Trece

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Lejos de la manada, observando la situación que se había llevado en ese lugar, se encontraba preocupada nada más ni nada menos que la diosa Luna.

Se sentía culpable y frustrada, se suponía que tenía un plan, en específico para Jungkook y Taehyung pero tal parece que las cosas no resultaron como había planeado.

Ahora tenía otro plan, tenía que bajar y solucionar el problema personalmente.

^¿Estas seguro de esto?

~Ya te dije que sí, solo iré, veré la situación, la arreglare y...

^¿Buscarás a Namjoon por un poco de amor?

Suspiró mientras rodaba los ojos, a veces su lobo podía ser estúpido y sin gracia, no iba a mentir, tenía planeado visitar al líder de esa manada también, pero hasta allí.

~Por favor, Youngjae, tómate las cosas de manera seria por una tan sola vez.

^Y lo hago, pero no me niegues que no aprovecharás de estar un rato con él.

Ignoró las palabras de su lobo y se preparó para su viaje, uno de los derechos que tenía por ser "diosa Luna" era el poder recordar perfectamente sus vidas pasadas y en algunas de ellas fue omega de Kim Namjoon, logró una hermosa relación y conexión con él así que cuando se dio la oportunidad y fue escogido para lo que es ahora no perdió la oportunidad de estar pendiente y comunicarse con él.

Claro, aunque tenga que soportar a la chillona y fea de Minah.

~Ya me voy.

^Suerte cariño, salúdame de paso a Jaebum oppa, por favor.

Rodó los ojos ahora divertido por el innecesario oppa.

~Si si, has bien tu trabajo y cuida todas las cosas desde aquí.

^Pues claro, estás hablando con Youngjae el mejor omega del mundo.

~Si, si lo que tu digas.

^Vete ya, pórtate bien, no le vayas a jalar las greñas a Minah.

La risa estridente luego de sus propias palabras del omega llegó a él, bufó mientras se sentaba en posición de meditación.

~No me envíes muy lejos ¿de acuerdo?

No tuvo respuesta de parte de Youngjae así que sólo cerró los ojos, concentrándose y listo para el viaje.

***

—¡Lo odio! Le dije que no me enviara tan lejos-chilló con furia mientras caminaba sin ganas en medio del bosque.

Cuando volvió a abrir los ojos esperando encontrarse cerca de la manada se encontró sobre la rama de uno de los árboles cerca de la ciudad.

Llevaba más de una hora caminando, tenía sed, hambre y sueño. Si moría sería culpa de su lobo, ya que cuando la diosa Luna baja, su lobo debe quedarse para no perder el equilibrio y poder entre los lobos, así que en tierra se encontraba solo su forma humana.

—Ya casi llego, ya casi. - dijo entrecortadamente por el cansancio.

Estaba tan concentrado en sus palabras que no reparo en la silueta que lo seguía desde hace unos minutos, hasta que éste habló robándole un grito del susto.

—Tranquilo, no era mi intención asustarte. - le dijo con una sonrisa dulce.

—Namjoonie... - dijo con emoción mientras corría a los brazos del moreno que lo recibió contento.

—También me alegra verte, diosita. - dijo Namjoon y antes de poder envolver por completo su cuerpo, fue alejado un poco.

—También me alegra verte, diosita. - dijo Namjoon y antes de poder envolver por completo su cuerpo, fue alejado un poco.

—¿Diosita? ¿Ya vas? ¡Que no soy mujer! ¿Es tan difícil creer que puede haber un dios luna? Porque lo soy. - dijo exasperado ganándose una risa fuerte de parte de Namjoon.

—De acuerdo, de acuerdo.-dijo tomando sus hombros. —No te enfades solo era una broma.

El chico castaño hizo una mueca mientras observaba fijamente a Namjoon para después abrazarlo con fuerza, enterrando la nariz en el pecho del contrario.

—Te e extrañado mucho Namjoonie.-murmuró feliz de nuevo.

