DESDE TU ODIO HASTA MI AMOR

LA VERDAD OCULTA

MIRIBAN

Miriban había contratado a un abogado para interponer la demanda de divorcio, pero antes quiso darle la noticia personalmente a Ozgur, ella mejor que nadie lo conoce y si le envia al abogado haría todo un ardid para retrasar o anular el proceso.

Cuando llega, desde el umbral observa el sobrevuelo en la oficina de Ozgur, sus ojos pueden ver cuando Can ataca a Ozgur y lo amenaza. Can sale furioso y no hace más que mirarlo sorprendida.

Cuando Ozgur queda sólo en su oficina ella se adentra cerrando la puerta tras ella y con una media sonrisa le dice;

_¡Vaya! _
_finalmente alguien te da a beber de tu propia medicina_

_¿Qué haces aquí?_ Pregunta el hombre enojado secando su nariz con klenex que reemplazaba constantemente.

_He venido a Notificarte que voy a solicitar el divorcio_ Le dice con determinación. El hombre se muestra impasible ante aquella declaración y en aparente calma le cuestiona;
_¿Te volviste loca Miriban? ¿A que mierda juegas? ¿Que pasa contigo? recrimina
_¿Primero me apuntas con un arma y ahora esto? ¿ Qué sigue?
_¡la menopausia te está derritiendo el cerebro!_ se burla y sigue limpiando su nariz.

Ella sonrie, toma asiento, cruza sus piernas y con mucha calma responde;
_Sigue que no volverás a la casa, dividiremos bienes como manda la ley y no te atreverás a objetar.

Ozgur ríe con risa forzada y fingida. Toma asiento se incorpora en la silla mirando a la mujer;
_ ¿En verdad crees que eso va a pasar, que nos divorciaremos y que te quedarás con la mitad mis bienes?

Ella sonríe y asiente con la cabeza.
_¡Tal como haz escuchado!_

El hombre frunce el ceño con evidente enojo da un golpe seco en la madera del escritorio y amenaza apuntando con su dedo
_No te voy a dar el divorcio y la mitad de nada, eso no va a pasar ni en un millón de años_

_Toda esta mierda ha sido tu culpa _ si hubieses sabido educar mejor a tus hijos, sobre todo a la maldita de Sanem, nada de eso habría pasado.

Miriban se incorpora en la silla, golpea el escritorio con fuerza y furia _ A mis hijos no los metas en esto, te quedó grande el papel de padre, jamás lo fuiste, y si, tienes razón, ha sido mi culpa por pretender que ibas a cambiar, por perder treinta años de mi vida a tu lado, pero se acabo Ozgur, me rendí contigo y quiero que salgas de mi vida cuanto antes, así que si me darás el divorcio y te acogerás a lo que la ley dictamina _

El viejo vuelve a reír y repone _¿y si no, que Miriban? _ ¿Me vas a apuntar con una maldita arma para obligarme?
_ Nunca te voy a regalar la mitad de nada_ ¡sal de aquí! Dice con un gruñido.

Ella con extrema calma se reclina en el respaldo de su asiento y sin más le dice casi en un susurro; _Tengo rato preguntándome; ¿que haría Can cuando se entere de que tu mataste a su padre?

El viejo se transfiguró, su cara mutó de colores, parecía que detuvo la respiración ante la sorpresa del pinchazo de aquellas palabras.
_si ese golpe fue sólo por golpear a Sanem, no me imagino que hará cuando se entere_

Ozgur en ese punto parecía de piedra, con el labio tembloroso por la ira que aquel comentario desentraña le exigió silencio; _¡cállate, cállate!_ _no sabes lo que dices maldita_

Flashback

Esa tarde gris de aquel fatídico día, Miriban se preparaba para el alumbramiento de Sanem, quería tener todo listo para no tener que correr a última hora con todo, ella era aficionada de hacer vídeos a los niños con su handycam sony, deseaba inmortalizar cada momento importante y el nacimiento de su nuevo bebé ameritaba tener la cámara lista para ese evento.