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In mom's house.
Narra Jungkook.


Subí las escaleras mientras tenía en mis manos una bandeja llena de comida y un vaso de jugo al igual que de agua, había llegado a Busan junto con mi novia el día de ayer a la casa de mi madre para celebrar su cumpleaños y de paso tener unas minis vacaciones en pareja.

Abrí la puerta de mi habitación de la casa de mamá ya que nos estábamos quedando hasta que mi madre cumpliera años y unos días más solo para relajarnos del estrés de lo que nos correspondía en Corea, teníamos muchas responsabilidades.

Ví a mi linda novia acostada boca abajo mientras su cabello cubría su rostro, la sábana apenas le tapaba la espalda baja dejando media de esta a mi vista, usualmente ella solo duerme en unas bragas al igual que yo que solo duermo en boxers.

Me acerqué a ella después de dejar la bandeja en la mesita que estaba al lado de la cama para apartar un poco su cabello y besar su frente mientras acariciaba un poco su espalda fría por el aire acondicionado. Mientras quitaba algo de su cabello empezó a moverse mientras soltaba un suspiro de cansancio.

Quedó boca arriba dejando sus pechos expuestos a mí, sonreí por lo tierna que se veía al dormir que no me contuve y me acerque a ella para empezar a besarla. Le daba pequeños picos en sus labios pero ella solo me respondía con suspiros de cansancio.

Puse mi cabeza en sus senos para dejarla allí y sentí sus manos en mi cabello, me abrazó mientras aún seguía durmiendo. Me acerque a su cuello para besar allí y dejar una que otra marca, le quite las bragas con cuidado y quite mi boxer junto a mi pantalón de pijama quedando desnudo al igual que ella.

-Amor, tengo ganas - dije mientras daba picos en sus mejillas -. Amor tengo hambre de ti.

-Tengo sueño, déjame - respondió mientras se tapaba la cara con una almohada.

-Dejame entrar, sigue durmiendo - dije, mi chica solo asintió adormilada y siguió durmiendo.

Entre en ella lentamente mientras soltaba un suspiro, le quite la almohada de la cara para besar sus labios y ver su rostro adormilado. Gemía bajito pero seguía durmiendo lo cual me causo gracia.

-Amor, no te duermas - gemí riendo al verla con sus ojitos cerrados.

Minutos después mi chica se levantó por lo rápido que iba dentro suyo, escondí mi rostro en su cuello mientras que ella se aferraba a mi cuerpo y gemía mi nombre. Sin más me corrí llenandola de mis fluidos y ella lo hizo segundos después del mío.

Sonreí al verla dormida otra vez y yo solo negué riendo al ver todo su cuerpo inactivo, salí de ella y busqué algo para limpiarla y dejarla para que siguiera durmiendo.




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