Fuera del Molde: Min Yoongi (Jinsu)

14.

Dos meses habían pasado, el semestre había pasado rápido y los exámenes de mitad de semestre se acercaban. Varias cosas habían cambiado desde el día en que Yoongi y Seokjin habían terminado, empezando con la dinámica del grupo de amigos, en la hora de almuerzo era cuando más se notaba el quiebre. Yoongi se sentaba con su mejor amigo Namjoon, Jimin y Seokjin en otra mesa, mientras que Taehyung se iba turnando para estar con cada uno. Después de un tiempo Seokjin y Jimin ya ni siquiera iban a la cafetería de humanidades, habían vuelto a comer en la cafetería grande, y por lo que le comentaba Taehyung a Yoongi, el alfa había vuelto a compartir con sus compañeros y compañeras de carrera, tal como era antes de conocerlo. Pese a ello, ambos le habían pedido a los demás que no se rompiera del todo la amistad, si bien la situación era incomoda, ninguno quería ser el culpable de que el grupo dejara de existir. Cada ciertos días se juntaban, solían estudiar juntos para darse apoyo, tal como lo hicieron el primer semestre, ahora con los exámenes cerca solían estudiar a diario hasta tarde en la biblioteca.

Además de la distancia entre los amigos, no había mucho que hubiera cambiado en la vida de Yoongi, más bien era como si todo volviera a ser lo de antes, de vuelta a la rutina a la cual se había acostumbrado durante sus primeros años de universidad. Iba a la universidad y volvía a su casa de lunes a viernes, los fines de semana trabajaba en la librería y así era cada semana.

No sabía muy bien cómo es que el señor Park y su familia no lo habían despedido, había faltado dos fines de semana a la librería sin ninguna justificación y aun así lo recibieron con los brazos abiertos, al parecer el señor Park había cubierto sus turnos, le había agradecido mucho por eso, sin duda era un buen hombre, alguien que lo cuidaba.

Estaba el grupo de amigos estudiando en la biblioteca de la universidad, Yoongi no podía evitar observar a Seokjin mientras estudiaban, varias personas se le acercaban, parecía bastante popular ahora, más de lo que era antes o quizás nunca notó lo mucho que la gente parecía agradarle el alfa, ya que cada vez que estaba con él la gente solía alejarse. Aunque el alfa se veía bien, él podía notar que era una mentira, era como si se hubiera puesto una máscara, adornada con una gran sonrisa falsa la cual le mostraba a cada persona que se acercaba a él. Odiaba esa sonrisa falsa, quería borrarla de su cara, pero no había nada que pudiera decir o hacer, después de todo ya no estaban juntos y tampoco era como si fueran buenos amigos, simplemente trataban de estar bien frente a los demás para hacer la situación menos incomoda.

Molesto decidió tomarse un descanso, les indico al grupo que iría al baño y caminó rápidamente lejos de la biblioteca. Se lavó el rostro, se talló varias veces con las manos dejándose la cara levemente roja. No entendía porque le molestaba tanto ver al alfa, ya no estaban juntos y fue él quien decidió ponerle fin a la relación, debería estar bien, pero no lo estaba.

- ¿Sucede algo dulcecito? – Alguien apareció por detrás de él, sabía quién era solo con oler el desagradable aroma que desprendía, pudo corroborarlo con el reflejo del espejo - ¿O cómo era que te decía ese alfa patético? ¿pastelito?

- No me digas así.

- ¿No puedo? ¿Entonces cómo quieres que te llame?

- Prefiero no tener que oír nada que salga de tu boca.

- No sabes las cosas que puedo hacer con mi boca además de hablar.

- Déjame en paz- Salió del baño, seguido por el alfa.

- Se que te podría hacer sentir muy bien.

- ¿Acaso te gusto que me sigues tanto? – Le respondió burlón el omega.

- Claro que me gustas – Le dijo, acorralándolo contra una pared – Creí que era evidente – Lo tomó el rostro con una mano – Y serás mío Yoongi.