episode 13. Fiesta

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AQUÍ ESTAMOS, EN LA DICHOSA fiesta, a mi lado disfrazadas de burbuja y Bellota están Ángela y Lucy «yo, por supuesto soy Bombón» Juntas, formamos el trío perfecto: Las chicas superpoderosas

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AQUÍ ESTAMOS, EN LA DICHOSA fiesta, a mi lado disfrazadas de burbuja y Bellota están Ángela y Lucy «yo, por supuesto soy Bombón» Juntas, formamos el trío perfecto: Las chicas superpoderosas.

Nosotras, como Burbuja, Bombón y Bellota, llevamos trajes idénticos con brillantes colores rosa, verde y azul. Nuestros vestidos son una réplica exacta de los que usan las heroínas animadas, y no podemos evitar sonreír mientras miramos nuestros disfraces en todo su esplendor.

El lugar está repleto de chicos y chicas, todos disfrazados de diferentes superhéroes y villanos. Veo a Superman charlando con Spiderman en una esquina, mientras que Batman y Joker compiten en una partida de ping-pong en otra.

Mientras tanto, la casa se había convertido en el epicentro del caos, con luces parpadeantes, música atronadora y pancartas que muestran a nuestros superhéroes favoritos en acción,  y desde luego, una multitud enérgica que bailaba sin parar. El ambiente estaba cargado de emoción y entusiasmo, como si la euforia colectiva llenara cada rincón del lugar.

Las luces de neón proyectaban destellos eléctricos sobre las paredes, creando un espectáculo visual hipnotizante. Lámparas colgantes y linternas parpadeaban en sincronía con la música, pintando el ambiente con colores vibrantes y cambiantes. Las sombras de los bailarines se movían en formas casi surrealistas, creando una atmósfera de ensueño en medio del bullicio.

La música era ensordecedora, una mezcla frenética de ritmos que hacían que el suelo vibrara bajo mis pies. El bajo reverberaba en mi pecho, haciendo latir mi corazón al ritmo de la fiesta. La gente se movía al compás de la música, saltando y girando, liberando toda su energía acumulada.

Entre la multitud, me encontré con caras conocidas y desconocidas. Amigos de la escuela, amigos de amigos, y algunos rostros nuevos que habían llegado a la fiesta. Las sonrisas eran contagiosas, las risas incontrolables, y las miradas cómplices compartían la emoción de la locura colectiva que nos envolvía.

FEMINIST, moxieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora