ONLY YOU III | ZACH MITCHELL

PANQUEQUES

Favor de leer la nota del final, muchas gracias.

Pasaron 11 años desde nuestra boda, Zach y yo estábamos casados, actualmente estábamos de vacaciones en una hermosa casa en la playa que Zach pudo comprar después de mucho esfuerzo y con algo de ayuda de nuestros padres.

Bebía mi café en la mesa que estaba en el pórtico de la casa mientras veía las olas, el aroma salado de la playa inundaba mi nariz, el sol apenas estaba comenzando a salir, Oddy corría por la arena entrando y saliendo del agua, sonreí ante la imagen hasta que nuestro pequeño gato Ciro comenzaba a salir de casa para tomar el sol.

Zach salió sonriendo algo adormilado mientras tallaba sus ojos, había dejado crecer su barba y se veía increíble.

— Buenos días, linda — sonrió acercándose a mi.

— Buenos días, querido — dejé que me besara antes de ver cómo pasa atrás de mi y comienza a masajear mis hombros.

— Es hora, debemos ir a pasear con ellos — dijo él y pude sentir su sonrisa.

— Bien... iré por ellos — miré hacia arriba y sonreí.

Minutos después entré a la habitación mirando la cama y asomé mi cabeza de nuevo para ver a Zach.

— ¿Dónde está Liam? — pregunté viendo a mi esposo cargar al pequeño Jeremy quien seguía algo adormilado.

— No lo sé, cielo... revisa en el baño — me dijo mientras acariciaba la espalda de nuestro hijo pequeño.

Avancé al baño de la habitación y toqué dos veces.

— Liam, ¿estás ahí? —

— Sí, ahora salgo — me dijo mi hijo mayor.

— Tómate tu tiempo, ¿algo especial que quieras de desayunar? — le pregunté.

— ¡Panqueques! — gritó Jeremy entrando a la habitación sin su pantalón mientras Zach lo seguía corriendo sosteniendo sus pantalones de pijama de color verde, una vez llegó conmigo lo levanté y besé su mejilla.

Liam salió del baño sonriendo, mientras se secaba las manos.

— También quiero panqueques — dijo y picó el estómago de su hermano haciéndolo reír.

— Panqueques serán — besé la cabeza de Liam como un saludo y bajé a Jeremy para que ambos comenzaran a jugar a las luchas y Zach intentaba detenerlos para ponerle los pantalones a Jeremy.

— Si no usas pantalones, las hadas de los pantalones te los robarán— le dijo Zach a Jeremy mientras todos salían corriendo detrás de mi.

Comencé a bajar lo que necesitaría para los panqueques de la estantería y miré a mis tres chicos corriendo mientras Zach parecía querer llorar.

A Jeremy no le gustaba usar pantalones, no sabíamos por qué pero los detestaba.

— Jeremy — llamé la atención del más pequeño — ponte los pantalones, por favor — dije sin expresión a lo que Jeremy río y lo miré haciendo que dejara de reír y corriera en dirección a Zach quitándole los pantalones que llevaba en las manos y comenzó a ponérselos.

Miré a Zach quien parecía no entender cómo lo había hecho y me reí de su expresión, los niños salieron a darle de comer a Oddy y a Ciro mientras Zach se acercaba para ayudarme con el desayuno.

— Lo de Jeremy ya es personal — me dijo sacando las moras del refrigerador.

— No es personal — reí poniendo los huevos en el tazón junto con la harina y la leche —

— Claro que lo es... te adora, no me deja amar a mi esposa porque es un envidioso — dijo haciéndome reír.

— Él te adora con todo su corazón, Zach — le dije mientras comenzaba a revolver la mezcla.

— Sabes... me recuerda mucho a Rocky — río con nostalgia.

Tanto Rocky como el señor Pitsy eran muy viejos y murieron cuando Liam cumplió siente años, Zach piensa que Rocky regresó reencarnado en Jeremy pues son muy parecidos... a Jeremy tampoco le gustaba bañarse.

