Mᴜᴛᴇ «Bᴀᴊɪғᴜʏᴜ»

LXXVII

De nuevo en la cabaña, Keisuke le mandó un rápido mensaje a Draken de que no lo molestara, diciendo que iba a pasar el rato con Chifuyu.

Como respuesta había recibido una luna oscura.

Rodó los ojos y lo dejo en visto, guardando el aparato.

Se sentó sobre la cama de Chifuyu, quien estaba a su lado, lo miró un momento, dudando en hablar o no, se recordó que era un tema que tenía que tratarse tarde o temprano, así que intento ser sutil.

-Fuyu- sus miradas sd encontraron -¿Recuerdas lo del otro día?

El chico lo miró sin entender unos minutos, antes de parecer recordar, aunque lo miró con duda.

-Cuando despertaste con tu erección- habló Keisuke sin vergüenza, Chifuyu asintió, bajando la vista- ¿Té... Gustó?

Chifuyu se ruborizó completamente, antes de asentir.

Keisuke sonrío, por un segundo había tenido miedo de lo que pudiera responder.

-Y te... ¿Gustaría hacer algo como eso de nuevo?

Chifuyu se mordía el labio con inquietud.

-No, no es una propuesta para tener sexo desenfrenado en este aclaró el pelinegro -. Solo quiero hablar de eso contigo.

Chifuyu lo miró un momento antes de respirar profundamente, sacando su celular para escribir.

"La idea de tener sexo no me gusta".

Keisuke miró las palabras un momento.

-¿Quieres hablar de eso?

Chifuyu tardó un poco más en escribir.

"Me parece extraño, algo innecesario. Es mucho contacto físico, mucha intimidad, es exponerse, no me gusta eso".

-Fuyu, ¿Tu crees que cuando te veo lo hago como si fueras una exposición?

Chifuyu no supo que responder.

-Cuando te veo, no puedo terminar de caer en cuanto te amo, en todo lo que siento por tí, todo lo que significas para mí... No siento lo mismo cuando veo una exposición, ni aunque esté frente a la mejor obra de arte de todo el mundo.

El chico mudo se mordió el labio, mirando hacia abajo.

Keisuke buscó su mano, tómandola entre las suyas, haciendo que el otro lo mirara.

-Tienes razón de que es íntimo, pero justamente, es algo de ambos... Me muestro ante ti y tú te muestras también, nos mostramos el uno al otro...- se detuvo cuando Chifuyu escribió en su teléfono.

"Exponerse".

Keisuke asintió, fué cuando comprendió a lo que se había referido.

-Nos exponemos al otro, Fuyu. Nos reconocemos y nos compartimos, pero de una forma especial... Tener sexo debe ser una muestra más de amor para que sea perfecto, de ahí su pseudónimo, hacer el amor.

>> Yo no tengo ningún problema en hacerlo contigo, Fuyu, porque te amo. Sé que no estás listo, y sé que te esperaré, pero también sé que quería hablar de esto contigo.

Chifuyu asintió levemente, tecleó en su celular y se lo mostró.

"Tengo miedo de que duela".

Keisuke quiso reír de ternura.

-Te prometo, Chifuyu, que aunque duela, luego no vas a recordar esa parte- habló Keisuke -. No puedo decirte que no dolerá, porque puede que sí, pero ¿Recuerdas lo que sentiste esta mañana, esa sensación?

Chifuyu asintió.

-Al final, te quedarás con eso, recordarás eso y el dolor nunca habrá pasado.