⋘ 𝑃𝑙𝑒𝑎𝑠𝑒 𝑤𝑎𝑖𝑡... ⋙
𝐍𝐨𝐰 𝐥𝐨𝐚𝐝𝐢𝐧𝐠...
𝐍𝐨𝐰 𝐥𝐨𝐚𝐝𝐢𝐧𝐠...
ᴄᴏᴍᴘʟᴇᴛᴇ!.
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Tubbo despertó con el olor a pan de miel en el aire.
Se sentó en su cama, mirando a la nada por al menos cinco minutos antes de reaccionar correctamente. Dio un bostezo y se frotó los ojos en busca de alejar su sueño. Una vez ya estuvo un poco más despierto, decidió que era buen momento para salir de su cuarto. Mientras se colocaba sus pantuflas se dio cuenta de que faltaba algo. Levanto la vista hacia su ventana, notando como 1. Estaba cerrada y 2. Su cuervo no estaba. Eso fue extraño, el cuervo había estado pegado a él en todo momento (menos cuando su padre o algún otro adulto se le acercaba) lo despertaba cada mañana diciendo algún dato aleatorio sobre el clima o cosas así. Pero justamente hoy, no estaba. Fue raro y se sintió extraño, se había acostumbrado a su presencia y el que ya no estuviera lo deprimía un poco.
Sí, era molesto y ruidoso. Pero le quería.
Espera un momento ¿Por qué esas palabras sonaban como una descripción conocida? Era como si las hubiera usado en algún momento para describir a alguien.
Negó. ¿En qué cosas estaba pensando? ¡Hoy es su cumpleaños! Debe concentrarse en eso.
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Quackity miro a su hijo con una sonrisa. El niño estaba corriendo por el lugar junto a sus amigos y la risa que este soltaba era lo bastante fuerte como para saber exactamente donde estaba. La música sonaba de forma que no era molesta para las conversaciones que se daban, pero animaba a todos en el sitio. Podía escuchar a sus amigos hacer el tonto y a otras personas (más que nada, los padres o tutores de los demás niños que habían ido) que se animaban a hablar o a seguirle el juego a los pequeños.
Ya era tarde. La fiesta había empezado después del mediodía y ya habían pasado algunas horas. Pero parecía que nadie se cansaba. No se quejaba del todo, sabía que al final del día el que su hijo se durmiera no iba a ser un problema.
Estaba seguro de que Tubbo iba a caer dormido, apenas tocara la cama.
El hombre estaba feliz, todo en ese día estaba yendo de maravilla. No podía pedir nada mejor. Ver a su hijo feliz, lo hacía feliz. Y el ver que estaba en un lugar seguro le hacía sentir seguro. Suspiro con tranquilidad y agarro una de las bebidas que estaban servidas o por servir. Se la llevo a la boca y miro a su alrededor. La verdad no estaba muy interesada en unirse a alguna de las conversaciones, estaba algo cansado a ese punto del día y de forma sincera, necesitaba un momento. Así que con esa razón fue a sentarse en una parte un poco más tranquila.
Estaba mirando a los niños jugar. Sonreía y soltaba risitas al ver como sus juegos trataban de imitar historias de caballeros y monstruos. A la distancia aún podía captar algunas conversaciones que pasaban entre los adultos, pero no eran su mayor preocupación. La música lo relajo y de un momento a otro su mente se desconectó. Estaba presente, pero demasiado centrado en sí mismo.
Todo se sentía tan bien que. . . Era extraño. Algo no estaba bien.
Es como. . . ¿Alguna vez has sentido que es imposible que todo esté saliendo bien? Llámale loco, pero es como si en este momento, algo no encajara. Como si hubiera una pieza que faltara o estaba olvidando algo muy importante que debía hacer en ese momento. Sentía que no era posible que todo estuviera marchando de maravilla. Era imposible.
Trato de respirar. «Cálmate» se dijo a sí mismo. Solo estaba siendo paranoico de nuevo. Simplemente eso.
¿No?
Quackity suspiro nuevamente. Cerro los ojos y le dio un trago a su jugo de fresa. Estaba tratando de calmarse cuando sintió algo extraño.
Alguien le estaba tomando del cuello. A pesar de ser un agarre gentil, que se podía comparar con una simple caricia que deja una huella invisible. Lo estaba aterrando. Trato de respirar, pero el aire no pasaba a sus pulmones. El agarre se volvió violento y fue cuando empezó a tener verdadero miedo. Trato de mirar al causante, pero no había nada. Estaba solo, sentado en una silla que ahora se sentía demasiado cómoda. Su mente se puso en marcha y mientras más esfuerzos hacía por respirar, menos lo lograba.
Entonces alguien se le acercó y le susurro con toda la calma del mundo: «Ladrón»
Lo soltaron y mientras sus sentidos se relajaban de nuevo, pudo escuchar una explosión. El sonido fue demasiado fuerte y eso solo indicaba que fue cerca. Miro con terror de donde provenía el sonido y sintió que su mundo se venía abajo.
¿Dónde están los niños?
JAJA NO VOY A ESCRIBIR MÁS. ME VOY A DORMIR. UN BESO CULONES <3
(mientras edito esto, debo decir que estoy hasta la madre. Mi vecino esta con música fuerte y de hace die minutos estoy escuchando como él o uno de sus amigos vomita porque están hasta quien sabe donde de borrachos)
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[ Yellow ] • Karmaland V • PAUSADA
FanfictionDonde a Quackity se le es dejada una canasta y una nota.