Namjoon acarició el cabello castaño del alto con cariño, sabía que estaba faltándole el respeto a su pareja pero el hombre entre sus brazos ha sido muy importante para él en toda su vida.

—Yo también te e extrañado, Seokjin.

***

Luego de su emotivo encuentro se encontraban por fin en la manada, de camino a la casa del alfa, Jin necesitaba descansar antes de dar con Jeon.

—Ya es algo tarde, búscalo mañana y por ahora descansa. - le dijo Namjoon entrando a la casa, seguido, de Jin.—mañana temprano iremos y hablaremos no solo con él si no con Jimin también.

—De acuerdo.-murmuró.—Lo siento, Namjoonie, las cosas no salieron como habíamos planeado.

Hace unos años, antes de que Taehyung naciera Seokjin había estado pendiente más que todo en la familia Jeon, cuando vio de regreso a Namjoon en esos tiempos habían planeado destinar al hijo de la familia Jeon con el de la familia del alfa.

Ambos lo habían planeado con buenas intenciones ya que consideraban que todo iba a salir perfecto y que de esta forma Jin podía parar la maldición de esa familia y sería un logro como "diosa Luna"

Claro que no contaba con los otros dos chicos, Jin no era cruel en lo absoluto por eso necesitaba hablar y verificar que las decisiones que habían tomado ellos era la correcta.

—No tienes que disculparte, es mi culpa por no estar tan al pendiente de Taehyung y no detenerlo cuando empezó la relación con Yoongi. - dijo serio Namjoon mientras dejaba las llaves de la casa en la pequeña mesita cercana a la puerta principal.—Pero las cosas están hechas, si mi hijo está feliz con ese chico, está bien, no lo voy a obligar a estar con Jeon ni viceversa pero, todavía hay cosas que aclarar con ellos.

—Lo sé y lo haremos mañana temprano. - dijo Jin tranquilo y justo en ese momento recordó las palabras de su lobo.—Por cierto, Youngjae les manda saludos, bueno más que todo a Jaebum.

Namjoon pareció herido por la preferencia hasta que negó divertido.

—Gracias, supongo - murmuró llevándose una mano al pecho.—Mándale saludos de regreso también, Jaebum está muy feliz de escuchar por fin de él.

Y vaya que estaba feliz.

Namjoon ignoró los cientos de preguntas que Jaebum le pedía que le hiciera a Jin sobre Youngjae y cuando estaba dispuestos a caminar a la cocina, se encontró con Minah cruzada de brazos.

—Hola, linda tenemos visitas, ¿recuerdas a Seokjin? Se quedará con nosotros unos días.

Minah observó con seriedad al chico tras su pareja y lo miró mal, claro que lo recordaba, desde la primera vez que se vieron, se odiaron mutuamente.

Parecía que el castaño le iba a robar a Namjoon en cualquier momento y aunque siempre que el hombre aparecía le hacía saber a Namjoon su descontento nunca tomó sus palabras en serio.

—Hola, Seokjin, gusto de verte de nuevo-dijo con una sonrisa falsa mientras caminaba hasta llegar frente a ambos.

Cuando Namjoon se dio cuenta de sus intenciones de querer besarlo, tomó su rostro rápidamente para así dejar un beso en la frente, sabía que ellos no se llevaban para nada bien y no quería incomodar más al castaño con los besos furtivos de su omega.

—¿Ya preparaste la cena? Tenemos hambre, llevaré a Jin al cuarto de invitados para que se acomode y asee ya bajo a ayudarte.

Namjoon no dejo que hablara nuevamente, caminó derecho hasta las escaleras, ajeno a como Minah y Jin se peleaban a muerte con la mirada hasta que Jin empezó a caminar tras Namjoon.

Jin debía aceptar que no tenía tiempo para perder con su rival de amores, debía de concentrarse en lo importante en esos momentos y eso era traer de regreso a Taehyung y Yoongi para así hacer las cosas bien

WolfDonde viven las historias. Descúbrelo ahora