【¿ ᴅᴇ ᴠᴇʀᴅᴀᴅ ᴍᴇ ᴀᴍᴀꜱ?】/ᴴᵒʷˡ ˣ ᴸᵉᶜᵗᵒʳᵃ

En el que no paras de llorar.

Una extraña furia recorría el cuerpo de la joven, acompañada de unas inmensas ganas de llorar...Tal vez su reacción podría ser un poco exagerada a los ojos de alguna otra persona, pero primero deberían entenderla, pues aquel hombre que había idealizado por tanto tiempo resultaba ser una completa basura ahora que se conocían. Aquel hombre guapo, aparentemente encantador, amable y cariñoso que pintaban en la película no era para nada parecido al que ella conocía . Claro que conocía bien al del libro, pero a ella le gustaba sufrir, imaginar que era una persona diferente.

Esa noche no durmió en lo absoluto, prefirió quedarse pensando en todos los estúpidos escenarios que había imaginado tantas veces atrás, o en esas veces cuando veía esa película que tanto le encantaba, cuando notaba como él tomaba con delicadeza la cintura de Sophie , con esa sonrisa tranquila en sus labios, no esa sonrisa arrogante que Howl mostraba algunas veces al ver como _____ observaba a las chicas que el metia a su habitación .

— Imbécil...– Susurro con esa vocecita quebrada y llena de ira, soltándose a llorar nuevamente.

La chica decidió levantarse de la cama apenas los primeros rayos de sol entraron por su ventana. Se dirigió hacia aquel pequeño baño y decidió tomar una ducha de agua helada ... Le gustaba por alguna razón. Luego de vestirse bajó las escaleras , pensando en que haría después de desayunar. No iba a complicarse mucho.

La aburrida mañana transcurrió como siempre, con normalidad. Uno que otro cliente tocaba a la puerta y _____ solo abría para avisar que Howl aún no se encontraba en casa y que no sabia cuando volveria pues según "tenía un asunto muy importante que resolver" .

– Lo siento, es que en verdad yo no puedo atenderla...– Decía la joven con una expresión preocupada en su rostro .

– ¡ Por favor muchacha, necesito quitarme esto urgentemente!- Gritaba aquella mujer cubierta completamente de un color violeta intenso . No sabía a qué se debía y prefería no preguntar .

– Es que no puedo de verdad... – Contestó la chica retrocediendo un poco más.

– ¡ Mira condenada muchacha , no me importa si el esta aqui o no, de algo tienes que servir aquí!-- Gritó la mujer, dispuesta a entrar al castillo.

– ¡ Que no puedo!-  Contestó _____ en un tono casi igual de alto que la mujer, luego cerró la puerta rápidamente al ver como se acercaba.

Soltó un largo suspiro y pronto se dejó caer en uno de los escalones detrás de ella.

– Que mujer...– Susurro para si misma.

Aunque su comportamiento decaído y triste de la noche anterior había cambiado abruptamente seguía sintiendo esa misma sensación en su pecho, como ese dolor que no se iba, por eso mismo quería mantener su atención en otra cosa .

Mientras limpiaba la planta baja una vez más no pudo evitar preguntarse... " Mamá estará preocupada por mi? ¿Alguien...?" . ¡ Es verdad! Todo aquel tiempo no se detuvo a pesar tan detenidamente si alguien en su mundo estaba triste o preocupado por ella, pues si bien no convivia con mucha gente o no tenía muchos amigos, había alguna que otra persona que podía llegar a preocuparse por ella.

– Imposible... Hace mucho que no me comunico con ella...– Pensó en voz alta. Era algo cierto, pues su madre nunca llamaba a menos que ella lo hiciera... Raras veces a decir verdad. No eran una familia muy unida.

Decidió que no era buen momento para recordar a aquella mujer que la hizo sufrir tanto en algún punto de su vida, así que mejor se dispuso a seguir limpiando ese viejo piso de madera bajo sus pies. Limpiar no era un trabajo que le entusiasmase demasiado, pero era una chica algo desesperada, no le gustaba vivir entre tanto polvo o suciedad. Como una señora . Tampoco es como si el castillo estuviera muy sucio, pues ella lo limpiaba unas cuantas veces a la semana, y lo hacía demasiado bien, pero en estos momentos no había mucho con lo que distraerse .