUTIFUL GANGSTER || KTH & JJK

XVIII

— Jungkook

Llamó en una suave mención el mayor de todos los presentes, la aterciopelada entonación utilizada por parte de este llegando a ser hipnotizante a un cierto punto, causando que el recién nombrado no demorara absolutamente nada en otorgarle su completa atención, curioso por lo que el contrario tenía para decirle, no obstante, este terminando por sorprenderse tantito cuando el pelirrubio en respuesta le otorgó tan solo de una sincera sonrisa geométrica.

¿Qué tenía planeado hacer?

A los cortos segundos, Taehyung acercándose a la orilla de la cómoda superficie, sin llegar a sentarse en realidad tan solo dejando que sus rodillas chocarán contra esta, esto al desear recortar por el momento con sutileza la distancia con aquel par de hermanos que lo observaban atentos ante sus movimientos... y llegaba a ser encantador para la perspectiva del alfa como ambos destilaban la misma tierna aura con aquellos enormes y redondos ojos avellanas.

Eran idénticos.

— Junghyun, ¿cierto? — preguntó el mayor, recibiendo de manera instantánea como respuesta una gélida y desconfiada mirada de rechazo por la otra parte, y se esperaba esa reacción, claro está, no tenía por que engañarse, pero ello no significaba que se daría por vencido tan fácilmente con su objetivo — Creo que iniciamos con el pie izquierdo — confesó apenado al no quedarle más de otra que proseguir, su diestra libre siendo extendida hacia el infante en un amistoso saludo — Mucho gusto, me presento, soy Kim Taehyung

Oh...

Y con esta simple acción fue imposible para Jungkook que el color rosáceo no subiera con fuerza a sus esponjosas mejillas ante el repentino bochorno que lo inundó por aquel detalle en cordialidad y caballerosidad que opto realizar su pareja con su único familiar, que, si bien este era menor que él y no estaba obligado a mostrar tanta formalidad, Taehyung decidió hacerlo... decidió hacerlo por él... y cuanto le encanto.

Taehyung era simplemente maravilloso.

Oh, Diosa.

Sí que lo era.

No obstante, Jungkook saliendo de entre su ensoñación cuando un sepulcral y notorio silencio lo invadió, su mirada yendo a recaer en ambos individuos frente a él que se observaban con opuestas expresiones en sus semblantes, y le llego a parecer de pocos modales la actitud hostil de su hermano quien no mostró el mísero indicio de ceder y mucho menos aceptar el saludo.

— Junghyun, saluda como es debido — pidió el omega, mientras que su diestra fue a acariciar aquellos suaves mechones azabaches ganándose con rapidez la atención de su menor — Taehyung es tu mayor, debes ser educado, pequeño

Y ante la entonación y el afecto con la que se le fue solicitado aquello, el infante terminando por torcer tantito sus labios en disconformidad al no desear ceder tan rápidamente, pero para su desgracia terminando por hacerlo cuando su hermano se lo volvió a pedir en un bajo murmullo... Y había algo claro que nadie podrá contradecir... Junghyun solo cedió por aquella figura paterna que lo crio desde uso de razón, solo por él, no porque en realidad acepto por voluntad aquel saludo.

Sin embargo, y aunque este fuera el motivo, la sonrisa en los labios de Taehyung no se hizo esperar, mucho menos cuando esta se ensanchó con una notoriedad absoluta, otorgándole un fuerte, pero amistoso apretón el cual se pactó entre ambas palmas unidas.

La miraba ilusionada del bonito omega llegando a ser algo que calentó ambos corazones del par de hombres que lo admiraban, siendo la única diferencia, que el que llegó a resaltar más de lo habitual fue la de un particular pelirrubio que mostró un brillo único en sus luceros al presenciar como luego de aquel saludo la felicidad desbordó por completo por parte de su omega, quien terminó envolviendo en un fuerte abrazo al infante que no mostró oposición.