Capítulo 6. Tensión

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—Oh, veo que estás en la nueva habitación.

Ah, se sentía tan bien escuchar ingles sin acentos sureños extraños.

Emma estaba acomodada en su cama nueva, cuarto nuevo, boca abajo, con los ojos enfocados frente a la pantalla de la laptop. Su amiga se veía realmente bien, hace varios días que no habían podido hablar y ahora parecía el mejor momento para ponerse al día.

—No he pintado aún —señaló tras de sí las paredes.

—Pero se ve presentable.

Emma se quedó en silencio, pensando algunas cosas y Stefanie lo notó pese a la distancia y la imagen algo pixelada. La conexión a internet no parecía estar a su favor, pero al menos podía interpretar algunas cosas.

—Me gusta tu corte de cabello.

—Ok, Emm, dime ¿qué pasa?

—No pasa nada.

—Oh, no. No empecemos. No tenemos demasiado tiempo, tengo que estar en el trabajo desde temprano —suspiró mientras sorbía un poco de agua.

Últimamente todos hablan de trabajo —¿cómo vas con eso?

—Me encanta, no estoy ganando demasiado, pero es mejor que el anterior y mi jefe es un viejo dulce y paciente. No podría ser mejor. —sonrió.

—Estoy orgullosa de ti.

—Claro que sí, ahora deja de cambiar de tema.

—No quiero acaparar toda la conversación.

—Emma Myers, tú amas acaparar las conversaciones, eventos, reuniones familiares, entre otros eventos sociales y parecidos.

—Ahora empiezas a sonar como Jenna.

—¿Quién es Jenna? ¿Otra de tus amigas de la infancia de las que me debo preocupar?

—Es la compañera de habitación de la que te comenté.

—Ah, la atropellada. Lo olvidé... ¿cómo va todo entre ustedes?

—No hablamos demasiado, si antes era silenciosa pues ahora ha estado distante.

—Bueno, no falta mucho para que acabe ese contrato raro, ¿no?

Emma se quedó mirando la nada mientras pensaba y dijo en voz baja —...un mes o algo así...

—Creo que te está afectando demasiado.

La joven ojiazul suspiró desde su cama en algún lugar de Los Ángeles y pensaba en todo a la vez. Quizás la preocupación latente sobre la poca comunicación con su roomie radicaba en lo sola que parecía estar. Georgie no lograba hacerla sentir como en casa. Hunter estaba estudiando, Fielder igual, por lo que sus llamadas telefónicas eran cada vez más cortas.

Jenna era lo más cercano a una familia. Una familia disfuncional, extraña, pequeña, silenciosa, apartada... casi desconocida. Muy diferente a su verdadera familia. Pese a todo, quizás su compañera tenía razón. Podría ser que extrañe un poco a sus hermanos y a su mismo padre.

—¿Estás ahí?

—No pertenezco aquí, Stef.

—Espera, ¿por qué piensas eso?

Suspiró. Extrañamente se aguantó bastante bien las ganas de llorar. —Me siento sola.

—Entonces regresa a casa, Emm, nada te detiene.

—Regresar sería demostrarles que no puedo ser independiente. Jenna dice que vivo del dinero de mi padre como un parásito. —frunció el ceño.

—Es ruda. —dijo Stefanie asintiendo. Tomó agua y acomodó el vaso.

THE APARTAMENT. [JEMMA] [Adaptación]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora