capítulo cinco
Nunca me había gustado vestir de negro, porque las veces que lo hacia completamente era para despedirme de alguien.
Fue un funeral con el ataúd cerrado. Susannah le había dicho a Laurel que no quería que se quedasen boquiabiertos al ver su extraño aspecto. La gente muerta parece falsa, explicó. Como si estuviesen hechos de cera. Me obligué a recordar que la persona del interior del ataúd no era Susannah, que no importaba su aspecto porque ya no estaba allí.
Cuando acabó la ceremonia, tras el Padre Nuestro, formamos un cortejo fúnebre, guardando el turno para ofrecer nuestras condolencias. Me sentí curiosamente adulta, allí de pie con mi madre y mi hermano. El señor Fisher se inclinó y me dio un abrazo firme, con los ojos húmedos. Al igual que con Belly. A Steven le dio un apretón de manos y cuando abrazó a Laurel, ella le susurró algo al oído y él asintió.
Cuando vi a Jeremiah, me acerque y no dude en abrazarlo, pero me aparto al cabo de un rato. Como si quisiera poner aún más distancia entre nosotros.
Quise decirle algo que le sirviera de consuelo. Algo mejor que un simple «lo siento». Pero ocurrió tan de prisa que no tuve tiempo de decir nada más. Tenía una fila de gente esperando detrás de mí para darle el pésame. Así que me aleje de nuevo, dándome por vencida de querer atravesar la fachada que llevaba haciendo desde hace un mes, cuando Susannah.
El cementerio no estaba muy lejos. Los tacones se me hundían en el suelo. Debía de haber llovido el día anterior. Era deprimente.
Antes de bajar a Susannah a la tierra húmeda, Conrad y Jeremiah pusieron una rosa blanca cada uno encima del ataúd, y a continuación, el resto de las personas fuimos añadiendo más flores. Yo escogí esta vez una cala.
Alguien cantó un himno. Cuando terminó, Jeremiah no se movió. Cuando intente acercarme, dude, tal vez yo no era la mejor compañía. Se quedó justo donde iba a estar la tumba y Laurel fue hacia él. Y yo voltee en la otra dirección.
***
De vuelta a casa de Susannah, todos los invitados se encontraban en el primer piso.
Así que Jeremiah, Belly y yo nos escabullimos a la habitación de Jeremiah. Belly se sentó en la cama ansiosa, mientras Jeremiah no podía quedarse quieto,
— ¿Dónde está Conrad? —pregunto.
La mire como si aquello fuera una mala idea, pero esa manía suya de desaparecer a cada momento era mala.
—Es mejor que lo dejemos en paz un rato —. contestó Jeremiah
—¿Tienen hambre? —pregunto de nuevo Belly y no conteste. Había tantas cosas que me tenía que hacer cuando volviera, me había escapado un rato de casa, pero ahora esto, me tenía exhausta, tanto que llevaba horas sin comer, pero no tenía hambre.
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HURACÁN ━━Jeremiah Fisher
FanfictionHURACÁN | En Cousins Beach todo el mundo espera el Verano, incluyendo a Lily. Lily por fin ha convencido a sus padres después de tres años ir a Cousins Beach, sin embargo, no ha visto a los Fisher desde hace mucho. Conrad siempre ha encajado con e...