Zodiac, una historia para recordar

1.3. Suena la alarma

Cancer pov:

El timbre sonó y todos nos despedimos y fuimos a clases. Al llegar vimos a Acuario sentada al lado de una ventana.

—¿Qué ves? —le pregunto sentándome detrás suyo.

—Nada, veo como pasa la gente —dijo y luego se giró hacia Virgo y Libra que se sentaron al lado de nosotras.

El profesor llegó y empezó pidiendo que nos presentáramos. Luego de eso inició la clase. Dijo que sería breve, espero que lo sea mientras esté metida en mis pensamientos.

Aún no tengo claro que carrera cursaría en la universidad, falta mucho para eso pero es que me emociona ir allá. También estudiar algo en lo que posiblemente me dedique y viva de ello. Digo "posiblemente" porque hay personas que se gradúan de una carrera y no la ejercen. Espero que no sea mi caso y que le saque el mayor provecho.

Miré hacia la ventana y se me hizo raro ver cómo Tauro se subía al asiento de copiloto de una chica. Le toqué el hombro a Acuario y ella giró a verme, le hice seña rápido hacia la ventana para que alcanzara a verlos. Giró al instante y creo que los vio irse. Me miró y dijo en voz baja "eso es lo suyo" y alzó los hombros.

Bueno era cierto, Tauro era de hacer esas cosas pero no importa ya.

Como decía, quiero tener claro lo que quiero estudiar más adelante, tal vez coincida con los demás y vayamos juntos a la misma universidad, sería loco ir al mismo instituto y también ir a la misma universidad.

El profesor llamó nuestra atención.

—Bueno, hoy sólo sería la presentación del programa, ya pueden irse —dijo y todos empezaron a guardar sus cosas e irse.

—Ya me estoy acostumbrando a salir antes de todas las clases —dijo Virgo triste.

—Pues ve dejando eso —dice Acuario riendo.

—¿Qué quieren hacer? —les pregunto, faltaban como 20 minutos para iniciar la otra clase.

—Demos una vuelta a ver de qué color es este lugar —dijo Libra tomando un mapa—. Vengan.

Nos guió más allá de los edificios de clases, estábamos como en un área de deportes. Había una gran cancha de fútbol, una gran piscina y una cancha de basquetbol.

—Que grande es aquí —dije viendo las gradas de la cancha de fútbol. Escuché como todos dijeron que sí. —¿Alguien puede poner una alarma para la otra clase? —pregunté, no quería llegar tarde o que nos llamen la atención por eso.

—Yo la pongo —se ofrece Acuario y saca su celular—. Vamos a la piscina.

Bajamos de las gradas y fuimos allá. Era una piscina muy extensa, olímpica me parece.

—Debería entrar en natación —dice Acuario.

—Yo también —dice Virgo—. Aunque mojarse el cabello todo el tiempo y andar así por el instituto sería incómodo.

—Podemos preguntar cuándo serían las prácticas, tal vez son después de clases.

A Libra y a mí no nos llamaba la natación, creo que con clases de baile estarían bien para mí, Libra tal vez opte por el equipo de fútbol.

—Entraría al fútbol si lo veo apto para mí —habló Libra. Nosotras dijimos "ajá". Era algo vago para la educación física.

La alarma sonó, hora de irse.