Lo que no ves - Scarzzie

37 "The 1"

Scarlett.

10 de febrero, 2021

Mi niña se encontraba dentro del consultorio de su psicóloga, Chloe, ella la atendió durante el proceso de adaptación que tuvo cuando Romain se mudó a LA por ella, y más que anda para su salud mental, no quiero que ella se tenga los mismos problemas que yo cuando sea adulta.

Terminé de responder los mails de trabajo que tenía, realmente no tengo tiempo en estos momentos para grabar una película.

La puerta se abrió y Rose salió sonriendo.

—Ya estamos, Scarlett— habló la doctora y mi niña se sentó a mi lado. —¿Podemos hablar cinco minutos, por favor? —asentí, besé la frente de Rose y entré al consultorio, ella cerró la puerta.

—Bien, soy toda oídos, Doctora— sonreí apenas y me senté frente a su escritorio.

—Ambas sabemos que Rose es muy inteligente, y me veo en la obligación de comentarle a usted lo que Rose está sintiendo en estos momentos, en realidad, ella sabe todo lo que está pasando entre usted y... Flizzie, así la llama ella— comenzó a hablar la doctora, joder, es muy temprano como para llorar a esta hora.

—Rose cree que Flizzie ya no la quiere más, debido a que ya no viven juntas, y mencionó qué usted está realmente triste— sí, eso es obvio, pero no quería que mi pequeña lo pase mal por mí —Lo que a mi me corresponde hacer es hablar con usted sobre una posible solución para que Rose pueda continuar con su vida sin que le afecte demasiado el hecho de no estar con Flizzie ¿comprende? —asentí sintiéndome demasiado culpable.

—Si, y yo créame que más que nadie quiero que ella pueda continuar de una manera sana y estable su vida, pero las cosas están realmente difíciles, para mí, y aunque intento que ella no se de cuenta, lo hace igual— ella asintió mirándome.

—Si, cuando me comentaste lo del pipí en la cama, supe que algo la había desestabilizado, pero ahora necesito saber qué es lo que usted tiene pensado o planeado hacer respecto al tema de Lizzie, para saber como seguir con Rose, si no le importa compartirlo— continuó ella, yo suspiré.

¿Cómo le explico lo complicado que es porque ni siquiera yo sé que es lo que debo hacer?

—Por el momento no tengo planeado acercarme a Elizabeth, eso es seguro. No sé qué pueda llegar a suceder en un futuro con ella, pero está claro que no va a regresar a vivir con nosotras, doctora— terminé y ella asintió.

—Bien, entonces tendremos que continuar con la terapia, dos veces por semana, si le parece bien, quiero estar bien al tanto de como Rose vaya asimilando las cosas con el tiempo— me parece más que perfecto, porque sé que Rose no habla conmigo los temas que toca con Chloe aquí.

—Por supuesto, lunes y viernes, porque tiene entrenamiento, ya sabe, el futbol—sonreí y ella asintió.

—Lo sé, bien, ya están desocupadas, cualquier cosa, sabe que puede llamarme, espero que las cosas vayan mejorando de a poco— agradecí y salí del consultorio.

Tomé a mi niña en brazos y nos dirigimos hasta la casa de su padre, tengo que ponerlo al tanto de lo que Chloe charló conmigo sobre Rose.

—¿Puedo quedarme el resto de la semana, por favor mami? —pidió Rose entusiasmada. Sonreí.

—Claro, mi amor, tienes suficiente ropa aquí, ¿verdad? —cuestioné pensando en el colegio. Ella asintió.

—Si, tiene lo necesario, sino compramos, no te preocupes, ya extrañaba a mi reina—contestó Romain cargando a Rose.