Mujer solitaria y codiciosa

19. La fiesta.

Joan Turner.

Al Timothy pasar la prueba de todo el mes, papá aceptó que se quedará un tiempo más, ahora Tim pasa más tiempo con papá, no me incluyen en sus planes, cada vez que entro a una habitación y ellos están hablando, se callan, me siento estafada, ¿De que me serviría que pasará la prueba si no estaré con él? Ésta noche, tenemos una fiesta de la empresa, papá se llevó a Tim temprano y son las cinco de la tarde y aún no vuelve, la fiesta es a las 7:30 PM, pero tenemos que estar antes para recibir a los invitados y con el tráfico de ésta ciudad, todo será más complicado. Me estoy terminando de maquillar cuando mi teléfono suena indicando una llamada entrante, es Tim, pensativa contesto.

- ¿Que sucede? - Le pregunto.

- Te llamaba para decirte que no podré ir contigo a la fiesta, lo lamento. - Se escuchan unas risas femeninas atrás, ¿Y ahora sale con otras mujeres? Lo que me faltaba, mujeriego.

- ¿Cómo que no vendrás? -

- Pues, no, no iré, lo lamento, pero estoy muy ocupado aquí. - Intenta
excusarse.

- Timothy, no me puedes hacer ésto, ¿Dónde está mi padre? - Pregunto histérica.

- Ah, tu padre también está ocupado. - ¡No me jodas!

- Me importa un bledo lo que estén haciendo, pásame a mi padre. - Los asesinare.

- ¿Que? ¿No te escucho? Oye estamos pasando por un túnel, lo siento, no te escucho, te amo- Ja, ¿El viejo truco de estar en un túnel? No me jodas, cuando los vea los asesinare y no me importará estar rodeada de gente.

Con algo más que rabia, le cuelgo, ¿Me ama? Si claro, ¿Cómo un hombre como él, tan culto, tan detallista, amoroso, respetuoso, pudo cambiar tan drásticamente?. Unos toques en mi puerta me sacan de mis pensamientos, un leve "pase" y la cabeza de mi madre de asoma.

- ¿Lista? Tu padre llamó y dijo que nos verían allá. - Me informa.

- Bien, ya terminó de colocarme rimel y bajo. - Le indico.

- Bien. No tardes. - Me dice y se va cerrando la puerta detrás de ella.

Suelto un pequeño suspiro y termino de arreglarme, a los cinco minutos bajo las escaleras y mi madre junto a mis hermanos y cuyas esposas me miran igual que cuando traje a Timothy a casa, o sea, como si quisieran devolverme al pueblo, esperan en la puerta.

- Bien, vámonos. - Emprende marcha mi madre, seguida de los pavos reales. Yo me les uno detrás de ellos y cuando ya estamos en la limusina, ésta emprende marcha al salón que mi padre rentó para el evento.

Timothy Baker.

Bien, ya está hecho, la sorpresa que le tengo a Joan ya está lista, ya el dj sabe cuándo poner una de sus canciones favoritas y ya todos los invitados saben que es lo que pasará a las 9:30 PM, ésto debe salir según lo planeado, hice que Joan se enojara conmigo, avisé a los invitados, el dj está listo, toda la familia de ella ya sabe, si Joan llega a hacer todo lo contrario a los escenarios que planee, me moriré, hablé con su padre, sus amigas, las cuales me apoyaron en todo lo que les preguntaba, ellas me ayudaron a escoger el traje perfecto. Faltan 30 minutos para que lleguen, su madre me mantiene al tanto, también me dijo que escuchó a Joan llorando, eso me rompió, pero haré que ésta noche y el resto de nuestras vidas valgan la pena cada una de sus lágrimas y cada uno de los regaños que recibí de su padre.

