Peligro Y Tentación [+21 Completa Parte I Bilogía Amores Nocivos]

Acontecimientos

NARRADOR OMNISCIENTE

El Pakhan está fuera de sí, se ha transformado en el monstruo que es, no mide sus acciones, no mide sus pasos. Él solo quiere saciar la ira que siente dentro, él solo quiere que el mensaje sea bien recibido; él solo quiere dejarle en claro a su enemigo, que la ciudad que ha pisado es suya, que él es el rey de toda ella, que cada maldito lugar le pertenece y que él no tiene ningún derecho en quitársela.

Durante generaciones, Nueva York ha sido controlada por el apellido Romanov, Lealtad o Muerte es el legado que han heredado de generación en generación y lo han cumplido a la perfección dentro de su organización. Había un acuerdo, uno que persistió por años, para mantener las aguas calmadas dentro del país; ningún Vor, Capo, Pakhan o Líder de la mafia, tenía que atentar en contra de otro y mucho menos en su misma ciudad. Hacer eso, significaba comenzar una guerra, donde cada organización se iba a ver envuelta en una disputa sobre a quién apoyar en los días oscuros, porque a fin de cuantas, aunque cada organización tenía a sus cabezas que las dirigía, todas conformaban un cuerpo en el país donde estaban y, eso al recién Vor de la Bratva de Seattle le valió en lo más mínimo.

Su error no fue atentar tres veces en contra del Pakhan de Nueva York, su error más grande fue acercarse a su mujer, a su Cisne, a su Bebé y tesoro más preciado, con las misas intenciones que el Pakhan: obtener la gran corona rusa. Y eso es lo que ha hecho despertar la furia del Dazhbog.

Él hizo un pacto con la heredera, él le prometió ayudarla y ella le prometió la corona. Una propuesta bastante tentativa, imposible de rechazar cuando eso significa que dejaría de controlar una ciudad, para controlar un país entero. Sus planes desde aquella noche del pacto cambiaron cuando conoció su verdadera identidad. Él iba a violarla, para luego asesinarla de la manera más cruel por venganza a su esposa, pero jamás consideró que esa noche llena de sangre, él conocería a su perdición.

Jamás pensó que la joven, de vestido roso carmesí y mirada felina, sufriera de trastorno de identidad. Lidió en el club bajo un falso coqueteo con la joven ingenua, llena de ganas de experimentar y dispuesta a entregarse a él sin importarle las consecuencias. También lidió con una asesina, un arma letal, una mujer con sus ideas claras y sus planes bien trazados. Ignoró la locura, porque le resultó tentativa la oferta, al final del día, él estaba tan loco como ella y cuando la locura se junta con la locura, todo es más divertido.

La oyó, comprendió que detrás de ese juramento, de ese ofrecimiento pactado con sangre, había una joven abrumada por el trauma emocional y físico que le causaron. Dos almas totalmente dañadas, dos seres dispuestos a eliminar a quien fuese necesario con tal de cumplir sus planes; dos almas completamente ambiciosas y ansiosas de poder.

Dos almas oscuras que ahora se separan por culpa de sus propias palabras y acciones de aquella noche y él lo sabe. Por eso la ira lo ha segado, por eso, ha perdido el control y sus hombres no pueden hacer más que seguir a sus órdenes; matarlos a todos.

Dispara a diestra y siniestra, explota las cabezas que se le atraviesan en medio de su camino. No le importa si son clientes frecuentes, no le interesa si son mujeres inocentes que solo están ahí bajo amenazas, usándolas como mercancía; le interesa traspasar los corazones de cada una de ellas con sus balas.

Está nublado, guiado por la venganza, guiado por el odio, por la ira de que todo se le haya escapado de las manos por su misma culpa, por enfocarse en hacer pagar a una y olvidar a la otra.

El Pakhan saca su cuchillo, degollar los cuellos es su deleite, destripa los cuerpos, su pasatiempo favorito. Él saca los corazones y cada vez que entierra su cuchillo, grita con fuerza dejando salir todo lo que tiene retenido.