22. Mi alfa

7.4K 922 82
                                    

Jimin se levantó de la cama detrás de Jungkook, apenas había dado dos pasos fuera del cuarto cuando vio a Taehyung lanzarse a los brazos de su alfa y besarlo, su lobo se puso en alerta y un sonoro gruñido salió de su garganta, sus ojos hasta ahora pintados de azul se tiñeron de rojo.

Jungkook alejó al Omega en cuanto sintió sus labios sobre los suyos y apenas y tuvo tiempo de agarrar a Jimin que se abalanzó con furia sobre el modelo. Taehyung trastabilló hacia atrás, apenas logrando evitar caerse.

—¡Alejate de mi alfa! —grito Jimin aún cegado por la furia.

—No es tu alfa, es mío —le respondió Taehyung arrastrando las palabras a causa de todo el alcohol en su sistema.

—Taehyung vete de aquí, yo no soy tu alfa y Jimin está en celo, yo no voy a poder sostenerlo mucho tiempo, vete.

Jungkook era fuerte, pero Jimin aún estaba con el celo activo, y su lobo estaba furioso haciendo que su fuerza aumentará, si el Omega no se iba Jimin lo iba a atacar.

—¡No! Tu eres mío, deja de jugar con este estúpido, tu me amas, deja de fingir, ya te vengas te de mi, ahora vuelve a mi lado.

Con cada palabra que decía el modelo, la furia de Jimin aumentaba, ¿cómo se atrevía? Lo iba a matar, pero antes le dejaría muy en claro que Jungkook ya no era suyo.

Su mirada furiosa desaparecido, su cuerpo se relajo y una sonrisa apareció en su boca, llevo sus manos al cuello de la bata que llevaba puesta y la jalo hacia un lado, dejando a la vista, la marca brillando en su cuello, los ojos de Taehyung se abrieron en sorpresa.

—Jungkook es mi alfa y aquí está la prueba, ahora lárgate de aquí antes de que te arranque la cabeza.

Taehyung no lo podía creer, en cinco años de relación Jungkook jamás había tenido la intención de marcarlo, jamás a pesar de que sus celos estaban sincronizados hizo algún intento por dejar su marca, y a ese Omega si lo había mordido en tan solo un par de semanas juntos.

Sus rodillas fallaron, y cayó al suelo alfombrado, gruesas lágrimas caían por sus mejillas, quería gritar pero su garganta estaba cerrada, había perdido a Jungkook y lo sabía, ya no había nada que pudiera hacer.

No, él no se daría por vencido, una marca se podía reemplazar, el lazo se podía romper, no se iba a rendir sin luchar.

—Jungkook mi amor, dime qué lo hiciste sin pensar, que fue un maldito error —dijo sin levantarse del suelo, solo elevando la cabeza para ver el rostro del alfa.

—El único error que he cometido en mi vida fue haberte amado Tae, Jimin es mi Omega porque así lo quise, ya te lo había dicho pero te lo repito, lo nuestro se acabó en el momento en que descubrí tú engaño. Vete, deja de humillarte, no vas a conseguir ni mi lastima, ni mi perdón.

—Espero que te haya quedado claro, Jungkook es mi alfa y me ama, ve a buscar a Yoongi o a quien quieras y deja de buscar lo que ya no es tuyo.

Dicho eso Jimin jalo a Jungkook al interior de la habitación y cerró la puerta en la cara del Omega. Taehyung no se levantó, al contrario bajó la cabeza casi hasta rozar el suelo y lloró.

Lloró como lo había hecho la noche anterior en su cama, lloró porque sabía que ya no era nadie en la vida de Jungkook, lloró porque en esos momentos ya nada quedaba de su orgullo, ese se lo había quitado Jung Hoseok la noche anterior después de usarlo y desecharlo cómo basura.





¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
이교도 ★ INFIELES ★Donde viven las historias. Descúbrelo ahora