Le pediré matrimonio

Me recuerda mi subconsciente, joder, le pediré matrimonio a esa hermosa mujer, de la cual cada día me enamoro más no me importan sus caprichos, cuánto tiempo tarde en cambiarse, maquillarse, no me importa cuántos estándares tenga, me encargaré de cumplir cada uno de ellos, tal y como le gusta a ella, me pondré trajes si eso la hace feliz, me dejaré peinar hacia donde ella le guste más, lo único que quiero hacer es verla feliz y si para eso tengo que sacrificar todo, lo haré.

- Hijo, quita esa carita, mi amor, no quieres que ella te vea nervioso, ¿Verdad? - Cierto, me olvidé, mi familia también está aquí, al principio no estaban contentos, pero cuando les dije todo lo que había pasado, lo aceptaron.

- Estoy bien, ma. Lo estoy. - Le aseguro, de hecho no estoy bien, me están sudando partes que no sabía que podían hacerlo.

- Oye, hermanito, felicidades. - Me dice Violeta detrás de mí.

- No cantemos victoria hasta que ella diga que si. - Le recuerdo, no quiero hacerme ilusiones.

- Buenooo. Que estrés contigo. - ¿Estrés conmigo? Violeta jode más que yo, pero es mejor hacerla creer que no, porque o sino, se arma la cuarta guerra mundial.

- ¿Listo chico? - Me pregunta el señor Turner.

- Si, señor. -

- Bien, pues prepárate, que ya están a unas cuadras. - Eso prende mis alertas.

Mi madre me acomoda la corbata, mi hermana el cabello, mi padre me da ánimos desde su asiento, es el que menos está feliz con que le pida matrimonio, pero me apoya porque sabe que la amo; los invitados se ponen en sus lugares y cuando se abre la puerta a la primera persona que veo, es a su madre, luego sus hermanos, junto a sus esposas y de último pero no menos importante, ella, Joan lleva un vestido negro largo, tiene tiras muy delgadas y lleva una abertura que le llega hasta el muslo izquierdo, tacones del mismo color, pero con diamantes, un brazalete de oro blanco en su muñeca derecha, pendientes largos y una cartera plateada Dior, su cabello le cae en ondas hacia el lado izquierdo, cuando me ve, es como si quisiera mandarme a Júpiter, así que decido acercarme, pero ella retrocede un paso cuando estoy solo unos centímetros cerca de su cara.

- Déjame explicarte. - Le pido

- No, me has fallado, Tim, ¿Dejarme plantada para venir con mi padre? -

- No, no lo entiendes, no te deje plantada, solo hice cambios de último minuto, pero lo entenderás, sé que si. -

- ¿No lo entiendo porque nosotros los ricos no tenemos cerebro? No me vengas con esa estupidez, luego de que mi padre te dió pase libre para salir conmigo, te la pasaste arriba y abajo con él. - Es cierto, pero es por ella.

- Era por ti, Turner. Entiende cariño, es por ti y para ti. -

- ¿Ahora me echas la culpa de tus acciones? Busca a alguien que si te acepte eso Timothy, porque no pienso dejarme de ti ni de nadie. - Me dice y me pasa por un lado, pero antes de que avance la tomo de la mano y la atraigo hacia mí, su cuerpo choca levemente con el mío y mis labios se dirigen a su boca, cuando de la nada siento una cartera plateada Dior chocando con mi mejilla izquierda.

- Lo mejor es que terminemos. - Me dice y se va más furiosa de lo que esperaba. Joder, no puedo creer que por tratar de pedirle matrimonio terminaría nuestra relación, ¿Y ahora que haré? Todo está preparado.

DOS CAPÍTULOS SEGUIDOS, PORQUE TAL VEZ VAYA A VIAJAR Y NO TENDRÉ INTERNET, ASÍ QUE ESPERO QUE LO DISFRUTEN, CUANDO LLEGUE A CASA DE MI TÍA (SI ES QUE ME VOY) SUBIRÉ EL OTRO. BESITOS.🥹