Post-resaca

239 16 0
                                    

Ibiza

Cuando me levanté, Eric no estaba en la habitación.

Cuando baje vi a casi todos viendo la tele con mejor aspecto que el de ayer.

Nos echamos unas risas entre todos esperando a que los que faltaban, se levantaran.

Después salimos de casa con las neveras repletas de comida y bebida, vestidos y con el altavoz de discoteca que Balde se llevaba a todos lados.

Esta vez estábamos más animados. A parte de que al final este era el último día, pues la compañía aérea con la que viajábamos nos había mandado un nuevo billete de vuelta para hoy mismo porque el viaje de mañana se había cancelado por un pronóstico de lluvia intensa en todo el noroeste de la península.

Pasamos la mañana bailando en el yate mientras otros nadaban.

Balde se encargaba de la música y no había canción que nadie se supiera.

Las chicas nos tumbamos en unas hamacas para tomar un poco el sol.

Estábamos tranquilos hasta que Ansu chilló como una rata.

- ¡COMO ES POSIBLE ESTE SUCESO!

- Que cojones te pasa Ansu, que no somos sordos coño. -gritó Gavi.

- Tio nos hemos quedado sin hielo. Que algún alma caritativa vaya a comprar hielos porfavor.

Se tiró al suelo haciendo drama mientras algunos pasaban de él.

Ana me miró, pues antes de salir le había contado a ella y a Rocío el dilema entre Eric, Matheo y yo.

- Tia es tu oportunidad. -dijo en susurros.

- Yo puedo ir y Eric que no está haciendo nada puede venir conmigo.

- Muchas gracias chicos sois los mejores. -dijo Ansu levantándose del suelo.

- Sisisi venga.

Muy cerca nuestra había otro yate que parecía acercarse a la orilla así que les llamábamos y les pedimos si nos podían llevar con ellos a la orilla.

Ellos dijeron que si y no pudieron evitar pedirnos unas fotos.

Aceptamos y luego nos despedimos.

Cuando llegamos a la orilla, Eric me paró.

- ¿Porque?

- Habría que buscar otra forma de tener una cita.-dije entre risas.

El solo sonrió mientras nos dirigíamos a un lugar un poco menos concurrido.

Llegamos a una mini terraza en la que no había mucha gente, nos sentamos en la mesa más alejada y nos tomamos unas cocacolas bien fresquitas.

Al cabo de un rato, Eric estaba un poco menos cagado por las amenazas de mi hermano y se soltó como el día de la cita.

- Me gusta como te queda el bikini.

Me sonrojé mientras le hacía el mismo cumplido.

- ¿Pero sabes que me gusta más? -preguntó mirándome fijamente.

- Sorpréndeme.

- Tu sonrisa, pareceré un acosador total Val, pero es que tú sonrisa me encanta. Haría todo por verte sonreír día y noche.

QUE-

<DONDE FIRMÓ PARA CASARME CONTIGO>

Sonreí y no pude evitar reírme a carcajadas con el.

- ¿A cuantas más les has dicho lo mismo? - dije apoyándome en la mesa.

- Eres la primera y la única. - añadió imitando mi acción.

Algo me gusta de ti | ERIC GARCÍADonde viven las historias. Descúbrelo ahora