— ¿Crees que Liam los recuerde? — le pregunté antes de que él tomara el tazón y comenzara a revolver la mezcla por mi.

— Claro que los recuerda, los extraña mucho, además de que Rocky era su mejor amigo, hace unos meses me pidió ayudarlo a convertir el collar de Rocky en una pulsera que pudiera usar — sonrió.

— ¿Qué?¿Por qué no me contaste? — golpeé su hombro suave.

— Era una manualidad padre-hijo — dijo.

— ¿Y dónde está? — pregunté haciendo memoria y no recordaba ver la pulsera hecha del collar.

— Oh... aún no empezamos a hacerla y a él luego se le olvida — dijo simple.

— Regresando del paseo terminarás esa pulsera, ¿entendido? — dije tomando el sartén y encendiendo la estufa para prepararlos.

— Sí, señora — habló antes de reír.

— Bien —

Los niños regresaron llenos de arena mientras reían, le pedí a Zach que terminara de preparar los panqueques mientras los niños se daban una ducha.

Jaremy se quejó y lloró un poco para no bañarse pero al final logré hacerlo entrar y lavé su bonito cabello castaño.

Salí de baño con el pequeño en brazos el cual llevaba su toalla favorita, tenía una especie de gorro era de un dinosaurio, le encantaba, solo veíamos dinosaurios en la ciudad ya que la zona en la que estábamos pasando las vacaciones era una zona protegida y estaba libre de criaturas.

Jeremy me pidió que antes de ponerle ropa podíamos ver si ya tenían listos los panqueques, fuimos rápidamente y pudimos ver a Liam sentado en la mesa comiendo sus panqueques, Jeremy me propuso comerlos en su toalla pero me negué, Liam al adorar a su pequeño hermano se acercó a nosotros sosteniendo su tenedor con un trozo de panqueque y se lo acercó a Jeremy quien comió gustoso.

Después de eso entré a la habitación de Jeremy y busqué ropa para ponerle.

Apenas logré terminar de vestirlo salió disparado de su habitación hacia la cocina y abrazó las piernas de Zach pidiéndole que le sirviera sus panqueques.

Todos desayunamos gustosos, charlando sobre temas triviales y haciendo chistes, sabíamos que Owen llegaría con los demás en unos días para celebrar mi cumpleaños.

Pero por el momento estaba feliz, tenía todo y sabía que teníamos una vida feliz, no necesitábamos de mucho pero nos teníamos a nosotros, cuando Zach y yo nos dimos cuenta que teníamos a nuestra propia familia nos dimos cuenta que finalmente estaríamos en paz, si, teníamos algunos problemas e incidentes de pequeñas caídas y lloriqueos pero nos esforzamos mucho en criar a nuestros pequeños y nos aseguraríamos de darles la mejor vida posible.

Zach sentía un orgullo enorme al ver cómo Liam trataba a Jeremy pues no quería que Liam cometiera los mismos errores que él con Gray, si, Gray lo adora pero Zach pensaba que Liam no debía ser sometido a una experiencia como la del parque para valorar a su hermano, así que Liam trata a Jeremy como lo mejor que le pasó y así fue.

Un día Liam nos dijo que el mejor regalo que le habíamos otorgado había sido Jeremy y que nunca podríamos darle algo mejor, después de su nacimiento Liam no quería regalos de cumpleaños pues decía que Jeremy valía más que todos los regalos de cumpleaños juntos, ese día, Zach lloró de lo bonito que le pareció.

Y ahora aquí estamos, somos la familia Mitchell y estamos felices y orgullosos de ser quienes somos, de mantenernos unidos y amarnos como lo hacemos.

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Este es un final "alternativo" pues yo sé que a muchas personas no les agrada la idea de un embarazo o hijos pero hay otras a las que sí y aquí está un capítulo para aquellas personas a las que les agrada la idea.

Espero lo disfruten y ocasionalmente y tendrán vistazos a la vida de los Mitchell así que no será la ultima vez que vean algo de Zach y Kate en su vida de casados.