- Estás despedido.
El joven miró a Mile sin entender aún lo que aquellas palabras decían, y sobre todo, sin entender cómo el hombre que lo había despedido seguía leyendo los documentos que tenía en su mano como si nunca hubiese desempleado a alguien. El joven parpadeó desconcertado aún sentado en la silla de metal.
- ¿Despedido?
Mile levantó su vista al escuchar su voz y sólo para sorprenderse al ver al joven aún ahí. El rodó los ojos, colocando los papeles en el escritorio de su oficina, ordenándolos. Apoyó los codos en la superficie de vidrio y su mentón en sus manos, mirando al joven como si fuera estúpido.
- ¿Por qué aún estás aquí?
El joven alzó ambas cejas.
- Y-yo... no...
El moreno soltó un suspiro agotado, recargándose contra el respaldar de su asiento de cuero negro. Algo que odiaba Mile, de la gran e interminable lista de las cosas que odiaba, era que no le hicieran caso cuando el daba una orden. Eso era totalmente desesperante para el joven.
- Cariño, estás despedido - repitió, colocando un mechón de cabello detrás de su oreja - ¿Quieres un diccionario para saber qué significa "despedido"? - el joven negó, entonces Mile sonrió sarcásticamente - bien, si lo sabes. ¡Fuera de mi oficina!
El joven de pelo opaco la miró frunciendo el ceño, entonces levantándose casi indignado, tomando el bolso que traía consigo, para salir por las puertas de vidrio polarizado. Si no hubiesen sido de vidrio, Mile habría esperado que el chico hubiese dado un portazo. Mile tomó de nuevo los papeles que estaba leyendo hace un tiempo, analizando cada frase que estaban impresas en la hoja blanca de papel.
Otra las cosas que odiaba Mile, es que la engañaran colocando letra pequeña en algún contrato. Por este motivo también, Bible trabajaba con el, el hombre era bastante suspicaz cuando quería, lo que era la mayor parte del tiempo. Ah, Mile, odiaba tantas cosas. En algún momento de su vida, de sus treinta y dos años, el moreno no odiaba a las personas o cosas o animales o lo que se moviera o respirara cerca de el. Y aunque fuera difícil de creer, era cierto.
La vida de Mile había sido un poco interesante desde el comienzo hasta la actualidad; un padre alcohólico que abandona a su único hijo en un orfanato, ya que su madre había muerto en el parto, algo que no se ve siempre y cuando lo hace, es terrible. El creció caridad y a veces, lástima e incluso odio. Los chicos del orfanato no eran tan amables como siempre dicen las personas o como los hacen ver los comerciales. Algunos eran hijos del mismo satán, según su parecer. Y al estar rodeada de gente que le humillaba y golpeaba hasta no dar más, Mile empezó a convertirse en uno de ellos. Una persona sarcástica, carente de filtro e incluso, carente de algo de humanidad.
Y esto fue así hasta adulto y cuando creyó conocer al que fue el amor de su vida a los veintidós años. Mile estaba terminando su carrera, saliendo casi con hombres y sin amigos de la universidad, cuando conoció a Nodt. El chico se había mostrado afectuoso alrededor de Mile casi todo el año, a pesar de que el era tóxico para todos. Sin embargo, el chico no se rindió, ganando de a poco el cariño y aprecio de Mile hasta que se convirtieron en novios.
A Nodt aún le faltaba terminar un año de carrera, por lo que Mile trabajaba y Nodt estudiaba. Ambos estaban en una buena relación casi sin peleas porque, de alguna manera mágica, Nodt sabía controlar el genio de Mile, o tal ver era porque Mile estaba más que enamorado de Nodt y hacía todo lo que él le pedía que hiciera. Pero eso no duró mucho hasta el incidente; Mile no podía tener hijo y Nodt quería uno.
Después de tres, casi cuatro, años de relación, ambos querían empezar una familia. Eran adultos, Nodt había terminado de estudiar y tenía un trabajo estable al igual que Mile, ¿por qué no hacerlo? Pero cuando conversaron el tema, y estaban listos para ello, Mile fue al médico para hacerse un chequeo. Ahí fue cuando el médico notó que algo estaba mal con su sistema y, efectivamente, era infértil.
ESTÁS LEYENDO
Hey, Dad. [BibleBuild] [M-preg]
FanficLa vida de un famoso puede ser genial: fiestas, amigos, sexo, drogas y alcohol. Sin embargo, un error del pasado puede cambiar ése panorama. Pocas personas toman precauciones cuando son jóvenes y una de ellas fue Bible Sumettikul, un solitario y fam...