34. Desconfianza

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- ¿Joaquín?, ¿Amor, dónde estás? - La voz de Emilio se escuchaba cargada de preocupación - He salido a buscarte a la camioneta porque te perdí de vista en el bar... ¿Estás bien?-

- Emilio, yo... lo siento, debí avisarte, pero todo era un caos, y yo me sentía algo cansado, así que he tomado un taxi hasta tu departamento-

- ¿Seguro que estás bien?, ¿necesitas que vaya a verte? - El mayor sintió más alivio del que seguramente debería al oír por fin la voz de su novio. Cuándo notó que Joaquín no estaba en el lugar dónde esperaba encontrarlo, no pudo evitar sentir un abrumador miedo.

Emilio realmente deseaba cuidar de Joaquín y Óscar, más que cualquier otra cosa en el mundo, porque era consciente que el entorno en el que ambos habían estado desenvolviendo sus vidas, sin duda no era de lo mejor. Por eso, sólo le bastó perder de vista al castaño por unos cuántos minutos, para sentir un profundo temor de que algo malo pudiera ocurrirle.

- Si cariño, pero necesito que hablemos de algo cuándo llegues a casa... es importante-

El oji-café sintió un extraño frío bajar por su espalda. ¿Hay algo que pueda alterar más a una persona que escuchar a su pareja decirle con seriedad "tenemos que hablar"?. Emilio acababa de descubrirlo.

- ¿Está todo bien, Joaco?, ¿Estás molesto conmigo?, ¿He hecho algo malo?...- Joaquín había golpeado el sistema nervioso central del mayor con un martillo, sin ni siquiera quererlo ó notarlo - Mi amor, si te he lastimado de alguna forma en la oficina, si algo te incomodó, de verdad lo siento... puedo ir a casa de inmediato para hablar, si así lo quieres-

- No Emi, tranquilo... no se trata sobre nosotros. Tú y yo, estamos bien, muy bien.- La voz suave de Joaquín logró conciliar en parte el alterado estado del rizado. - Sólo haz lo que tengas que hacer, yo te estaré esperando aquí...-

- Bien amor, tardaré aún un poco. Eleazar ha llegado para llevar a la actriz a un hospital. Aparentemente son de Rusia, y sólo él logra entenderles algo...-

- ¿Ella está bien? - Joaquín inquirió intentando disimular un poco su nerviosismo por la situación en la que se encontraba.

- No lo sé, amor... pero el problema aquí, ahora es otro - Emilio agregó ahora con un tono algo más ofuscado.

- ¿Qué ha ocurrido? - Joaquín preguntó nuevamente; ésta vez en un hilo de voz.

- Eleazar está vuelto loco, porque aparentemente uno de los actores se ha perdido, y él los ha conseguido de una agencia ó algo así...- Emilio mencionó varias frases más, indicando lo desafortunado y complejo de la situación, sin embargo Joaquín ya no parecía escucharlo - ¿Joaco?, ¿Amor, me estás escuchando?, ¿seguro que todo está bien?-

- Si bonito, espero que puedan solucionar su problema... yo te espero aquí, haz lo que tengas que hacer - El ojimiel reaccionó ante las insistentes preguntas del rizado, pero para esas alturas su ansiedad ya era evidente a través de la línea.

- Está bien, te veo más tarde...- Emilio agregó con nostalgia.

- Nos vemos, amor.-

- Hey, Joaquín...-

- ¿Si?-

- Te amo...-

- Yo también te amo, Emi...- El menor pasó saliva con dificultad por su garganta. No había mentiras ni dobles intenciones en sus palabras, sin embargo empezaba a temer el haber complicado demasiado las cosas por un simple impulso.

Apenas cortó la llamada sus ojos se centraron en la puerta del baño, dónde Dominic estaba tomando una ducha.

Joaquín después de varios y largos minutos, logró descubrir que el muchacho hablaba Ruso. Ayudándose de su celular y un traductor en línea, se presentó, y le pidió al rubio que hiciera lo mismo.

¿Cómo Conquistar A Un Virgen En La Primera Cita? // Adaptación EmiliacoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora