XXV.- the good bye

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Sarah

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Sarah

Steven se acercó a mi cuando vio que bajaba mi maleta por las escaleras así que me ayudó a subirla al auto, todas nuestras cosas ya estaban ahí.

— Puedes llamarme en cualquier momento, Jere, no importa la hora mi teléfono siempre estará disponible, sí?

Me abrazo sin responder pero asintió.

— Gracias, Sarah. Te quiero mil.

— Te quiero más, probablemente dejarlos aquí es las cosas más dolorosas que estoy haciendo.

— Ya nos hemos despedido varias veces en los veranos pasados—. Me sonrió.

— Sabes que es diferente—. Asintió con los ojos llorosos y volvió a abrazarme.

— Cuídate, sí? Estaré ahí si necesitas que le dé una paliza a algún idiota, sabes la palabra clave.

— Cocodrilo al agua.

Reímos levemente y dejo un beso en mi mejilla antes de separarnos.

— Mi chica favorita—. Abrace a Steven con fuerza.

— Te quiero, Stev.

— Lo sé, te quiero igual.

— Tienes que cuidar de bell, sí? Tienes mi número en caso de cualquier problema de ambos.

Asintió y puso su mano en su frente haciendo el saludo de los soldados a lo que reí.

— Aún estaré disponible cuando cambies de opinión y te quieras casar conmigo.

— Tengo tu número, yo te aviso—. Le sonreí.

Cuando me aleje de él Laurel vino a abrazarme con ganas.

— Cuida de tu mamá, no serán tiempos bonitos y hay que estar para ella, sí?—. Murmuró en mi oído.

— También estaré para ti, no será fácil para nadie.

— Esa es mi chica, cuídate mucho Sarah.

— Espero vernos pronto y no hasta el otro verano.

— Te quiero.

Suspiré pensando en las últimas dos personas las cuales me faltaba despedirme y sinceramente no sé cuál iba a ser la más difícil para mí.

Volví a abrazar con fuerzas a Susannah teniendo miedo de que si la soltaba sería como dejarla ir.

— No sé cómo hacer esto sin que sea doloroso.

— No tiene por qué serlo, cariño.

— Tengo miedo, no quiero que te pase nada—. Temblé cuando la escuché sollozar.

— No pasará nada, te lo prometo.

— Nos veremos el próximo verano aquí?

— Ya te lo dije; estaremos bien, seguiremos siendo los mismos, sí?

Asentí aún sin creer del todo en sus palabras, me dió un beso en la mejilla.

— Te quiero, Sarah, eres fuerte y sé que vas a arreglar todo y podrás ser feliz.

Le sonreí y bese su mejilla.

Cuando me acerque a belly no dijo nada, ni siquiera me estaba mirando.

— Siento todo lo que pasó, Belly, aunque realmente creo que es nada comparando a lo que está por venir. Si en algún momento te sientes lista para perdonarme házmelo saber, sí? No quería lastimarte de esta manera.

Me miró, pero aún así no dijo nada.

— Te quiero, y sabes que eres mi mejor amiga. Aún cuando no estemos del todo arregladas puedes llamarme si lo necesitas.

Me acerque a ella sin saber cuál sería su reacción pero la abrace, no sabía cuándo iba a volver a verla y no quería irme sin antes hacerlo.

— Lo siento—. Murmuré.

Cuando por fin me despedí de todos gire para ver a mamá quien me miraba con una sonrisa.

Sabía que le estaba costando dejar aquí a Susannah pero no podía quedarse aunque quisiera.

— Estoy lista, ma—. Ella asintió y subió al auto no sin antes decirles adiós a todos con la mano.

Hice lo mismo y volví a subir al auto, cuando se puso en marcha y todos se volvieron un punto en la nada fue cuando me puse a pensar en todo lo que había pasado en un verano, muchas emociones que aún no terminaba de analizar.

Sabía que lo mío con Conrad pudo haber llegado a más de no ser que me estanque en lo que nuestros seres queridos hubieran pensado, sin contar que aunque lo quería no estaba segura de poder estar lista para una relación y no quería que eso fuera un problema.

Todos los veranos aprendía algo diferente de esos cuatro chicos y sus mamás, sabía que aún cuando hubiera mil problemas siempre podría buscarlos, ellos eran mi familia aunque no fueran de sangre.

— Estás lista?—. Mamá freno un poco antes de cruzar el letrero de salida de Cousins.

Vamos a volver el próximo verano, cierto?—. Pregunté dudando de estar preparada.

— Será como todos los veranos anteriores, amor. Estoy segura.

— Está bien, estoy lista.

Mamá siguió avanzando, como estaba de noche no había tráfico por lo cual sería más rápido llegar al aeropuerto.

— Ma.

— Mhm?

— Por qué siento que aún quedaron cosas por cerrar ahí? No se siente como las otras veces, siento que me falta algo.

— Cuando no queremos despedirnos se siente así, Sarah. Sabes que nunca me meto en tus decisiones pero solo por esta vez te daré un consejo—. Guarde silencio esperando a que siguiera hablando—. Nunca pero nunca puedes culparte de querer a alguien, tal vez estuvo mal porque dejaste que todo con belly y Conrad avanzará pero de ahí en fuera solamente seguías tu corazón

>>> Sé que crié a una buena chica, y también sé que jamás estuvo en tus planes que todo esto pasará. Tal vez está era una prueba para ver si aceptarías estar con Conrad a pesar de todo lo que estuviese por venir pero...

— Ma, creeme que tome la decisión correcta.

— Aún cuando tú no estás feliz? Solamente piénsalo cariño; en ninguna de las dos decisiones sales ganando tú. Si estás con él probablemente el enojo de bells dure un rato pero al final de cuentas lo aceptará porque por primera vez verías por tu felicidad antes que la de los demás, pero por otro lado no estás con Conrad y todavía belly aún sigue enojada porque eso no cambio nada.

Y aquí es cuando digo...te lo dije.

— Mejor sigue manejando ma.

Ambas reímos y seguimos nuestro camino.











------- nota de autora----------------

NO QUIERO LLEGAR A ESTE MOMENTO 😿

Así concluye nuestra pequeña historia, espero que les haya gustado. Estoy muy agradecida de todo el apoyo que le han dado y que le siguen dando.

Muchas gracias 💕

Afterglow || Conrad Fisher Donde viven las historias. Descúbrelo ahora