Zadirex: en busca de lo perdido
Inicio de la ensoñación
Capítulo 11
El efecto dramático de la pesada puerta la abriste había sido suficiente para llamar la atención de las personas dentro de la habitación.
¡Jack! ¿qué hiciste?- Emilia expreso con terror al ver la sangrienta escena antes sus ojos, de las paredes goteaba sangre oscura y espesa. En la entrada de la habitación se podía sentir el fuerte olor acre que emanaba la sangre, solo hace un par de minutos esta habitación derramaba lujo en cantidad por todas partes y estaba muy ordenada, ahora solo quedaban no más que escombros y señales claras de una forzosa e inquietante pelea.
Abuelo perdóname- expreso en joven entre sollozos llenos de desesperación mientras se aferraba con fuerza al cuerpo del moribundo anciano.
¡Padre¡- Emilia no pudo evitar ser tocada por el sentimiento de ansiedad y desesperación. Salió corriendo en el encuentro con los dos hombres, al llegar poso sus manos afectuosamente sobre el rostro el anciano y lo observo con expresión triste, luchando por contener esas lagrimas que amenazaban con brotar de sus ojos.
Culpado la manera tan cruel que usaron para utilizar en su contra aun ser tan preciado para ambos y aun mas jugar con el alma e un ser humano muerto. Aunque no era su padre biológico fue el único que la apoyo en el momento en que estaba más vulnerable, en ese preciso momento su corazón además de dolor y tristeza se llenó de rencor he impotencia al no poder hacer nada por su cuenta contra quiénes osaron a meterse con los suyos.
Hiciste lo correcto…- pronuncio el anciano en un tono apenas audible mientras le dedicaba una mirada llena de compasión paternal al joven.
Aquellas palabras en un intento de consuela hacia el joven para que no se sintiera culpable de provocarle heridas se muerte.
Hija mía…- dijo esta vez dirigiéndose a la joven mujer.
confió en que tú… coff… coff…- sus palabras no pudieron ser terminadas debido a que sangre oscura y coagulada comenzó a salir de las comisura de sus labios , tosió con demasiada desesperación sin poder para una vez comenzó y como pudo tomo la muñeca de Emilia y con una mirada de súplica le pedía a su ''hija'' que acabara con esa terrible agonía.
Dudando de si debía o no la mujer decidida a cumplir la petición del mayor tomo rápidamente la daga que colgaba de la cintura de Jack y con leve temblor en sus manos clavo decidida la daga justo en el corazón del hombre.¡Nooooo!- exclamo aterrorizado el joven.
La mujer lo atrajo con fuerza en sus brazos tratando de darle consuelo y llevando lo lejos de la habitación.
-¡Que alguien venga y limpie el lugar!- ordeno con vos severa.
Los grito despavoridos de los que presenciaron aquella escalofriante y devastadora escena no se hicieron esperar mucho.
- ¡Es una orden de su general!- y dejando estas palabras atrás se marchó con un Jack aun en shock.
[…]
En otro lugar del continente Del este el sol comenzaba a hacerse presente llevándose el frío de la solitaria madrugada, los primeros y avivadores rayos del sol revelaban un bello y encantador paisaje de la cruzada del pueblo de Madeleine.
Se podía observar un hermoso verde por doquier y el azul claro del cielo dando la bienvenida a una nueva mañana, la imponentes montañas de verde oscuro daban un claro contraste con el azul profundo del lago, sobre este se observaba un leve brillo causado por los rayos del sol, dentro de un carruaje que pasaba por aquel encantador lugar se despertó una perezosa Miray.
ESTÁS LEYENDO
Zadirex: en busca de lo perdido
Aventura¿Alguna vez le has temido a la oscuridad? ¿Conoces la verdadera razón de este miedo? Un instinto... Un instinto natural de protegerte del peligro que se oculta en la oscuridad de la noche y en tú corazón. De las criaturas del abismo... Sus víctim...