8.

303 42 3
                                    


Sí apa ya te dije que estoy bien, puedo arreglar el bar por mi misma, solo necesito saber donde es mas barato el material para resanar.

Eran exactamente las diez de la mañana y Amelia estaba hablando por teléfono con su padre, había optado por levantarse más temprano para hacer una lista de las cosas que necesitaba comprar y sacar un estimado de todo, y quien mejor que su padre para preguntarle acerca de reparaciones.

Ya se mijita, pero quiero ayudarte, trabajas demasiado y apenas y te pasas por la casa, tu mamá está preocupada y yo también, deja que te ayudemos. — habló su padre. — Debería darte una escopeta para que tengas en el bar, aver si esos pendejos se animal a entrar otra vez.

Marco Andrés Islas era su padre, un señor dedicado a su trabajo en el área de la construcción y seguridad, amaba a su familia aunque el mismo no tenga tiempo para ellos por su trabajo, aún así trataba de hacer de todo para estar con ellos.

— Tu mamá y yo hicimos sopa de tortilla, deberías venir por un poco, aprovechas y te doy mi lista de distribuidores.

— De verdad sabes cómo manipularme, adoro tu cocina, iré a eso de las doce, dile a mamá que no se la coma toda. — dijo Amelia riendo con levedad.

— Amelia Thorne Islas, sabes que te amo mi niña, solo ven a visitarnos, ah y trae a ese amigo tuyo, me cae bien el chamaquito.

¿Samuel? Seguro, le dire si quiere venir, ¿puedo invitar a alguien más?

— ¡Claro que sí! Mientras más mejor, aquí te espero, cuídate.

— Igual pa.

Con esto colgaron la llamada, Amelia suspiro y se recargó en la pared cerca del teléfono, amaba a su familia, pero a veces eran demasiado protectores.

Tomó el teléfono nuevamente y llamó a Samuel, esperando a que respondiera.

— Samuel al habla. — respondió el menor, se podía escuchar música de fondo.

— Hola Sam, ¿qué tal? ¿estás libre hoy?

— Todo bien, y sí, solo tengo que terminar unos diseños para empresas fantasma y estoy libre, ¿por?

— Mi papá nos invitó a comer, te llamaba para decirte si querías venir.

— Si es comida de tu papá claro que quiero, el señor Islas cocina increíble.

— Entonces te espero en mi casa para irnos juntos, ven a las doce, le llamaré a Marie para ver si quiere venir.

— Ella no ha conocido a tus padres, ¿verdad? Se va a desmayar cuando pruebe su comida.

— Haha, sin duda, bien, nos vemos más tarde.

Después de hacer una llamada más a Marie fue a cambiarse para su salida familiar, simplemente ató su cabello en una cola baja, una camiseta blanca, mom jeans y una camisola de color mezclilla oscuro, algo casual.

Dos horas pasaron y Samuel llegó junto con Marie a la casa de Amelia. Samuel llevaba shorts caqui, una camiseta blanca y una camisa de mezclilla, Amelia lo miro y ambos gritaron de emoción.

𝑨𝒛𝒖𝒍 𝒅𝒆 𝑴𝒆𝒅𝒊𝒂 𝑵𝒐𝒄𝒉𝒆 ┤ʟᴇᴏɴᴀʀᴅᴏDonde viven las historias. Descúbrelo ahora