Diario de una típica adolescente

Capítulo 9 - Invitaciones al baile

Capítulo 9 – Invitaciones al baile.

— ¡Alice, despiértate que estamos llegando tarde!— ese grito provocó que saltara de mi cama y cayera en el piso.

— ¡Alice, despiértate ya!— mi hermano entró en mi habitación a medio vestir y con el cepillo de dientes en su boca. — ¿Qué haces ahí en el suelo? ¡Levántate que estamos llegando tarde!

Con mal humor, me levanté del suelo y me preparé para ir al instituto. En cinco minutos – un nuevo record para mí – ya estaba lista para ir al instituto.

— ¡Ya estoy!— grité mientras bajaba las escaleras.

Segundos después bajó mi hermano junto con Matthew. Al parecer mi mamá, se había ido más temprano y no nos había despertado. Subimos rápido al auto y en un abrir y cerrar de ojos llegamos al instituto. Salimos corriendo del auto y entramos al instituto.

Mi primera clase era biología,  la peor de todas. Era preferible faltar a su clase antes que llegar tarde.

Me acerqué hasta la puerta y como vi que la clase ya había iniciado fui a la cafetería a desayunar algo. Las paredes de la cafetería estaban todas decoradas con afiches sobre el baile que sería en menos de dos semanas. Tomé un jugo de naranja y una barra de cereal y me senté en una de las mesas de la cafetería. A esta hora no hay nadie, por lo cual se escuchaba silencio y pasos de las personas cuando caminaban.

— ¿Desde cuándo no vas a clase, Robinson? — preguntaron detrás mío. Me di la vuelta y Matthew se encontraba con su mochila en los hombros. Él se sentó en frente mío y robó un sorbo de mi jugo de naranja.

—Prefería faltar antes que tener un castigo. ¿Y tú?

—No tenía ganas de escuchar las quejas del profesor de historia.

Ambos nos quedamos en silencio, por mi parte comía de mi barra de cereal, en cambio, Matt no se dejaba de tocar el cuello o pasar su manos por su pelo.

—Alice, quiero preguntarte algo.

—Dispara. - dije concentrada mientras comía mi barrita de cereal. Dejé de comer mi barrita de cereal y bebí del jugo de naranja.

— ¿Te gustaría ir al baile conmigo? — inmediatamente escupí el jugo que bebía.

Me sorprendía bastante su propuesta, pero con lo que había escuchado ayer, no me resultaba tan raro. Sé que Matthew gusta de mí, pero yo no gusto de él. Solo me parece atractivo; tampoco lo conozco.

— ¿Eso es un no?— preguntó.

Lo pensé por unos minutos. Sabía que iba a arrepentirme de lo que diría, pero  finalmente contesté.

—Me gustaría ir al baile contigo, Matt.

** ** **

— ¿Vamos al patio? — preguntó Matt mientras caminábamos por los pasillos.

Asentí y comenzamos a caminar hacia el patio. Estuve charlando todo este rato con Matthew y me di cuenta que no es tan irritante y egocéntrico como creí que era.

Esto lo tendría que estar escribiendo en mi diario en vez de pensarlo en mi mente.

Nos sentamos bajo un árbol y nos apoyamos contra el tronco.

—Matt. — lo llamé. — ¿Por qué me invitaste a mí al baile?

—Porque sé que tú no ibas a invitarme.