Capistulo 11: Primera Visita

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Los rayos del sol ya empezaba a entrar por la ventana de la habitación donde el joven rubio de Virgo, aguardaba pacientemente a que su bebé empezará a despertar, pero aún la pequeña no daba señales de querer salir del mundo onírico, por lo que su padre decidió aprovechar el momento y con mucho cuidado de no despertarla se levantó.

Asmita se estiró y soltó un bostezo antes de acomodar las almohadas alrededor de Shivane para que no se cayera, o, rodará por la cama y la dejo dormir un poco más, luego fue hasta el baño y se dio una ducha, se lavo los dientes y la cara y se peino el cabello, se puso una túnica limpia y al volver su pequeña hija seguía durmiendo, por lo que fue hasta la cocina y empezó a preparar algo de comer.

Últimamente tenía más hambre de lo acostumbrado y más sueño, pero era normal, sabiendo que ahora tenía que atender a cierta personita a cada rato y eso lo cansaba rapidamente, aunque también lo hacia recordar los primeros tiempos en los que no sospechaba que Shivane estaba en camino y aún así sufría ese agotamiento, pero por lo menos ya descansaba mejor.

Preparo un abundante desayuno pensando en que le habían dicho que había adelgazado bastante y él suponía que era verdad, ya que no solo sentía la falta de alimento en su organismo, sino que también debía afianzar más la cinta de su túnica y hasta podía jurar que la armadura le resultaba más pesada y algo vacía, aunque cubriera su cuerpo completo.

Dejó el biberón de Shivane nadando en el agua del conocido baño de María Luisa y se sentó a comer, por precaución también dejó una proyección espiritual en la habitación para que vigilará cuando Shivane se despertara y mientras, comenzaba a sondear los cosmos de sus compañeros mientras desayunaba.

- Vaya, vaya quien lo diría ? - Esbozó una sonrisa sarcástica al  sentir que varios de los cosmos de sus compañeros estaban algo agitados y manifestaban preocupación y ansiedad.

Claramente la noticia de su paternidad había sido un choque muy grande para sus "estimados " compañeros, quienes en ese momento debían de andar estrujando hasta la última de sus neuronas por tratar de dar respuesta a todas sus preguntas, o sino, estarían tratando de inventar una excusa para presentarse en su templo a ver a su hija.

- Esto será algo demasiado aburrido y molestó de tratar a futuro - Pensaba mientras comía su desayuno, que era algo muy condimentado y sazonado con muchas hiervas de cocina.

Al terminar, labo todo lo sucio y fue hasta su habitación, se acercó a la cama y pudo sentir como Shivane comenzaba a despertar, detallando el cambio en su respiración y el latir de su corazón.

- Buenos días - Con cuidado le dio la vuelta y comenzó a pasar su dedo por el rostro de la bebé, sintiendo como está bostezaba y se pasaba las manos por sus abultadas mejillas.

Shivane, al ver a su padre sonreírle, se estiró y también esbozo una sonrisa que Asmita no pudo ver, pero si sintió debido a que pasó su dedo por la pequeña boca y la sintió curvarse había arriba, siguió delineando las facciones de su hija antes de tomarla en brazos y cargarla cuidadosamente, la bebé comenzó a mover los brazos hacia los lados y Asmita la llevó hasta una de las mesitas que usaba como cambiador y reviso su pañal.

La rutina de todos los días se repitió y una ves estuvo cambiada y vestida, la llevó a la cocina para darle su biberón, mientras la alimentaba tuvo una inesperada, ( completamente esperada ), visita de alguien que creyó, sería el último en ir a su templo.

- Albafica que sorpresa, no esperaba verte tan temprano por aquí - El joven Pisciano no dijo nada y salto completamente el chiste que Asmita había dicho, para desviar su vista hacia la bebé que cargaba en sus brazos y la cual chupaba con mucho ánimo de una goma por la cual pasaba un líquido blanco que estaba en un contenedor de cristal.

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