𝗟𝗹𝗮𝗺𝗮𝗱𝗮.

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Me levanté de golpe, sintiendo como mi cabeza dolía fuertemente

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Me levanté de golpe, sintiendo como mi cabeza dolía fuertemente. Me volví a recostar, adolorida. 

Mi vista vagó por todo el lugar, estaba en la enfermería de la escuela. Toque mi cabeza mientras soltaba un quejido, y ahí recordé todo. 

La directora. La nota. 

¿Había sido todo mi culpa? ¿Por qué esto me pasaba a mi? ¿Me tenía que separar de Kyle?

Si no lo hacía, le podrían hacer lo mismo que a la directora. Nunca me lo perdonaría. 

—Estás aquí. 

Escuché su voz a mis espaldas. No me limité a mirarlo siquiera. 

—Fue mi culpa. —dije con ojos vidriosos.

—¿Qué? ¿De qué hablas? —frunció su ceño, mientras ponía ambas de sus manos en mis hombros. —No fue tu culpa. No tienes nada que ver. 

—Si, pude haber evitado todo. Pude haber evitado esa muerte. 

—No, no había manera. No es tu culpa. 

—¡Sí lo es, Kyle! —sollocé. —Si tan solo hubiera hecho caso desde un principio, la Directora Victoria no estaría muerta y tú no estarías en peligro. 

—¿Qué? —me soltó —¿Yo estoy en peligro? ¿De qué estás hablando?

—Tuve que contarte desde un principio, en serio lo lamento. —bajé mi mirada. 

Suspiró.

—Sabía que algo pasaba. —dijo en un murmuro. 

—Perdón, en serio perdón.

—Ahora no necesito disculpas, _____. Necesito que por favor me digas que es lo que está pasando. 

Sentí cómo tomaba mi mano y la entrelazaba con la suya. 

—No estás sola, estoy aquí para ti. Estoy aquí contigo. 

Sus palabras solo me hicieron sentir más culpable.

—Bien —sorbí mi nariz. — Desde hace días me han estado llegando cartas anónimas a mi casillero. Cartas con amenazas de muerte. 

—¿Con qué te amenazan? 

—Dicen que me separe de ti, o de lo contrario, Irán a matarme. 

Permaneció en silencio, con la mirada perdida. 

—¿Por qué amenazarían con eso? 

—¿Crees que lo sé?

—No tiene sentido.. —negó con la cabeza. —¿quién podría hacer esto?

—Honestamente, podría ser cualquiera. Es decir, ¿has visto ya este maldito pueblo? Toda la gente de aquí está demente. 

—Tienes un punto. Pero... ¿por qué a la directora Victoria?

𝗪𝗵𝗲𝗿𝗲 𝗶𝘀 𝗹𝗼𝘃𝗲? | 𝗞𝘆𝗹𝗲 𝗕𝗿𝗼𝗳𝗹𝗼𝘃𝘀𝗸𝗶Donde viven las historias. Descúbrelo ahora