30 días con Hyoga y Shun. (TERMINADA)

Día 24

Haciendo las pases después de una pelea.

Finalmente, en un momento de rendición, Shun se encontró en la puerta del templo de acuario que ahora era el de Hyoga. Dudó por un momento, su mano suspendida en el aire, antes de finalmente acercarse con cautela. Cuando Hyoga notó la presencia de Shun y sus miradas se encontraron, el alivio y el anhelo en los ojos de ambos eran palpables.

-Lo siento -Dijo Shun, con su voz temblorosa. -Lo siento por las cosas que dije. No quería lastimarte.

Hyoga exhaló profundamente, su expresión suavizándose mientras asentía. -Y yo también lamento las palabras que elegí. No deberíamos haber llegado tan lejos.

Hyoga le ofreció a Shun una silla para que se sentase, Shun se sentó en aquella silla y al ver que tenía una mesa al frente suyo decidió apoyar sus brazos en ella. Sin decir una palabra más, Hyoga se acercó y envolvió a Shun en un abrazo apretado. Las lágrimas de este ultimo se deslizaron por sus mejillas mientras se aferraban el uno al otro, una mezcla de alivio y liberación comenzó a inundar sus corazones.

-No quiero perderte. -Murmuró Shun, con su voz temblorosa.

Hyoga lo apretó con fuerza. -Yo tampoco quiero perderte, Shun.

Se mantuvieron abrazados, dejando que la intensidad de sus emociones se expresara en el apretón de sus brazos. La reconciliación fue silenciosa, una renovación de su compromiso el uno con el otro, de su amor y su deseo de superar cualquier obstáculo que se interpusiera en su camino.

Con el tiempo, las heridas sanarían y las cicatrices de la discusión se desvanecerían. Hyoga y Shun sabían que tendrían desafíos, pero también sabían que su amor y su conexión eran más fuertes que cualquier diferencia de opinión. Mientras se abrazaban en la penumbra de la habitación, el silencio fue llenado con la promesa de un futuro en el que trabajarían juntos para mantener su relación fuerte y enriquecedora, incluso en medio de los momentos difíciles.