Capítulo 8 –Secretos no tan secretos.
—Sabes Matt. Tú eres mi mejor amigo y ella es mi hermana, cualquier persona en mi caso te mataría pero yo no lo hago porque sé que estás muy loco por ella.
—Baja la voz. —escuché susurrar al que suponía que era Matt.
Unas voces detrás de mi puerta interrumpieron mi sueño con Niall Horan ¿Qué? Soñar es gratis.
—No va a escucharte. Ella duerme como un oso, parece que está invernando cuando duerme.
Mi boca se formó en O y me levanté cuidadosamente de mi cama. Me acerqué a la puerta sin hacer mucho ruido para poder escuchar su conversación.
Dirán que soy chismosa pero... la curiosidad mató al gato ¿verdad?
—Ella me dijo que no iba a invitar a nadie al baile. Invítala.
—No lo sé, Derek.
—Matt, tienes que ser más arriesgado. Arriésgate. Inténtalo. Sé que mi hermana es algo terca pero tú eres lo suficientemente terco para insistir e insistir hasta que acepte. Además ¿no me dijiste que tienes su diario? Quizás tengas alguna pista...
— ¿Y si me dice que no? ¿Y si rechaza mi propuesta del baile? ¿Y si invita a otro chico?
— ¿Y si te dice que si? ¿Y si acepta tu propuesta del baile? Estoy seguro que no va a invitar a otro chico porque además de que ella es muy tímida, es clásica. Le gusta que los chicos la inviten y todo esas cosas.
—Derek, jamás en mi vida te había visto tan reflexivo.
Créanme que yo tampoco.
—El amor me pone sentimental. Ahora, ayúdame a despertar al oso polar que está durmiendo allá dentro que es la hora de cenar.
Al escuchar eso, salí dispara directo hacia mi cama y acomodé las mantas encima mío. Despeiné un poco mi cabello y cerré los ojos. Segundos después, escucho como abrían la puerta de mi habitación y pisadas se acercaban hacia a mí.
— ¿Cómo la despertamos?— escuché que dijo Matthew.
—Podríamos traer un vaso de agua y si eso no funciona, la podríamos tirar por el balcón...
Comencé a "despertarme" y los vi a ambos con una sonrisa en la cara.
— ¡Ally!— dijeron al unísono.
— ¿En serio iban a tirarme por el balcón? Y después soy yo la asesina...
— ¿Qué tanto escuchaste?— preguntó mi hermano.
—Escuché decir a él sin cerebro número dos como despertarme y luego el cerebro número uno de tirarme por el balcón. Eso solo escuché. - mentí. Bueno, en realidad no mentí. Había escuchado eso, solo que faltó decir que también escuché su conversación, pero eso es algo que no pienso decir.
—Ah—contestaron aliviados.
—Levántate ya, oso polar, mamá ya tiene preparada la cena.
—Ya cállate, sin cerebro.
** ** **
— ¿Y a quien vas invitar al baile, hija?— preguntó mi mamá. Con solo escuchar esa pregunta me atraganté con la fideos que estaba comiendo.
— ¿Quién te con...— callé porque sabía perfectamente quien había sido.
Derek.
—Mamá, no voy a invitar a nadie. Me parece estúpido el baile. — tomé un trago de mi jugo de naranja y continué. — Ni siquiera sé si voy a ir
— ¿Cómo no vas a ir al baile? ¡Es el baile Alice!
—Mamá, yo no voy a invitar a nadie. Punto final. No se habla más del tema. — terminé apurada mi comida y salí directo hacia mi habitación.
Me senté en la silla de mi escritorio y comencé a hacer la tarea. Para que el ambiente no sea tan aburrido, coloqué música. Luego de varias canciones y la tarea terminada, Muévelo de Sofía Reyes estaba sonando en mi reproductor.
Comencé a bailar y cantar por toda mi habitación. La canción me gustaba bastante y cada vez que la escuchaba, era imposible no cantarla.
—Oh Oh, Put your hands on my hips baby, muévelo. La vida es una ven aquí Mueve, Muévelo. Put your money where your mouth is muévelo, muévelo oh oh oh oh. — dejé de cantar la canción al escuchar aplausos provenientes de la puerta de mi habitación.
— ¿Por qué te detuviste, Robinson? Cantas lindo.
—No mientas, Matt. Sé perfectamente que canto como una morsa cuando está pariendo, así que no hace falta que mientas.
—Qué bueno. — tranquilamente Matthew entró en mi habitación y se acostó en mi cama. Me di la vuelta y lo miré con una ceja enarcada— ¿Qué sucede, Robinson?
—Estas en mi cama. — dije remarcando la palabra mí.
—Bien que te gustaría que estemos juntos en la misma cama.
—Ni en tus sueños, Sanders. —él se levantó de mi cama y se acercó hacia a mí.
—No actuaste de porrista ayer, Robinson.
—Soy mala actriz. — dije con un puchero.
Él rio y negó con la cabeza.
—Todos sabemos que eres muy buena actriz, pero cantante... mejor no te dediques a eso cuando crezcas.
—Jaja, que gracioso– contesté sarcásticamente.
El sarcasmo de Lilian se contagia.
Me senté en mi cama y Matt se sentó en una silla en frente mío.
— ¿Vas a ir al baile, no? — preguntó Matthew.
—No lo sé. Yo no voy a invitar a nadie, pero si me invitan, quizás vaya. ¿Y tú? ¿Vas a ir al baile?— le pregunté.
—Con la chica que quiero ir, no quiere invitar a ningún chico, así que tendré que invitarla yo. — Matthew se levantó de su asiento y se fue de mi habitación no sin antes decirme buenas noches.
Confusa, me lavé los dientes y me acosté en mi cama para intentar dormir. Con la conversación que había escuchado de Derek y Matt y ahora esto, creo que descubrí porque Derek me pregunta si gusto de Sanders.
Matthew gusta de mí.
n/a:
¡Hola todo munnnnndo! ¿Cómo están? Espero que bien. Recién ahora me doy cuenta que no subo un capítulo hace mucho tiempo.. así que acá está el capítulo de hoy.
¡Por fin Alice se da cuenta que Matthew gusta de ella! Qué chica más ciega... ¿Alguien presentía que Matthew gusta de Alice?
Si llego a ver más de cinco votos - las estrellitas que están al final del capítulo - y algunos comentarios o no sé, una señal de humo de mis lectores, subo otro capítulo hoy.
Así que...
Besos xx.
En multimedia está la canción que canta Alice en su habitación.
ESTÁS LEYENDO
Diario de una típica adolescente
HumorAlice Robinson es otra chica más del instituto, con la excepción de que ella posee algo que ninguna chica tiene a los diecisiete años: un diario. Desde su noveno cumpleaños, no ha parado de escribir y dibujar en él. Diario se había convertido en su...