Efecto Cavanagh

14 Un viaje largo

Decidí no decirle a Ainhoa de mi viaje, de todas maneras no iba a estar, sé que ocultarle cosas no es lo mejor pero sus celos para con Cavanagh se hacen cada vez más evidentes y lo peor es que tiene razón en tenerlos.

Pasé a recoger la pelinegra por su casa, subió con el regalo y una mochila.

—Hola.

Se acerca a saludarme con un beso en la mejilla y al darme vuelta, nos dimos medio beso con la boca, hicimos una pausa viéndonos para saber nuestro próximo movimiento y ninguna dió otro paso más.

—Mejor salimos antes de que se haga más tarde.

Pongo el auto en marcha y ella se pone el cinturón. Prendo la radio y la canción que sonaba: "Rápido lento de Emilia y Thiago pzk" dió justo en clavo en lo que nos pasa.

Vos y yo tenemos algo único
Algo fugaz
Desde hace mucho tiempo
Y siempre que nos vemos hay
Un punto de encuentro, una dirección
Donde, llevamos los cuerpos y no el corazón

Asi que acercate
Déjame entender el porqué, cada vez
Que nos vemos siento que se para el tiempo aunque nos comamos rápido lento.

Trago con dificultad y sigo manejando tratando de no prestarle atención a la letra ¿Alguna otra señal universo? Ya estoy con Ainhoa. Cavanagh sonríe con esa sonrisa ladina y le sube el volumen un poco más, sacando mentalmente con las manos el ritmo de la canción.

En el trayecto paramos echar combustible, comprar unos snacks, cambiar de lugar y seguimos rumbo a nuestro destino por una hora más. Llegamos a una bonita casa de dos plantas, afuera sentada nos esperaba la misma pelirroja que había visto con ella ese día en la cafetería. Apenas nos bajamos corre subiéndose encima de Cavanagh, quién la da vueltas antes de bajarla.

—Al fin llegas.

—Ella se aclara la garganta— Audry ella es mi molesta hermana menor, bastante intensa y que no sabe lo que es el espacio personal.

Estuve celosa de su propia hermana, me quiero morir. Ella me mira con un vas a tener que pedirme disculpas ¿No era más fácil decirmelo? Tal vez no estaría con Ainhoa ahora.

—¡Oh! Tu debes ser Audrielle —dice la adolescente emocionada— es un gusto, esta tonta me ha hablado mucho de ti. Que lástima que ese día no entraste a la cafetería, cuando me dijo quien eras salí a buscarte y ya no estabas.

—Es un gusto... —¿Ella le habló de mí a su hermana? Que grata sorpresa.

—Melissa, Meli —me da un gran abrazo— puedes llamarme así ¿Se la presentarás a nuestras mamás? —¿Plural? Solo me ha hablado de una mamá, que es la que cumple años .

—Sí, por eso la traje, sabes que jamás tuve amigas y ella es la primera —Su hermana la miróaconfundida— te dije que Audry tenía pareja Mel —ella se queda helada— bueno vamos adentro.

Cavanagh me toma la mano y entramos con su hermana atrás, una señora pelirroja de pelo largo nos recibe saliendo de la cocina limpiándose las manos, no se parece en nada a la pelinegra pero si a Mel, tiene hasta su color de ojos miel.