Lilith era una mezcla de emociones, propias del primer día en un nuevo lugar. Miedos y nervios mezclados con la ilusión de comenzar algo. Una nueva vida.
Se había arrepentido de pedirle a Jack que se fuera. Apenas había podido pegar ojo en toda la noche, debido a los nervios, al menos con él habría estado entretenida.
Mientras esperaba a Olivia, que había pasado a recogerla por casa de su madre, le había dado tiempo a aplicarse una buena capa de maquillaje y corrector, por lo que nadie se daría cuenta de que había pasado la noche en vela.
—No te puede poner nerviosa conocer a futbolistas profesionales —dijo Olivia, mirando la expresión ansiosa de Lilith.
Se encontraban en la sala de prensa, esperando a los miembros de la plantilla del primer equipo. Ahora que el departamento de comunicación estaba completo, iban a presentarse. Aunque en realidad solo había tres personas nuevas, Olivia, Lilith y la nueva community manager. Alysha. Una guapa chica americana. De piel oscura y pelo rizado, adornaba su nariz con dos piercings. Uno al lado y otro en el centro. Y completaba su look con un eyeliner envidiable.
—A cualquiera le pondría nerviosa —intervino Alysha para animarla. Aunque ella no parecía nerviosa. Las dos veces que la había visto, a Lilith le había parecido una persona muy segura de sí misma.
A Lilith no la ponían nerviosa los futbolistas en sí. Ya había pasado por eso. Era el hecho de saber que había escrito cosas horribles sobre algunos de ellos, muchas de ellas ciertas. Mirarlos a la cara y saludarlos con una sonrisa sabiendo lo que sabía le resultaba incómodo. También le preocupaba que algunos de ellos la reconocieran después de lo que pasó con Jack. Había algunos ingleses en el equipo con los que sabía que él se llevaba bien. No quería que en su primer día de trabajo la estuvieran juzgando por con quién se había acostado o cuándo.
Las risas y las voces empezaron a inundar la sala, mientras iban entrando los jóvenes, ataviados con sus ropas de entrenamiento. Se fueron sentando en las sillas de la especie de auditorio.
Lilith se sentía como cuando tenía que exponer trabajos en la universidad, solo que diez mil veces peor. Intentó permanecer con la cabeza gacha y medio escondida detrás de sus compañeros. Sin hacer contacto visual.
Por suerte fue Olivia la que llevó la voz cantante en la reunión. Explicando quién era ella y cuáles serían los cambios que iban a implementar en el departamento de comunicación ahora que había tomado el mando. Se notaba a leguas la experiencia que tenía trabajando en una gran marca repleta de personalidades importantes. Cada una de sus palabras y sus gestos derrochaba seguridad y autoridad.
Llegó el turno de presentar a las otras dos nuevas incorporaciones. Alysha saludó con un guiño a la sala. Y recibió bastantes miradas de interés poco disimulado.
Lilith recordó por qué había despreciado a ese gremio durante años. En su turno no le quedó más remedio que mirar a los jugadores. Su mirada se trabó en la de Marcus Rashford, al que le pareció ver fruncir el ceño y negar con la cabeza.
Olivia dio por finalizada la reunión para que todos pudieran ir a comer.
—¿Vienes a comer con nosotras? —le preguntó Lilith a Alysha.
—No puedo. Tengo que ir a casa —se disculpó —. Pero otro día seguro.
Se despidieron de ella en la entrada del edificio. Ellas iban a salir al parking, donde se encontraba el coche de Olivia. Y su compañera por la puerta de peatones. Vivía cerca del trabajo.
Una vez a salvo. Dentro del cubículo Lilith emitió un sonoro suspiro. Había sobrevivido a su primera mañana de trabajo y a conocer a los jugadores. Sabía que eso no era nada comparado con cuando tuviera que trabajar con ellos mano a mano y, sin embargo, esa situación la ponía menos nerviosa. Cuando le tocase trabajar con alguno de ellos ella sería la que mandaría en la situación, tendrían que hacerle caso y además podría demostrar que estaba allí porque era buena trabajando y que era mucho más que una chica que salía en revistas.
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Demon |Jack Grealish | #PGP2024
FanfictionLilith dedica su vida a desenmascarar futbolistas. A demostrar que no son las personas que la gente idolatra. Sobre todo a uno de ellos, a Jack Grealish. Hasta que todo su mundo se vuelve patas arriba cuando su mejor amiga le presenta a su nuevo no...