**NUEVO COMIENZO**

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CAN

_¡pero amor eso es trampa! nunca dijiste que debía ir vendado_ protesto ante la idea de mi chica de cubrir mis ojos _ya no te quejes que bien la otra vez te dejaste y no protestaste ni una sílaba_ me dice divertida entre risas, _bueno, pero aquella vez te tenia que vestir y eso era un asunto de vida o muerte, que no me iba a perder por nada del mundo_ le susurro acercando mi rostro al suyo, donde acaricio su mejilla y doy un suave beso en sus labios.

_ya quédate tranquilo y déjate sorprender_ dice aceptando mis labios _¡pero amor!_ continúo protestando, sabiendo de que no hay manera de salir vencedor ante esa reyerta, se acerca a mi oído y con voz sensual me dice; _ te prometo que te lo recompensaré_ muerde suavemente mi labio inferior y deja uno de esos besos que sólo ella sabe darme, lo que hace que se me erice la piel, relame el sabor del beso, sonrie y yo sólo puedo suspirar ante semejante acto de seducción y aceptar mi rendición.

Como un manso cordero aceptando su inevitable destino, dejo que Sanem tape mis ojos con un pañuelo. _esto me trae un recuerdo bien erótico _ le digo bromeando divertido, rememorando la vez que la vestí, ella ríe golpeado con suavidad mi brazo.

Conduce mientras yo iba de copiloto haciéndole preguntas relacionadas, y pidiendo me diera pistas, pero ella sólo reía y negaba. Después de unos cuántos kilómetros la siento estacionar el auto, espero a que baje y como cuál invidente voy de su mano, dimos un mediano recorrido, ella guiándome con sus manos y voz, cuidando de que no tropiece _¡hey! ¿a donde me llevas?_ pregunto, el no saber me ponía un poco ansioso y más aún caminar vendado por quien sabe donde.

_ya mi amor, ya vamos a llegar, paciencia_ dice en un intento de calmarme _deberías saber que la señora paciencia y yo no nos llevamos nada bien_ le inquiero, ella sólo reía y besa mis labios.

Antes de detenernos mis sentidos se agudizan, puedo distinguir ese aroma; reconozco ese olor a kilómetros de distancia y ¿cómo no reconocerlo? Si es el dulce aroma de niñez y adolescencia, de los mimos, de las historias sin fin, el perfecto aroma de la felicidad, del hogar de mi infancia, el olor que siempre ha sido el puerto seguro donde descansar de mis tribulaciones. _¡mi abu!_ exclamo.

Mi chica me detiene, retira la fina tela que cubre mis orbes y ante mi está mi querida abuela, quien tiene una gran sonrisa en sus labios, yo sonrío por la sorpresa de verla, pero estoy muy confundido y extrañado ¿por qué Sanem me ha traído hasta aquí? cuando intento procesar la situación mi abuela me saluda; _Mi querido cachorro_ y sin darme chance de articular palabras, hace que me agache hasta su regazo, me abraza emocionada y me entrega una hoja doblada, _hijito esto lo dejó el pajarillo para ti_

Me incorporo, es una nota que comienzo a leer.

Querido cachorro;

En este tiempo he aprendido que algunas cosas están destinadas a ser, sólo nos toma unos intentos más de la cuenta llegar a ellas, comprendiendo así que cuando dos almas se tienen que encontrar, el destino acerca sus mundos, borra las distancias, une los caminos y desafía lo imposible.

Tardé en encontrarte, aun sin buscarte, la noche que nos conocimos cambió mi vida para siempre, desde ese momento no dejé de soñarte, de anhelarte de imaginarte y al verte por primera vez, aun sin verte, me enamoré de ti y supe que era contigo con quien quería estar el resto de mi vida.

Contigo finalmente comprendo que el amor no es una emoción, sino un impulso, una necesidad, mi necesidad de estar a tu lado, por primera vez me siento un ser humano completo, pleno y merecedor de amor.

Tú eres el amor de mi vida, mi albatros, mi lugar seguro y siento que si en el futuro escribo algo bueno y noble debo hacerlo solo oyendo las puertas de tu corazón.

DESDE TU ODIO HASTA MI AMOR Donde viven las historias. Descúbrelo ahora