14 Perfect Day

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Es distinto. Incluso si sigues una rutina al pie de la letra algo al final del día siempre es distinto.

El clima no es igual, las personas a tu alrededor son distintas, la ropa que usas debe lavarse, el desayuno cambia e incluso lo que pensaste ayer es distinto hoy. La verdad es que todos los días son distintos, unos más especiales que otros.










• 10 de abril 2022 •



Muchas personas decían que cuando estás enamorado sientes como si un remolino golpeara tu cuerpo, cada vez que estás cerca de esa persona sientes las famosas mariposas. Papá decía que no era tan complicado como aquello, que cuando estás con la persona correcta lo único que sientes es calma, que eso era lo que sentía con mamá.

Papá decía que hay veces en que tu estómago se revuelve al igual que tu mente, pero era más una sensación atribuida a un miedo, ¿acaso podías estar enamorado y sentir aquello? No lo entendía, pero ahora sabía que la respuesta era: si. Porque amar a SooHye me daba tanta calma, pero tenía miedo de no ser lo suficientemente valiente para hacer algo al respecto.

Había despertado a primera hora después de dormir hasta tarde, cuando trate de estirarme algo a mi lado y un peso sobre mi brazo izquierdo me lo impidieron, tarde solo unos segundos en reaccionar y cuando lo hice lo único que pude hacer fue sonreír cuál estupido.

El día anterior había sido agotador después del concierto y, sin embargo, había sido capaz de resistir hasta que la respiración de Soo se habia vuelto más tranquila. Pasaba de media noche cuando me percate que se había quedado completamente dormida, habíamos puesto Sherk cuando nuestra conversación se acabó, el plan era que cuándo la película estuviera por terminar ella pediría que fueran a recogerla, pero eso no ocurrió por obvios motivos, no había querido despertarla porque parecía estar muy cómoda, así que solo apague el televisor y lance el control sobre la alfombra porque no alcanzaba la mesita de centro, mi plan era dejarla un momento en el sofá para acomodar las cosas y pasarla después a la cama para que durmiera con mayor comodidad, pero cuando la había hecho recostar sobre el sofá en un simple movimiento de había apegado a mi cuerpo y lo único que pude hacer es no hacer nada.

La habitación se había quedado en absoluto silencio y lo único que me permitía tener visibilidad de lo que nos rodeaba era el proyector de galaxia que no había apagado porque me agradaba la atmósfera que producía. El clima era cálido, así que no me preocupe por la ausencia de algo con lo que cubrirnos, me removí solo un poco para acomodarme mejor y ella hizo lo mismo.

Había caído dormido solo unos minutos después, sintiendo el calor que el cuerpo de Soo desprendía mientras me abrazaba con fuerza.

Permanecimos de la misma manera hasta el despertar. Estaba cansado después de los conciertos y el sofa no era el lugar más cómodo para dormir pero, a pesar de eso, me sentía más a gusto que nunca. Podía ver el amanecer por el filo de la ventana que las cortinas me permitían ver, aún era temprano. Hoy no había mucho que hacer, tan solo por la tarde iríamos con los chicos a revisar algunas cosas para el próximo comeback.

La respiración de Soo era tranquila, su expresión facial estaba totalmente relajada así que retirando algunos cabellos que caían sobre su rostro busque tener mejor visibilidad de el, pareció percibir mi toque porque se removió, recargando su rostro por completo en mi pecho y haciendo un leve sonido de queja, como un gatito que se remueve y ronronea. Pasaron unos minutos hasta que pareció despertarse por completo pues se había levantado con algo de rapidez, lo que me hizo reír.

— No te rías. -cubrio su rostro con sus manos, su voz aún era adormilada.— Ultimamente solo duermo con Dae, la situación suele ser distinta, casi me da un paro. -sin embargo volvió a recostarse, aunque no ocupándome como almohada.— Ni siquiera recuerdo haberme quedado dormida, me hubieras despertado.

It's You • Jeon Jungkook  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora