Ocho de julio, 2023
04:30✧─── ・ 。゚★: *.✦ .* :★. ───✧
—Dale, Emi. No tengas miedo, vení conmigo —Me decía.
—No sé, Mateo. Quiero pero no puedo —Le respondí al borde del llanto.
—Te voy a estar esperando —Dijo alejándose.
Se dio la vuelta y estaba a punto de desaparecer.
—¡Espera, Mateo! —Grité. —¡Mateo, volvé! —Grité con la ilusión de que se dé la vuelta, pero ya había desaparecido.
Empecé a llorar sin consuelo, cayendo al piso, mientras tomaba mis rodillas y escondía mi cabeza entre ellas.
Y me desperté.
Me desperté transpirada y con lágrimas en mis ojos rodando por mis cachetes.
Últimamente había tenido sueños raros, varios como este.
Me fijé la hora en mi celular.
Las 4:36, tenía tiempo para dormir todavía
Intenté dormirme pero los pensamientos no me dejaban.
¿Y si a través de los sueños algo me estaba afirmando que sí tengo que hacerlo?
Me dí la vuelta y volví a tratar de dormir, pero había algo que no me dejaba. Mi mente no paraba un segundo.
Me desperté y me levanté para desayunar, hoy no tenía colegio ya que era sábado.
—Buen día —Habló mi mamá, Daniela, bajando las escaleras.
—Buen día —Respondí algo incomoda. La relación con mi mamá últimamente no había sido muy buena.
—Me llamó tu papá —Comenzó a hablar mientras se hacía un café. —. Me dijo que te llamó y no lo atendiste.
—Ah, no me di cuenta, no estuve mucho con el celu —Respondí algo fría, no me gustaba hablar de mi papá, y claramente había visto las llamadas, pero no quería hablar con él.
—No pasa nada, dijo si hoy querías ir a dormir a su casa.
En el fondo, muy en el fondo, me dio algo de ilusión.
—¿En serio? —Pregunté con una sonrisa.
—Sí, dijo que era el cumpleaños de la hija de Paola, y ella quería que estés ahí, va a ser algo familiar —Paola era su novia.
—Ah, no sabía que era parte de esa familia —Dije en un tono bajo. En serio me había ilusionado de que quiera verme, pero era obvio que no era idea suya invitarme a su casa.
—¿Vas a ir? —Preguntó mi mamá y la miré negando. —Bueno, te vas a quedar sola igual porque voy a salir con unas amigas —Respondió a lo que asentí.
Ya ni siquiera podía hablar, tenía un nudo en la garganta que me hacía doler la cabeza.
—¿Te vas? —Preguntó al ver que me levanté de la mesa.
Sin responderle subí a mi habitación. No quería ser mala e ignorarla, pero juro que las palabras no salían. Al entrar, las lágrimas comenzaron a salir sin control, me tiré a la cama y me tapé la boca con la almohada, con la intención de que no se escuchen los sollozos.
—¿Qué te pasa ahora? —Preguntó mi mamá abriendo la puerta. No le respondí y seguí llorando. —Siempre un problema distinto con vos, si no te invita te quejas y si te invita también, al final nada te viene bien a vos —Habló con bronca.
No sabía que pasó con mi mamá, nosotras teníamos una relación muy linda, pero hace un tiempo cambió todo.
Mis papás se separaron cuando era bebé, y él nunca me dio mucha bola que digamos.
—Respondele los mensajes a tu papá y dejá de hacer quilombo, porque no te aguanto más así de sensible. Me voy a trabajar —Dicho esto, se fue y después escuché cómo se abría y cerraba la puerta de abajo.
Al escuchar esto pegué un grito en la almohada. No aguantaba más.
Agarré mi celular y revisé las notificaciones, ignorando las de mi papá, después le respondería.
Trueno ha subido una historia.
Al ver esa notificación, la toqué con la intención de que se abra la historia. Él era como una salvación para mí, su música me aliviaba, cuando estaba mal miraba sus batallas de freestyle o miraba sus entrevistas.
Ya sé que está mal tener dependencia emocional de un famoso a los 17 años, pero era a lo que me aferraba para distraerme.
En su momento yo no conocía todo el tema de las batallas de freestyle y todo eso, así que nunca pude verlas en vivo ni nada, me enganché hace un tiempo en esa. Medio tarde igual, eran batallas de 2018 y 2019 y estamos a 2023, pero bueno.
Vi que mi papá empezó a llamarme, tuve que atenderlo porque sabía que si no lo hacía iba a tener más problemas con mi mamá.
—Hola, pa —Dije al atender.
—Hola, Emilia, me dijo tu mamá que no vas a venir al cumpleaños de Lolita.
—Ah sí, no puedo ir, salgo con unas amigas.
—Siempre pensando en vos, ¿qué te cuesta venir al cumpleaños de tu hermana?
—No es mi hermana, pa. Perdón, no puedo ir.
Al terminar de decir eso, corté, ya sentía las lágrimas de nuevo.
Apenas eran las once de la mañana y ya tenía los ojos hinchados de tanto llorar.
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𝐒𝐡𝐢𝐟𝐭𝐢𝐧𝐠 ─𝐓𝐫𝐮𝐞𝐧𝐨
FanfictionDonde Emilia cambia de realidad, enamorándose en el intento. Portada hecha por @rxse_athxna