𝘽𝙖𝙙 𝙇𝙪𝙘𝙠| WenClair AU

▐ 𝙲𝙰𝙿 79▐

Yoko se quitó la mascarilla para toser de nuevo, insultó internamente cuando la sensación de ahogo no lo abandonó y lo obligó a seguir tosiendo fuerte, doblándose sobre su estómago y haciendo que su rostro enrojeciera por el esfuerzo.

— Sigues mal...

Alzó sus ojos hacia Enid, la rubia le dedicó una sonrisa penosa.

— Hola, ¿No? — la otro volvió a colocarse la mascarilla.

— ¿Estás con eso todo el día?

Yoko negó.

— Unas cuatro veces al día, media hora.

— ¿Sabes que tus dos pequeños creen que vas a volver pronto? Se turnan para vigilar la puerta de la entrada o mirar por la ventana... Y estás así.

Yoko bajó el rostro, sintiéndose horrible por mentir así, y se le rompió un poco el corazón al imaginarlos.

— ¿Y cómo es eso de que vas a volver con Merlina? — la voz de Enid sonó rota, bajo su vista para ocultar sus lágrimas.

— Contraté un detective privado.

— Oh, Yoko.... — Enid abrió sus brazos —. ¿En serio?

— ¿Me vas a decir que hice mal? Púdrete.

Enid abrió su boca pero ninguna palabra salió, suspiró y la volvió a cerrar, se acercó a la camilla, tomó una silla y la acercó a la cabecera, donde Yoko estaba media sentada.

— ¿Qué dice?

— Dijo que iba a hacerte unas preguntas, porque todo estaba muy "sucio" y que tenía que "limpiar" las cosas un poco.

Enid la miró confundida.

— ¿Nada más?

Yoko negó.

— Dijo que tenía muy poca información, muchas pistas que no podía unir aún, le faltaban datos, todavía no había descubierto nada... Pero lo único que me dijo, de lo que está seguro, es que el atentado no fue contra la Organización, sino contra alguien — Yoko la miro para ver si entendió sus palabras —. Enid, ¿En qué mierda estás metida?

— ¿Yo? — Enid se llevó una mano al pecho, negó —. Yo nada, no he hecho nada.

— Sinclair, piensa un poco... ¿No hay nadie que los odie lo suficiente como para quemar el lugar donde estaban?

Enid volvió a negar, completamente segura de que ella no tenía ningún enemigo.

— Mejor me callo... La detective te preguntará las cosas mejor que yo.

— Y ¿Quién es? ¿O tengo que responderle con sinceridad al primer loco que empiece a preguntar por esas cosas?

— Se presentó como Ricci — Yoko se encogió de hombros —. No sé su nombre real, y creo que nunca me lo dirá. Es bastante excéntrica y tiene una ardilla de mascota y siempre está con ella al hombro, le dice Zeta hasta esa animalita tiene nombre secreto.

Enid frunció el ceño en demasía.

— ¿Qué clase de locos privados consigues?

Yoko se encogió de hombros.

— Le pregunté a los detectives que están tratando la investigación del incendio y ambos me recomendaron a esta, así que debe ser buena.

Enid asintió un poco.

— ¿Y cómo estás tú?

Yoko sonrió de forma espléndida, llevó su mano libre a su pecho, sobre uno de sus pulmones.

— Muy jodida, pero ya no tanto.

— ¿Cómo? ¿Qué tanto?

— Pues... Primero empezó como una intoxicación más normal, digamos, pero luego hizo una infección en no sé que — Yoko abrió sus brazos y se encogió un poco de hombros —. Y bueno... No me deja respirar porque es como si tuviera agua en los pulmones, como los ahogados, así que comenzaron a darme antibióticos y oxígeno— alzó su mascarilla y después se la colocó de nuevo —. Pero se ve que los remedios están funcionando y la infección está controlada y se está curando.

— No entiendo nada pero suena grave.

— Si no se curaba podía romperse el pulmón por dentro y dejo de respirar.

— Oh, mierda.

— Si, mierda — Yoko le restó importancia —. ¿Cómo están mis bebés?

— Nadie les dijo la verdad y son las personas más felices de la casa en estos momentos.

— ¿Más que Ajax y Tyler?

— Los dos se están haciendo cargo de los demás como si fuéramos sus hijos... Y Ajax no lo sabe, pero se escucha en toda la casa cuando llora como un perrito en la noche.

Yoko hizo un puchero por la triste imagen.

— Me da ternura que sea un perrito, ¿Sabes? — Yoko sonrió un poco —. Y me da más ternura que su híbrido lo cuide tanto... ¿Notaste que Tyler no es como nuestros híbridos?

Enid asintió.

— Es más como un adulto, los nuestros son unos bebés... Cocina muy bien también, sabe hacer muchas cosas.

Yoko asintió, se sentía tranquila que aquellos dos manejaran su casa, confiaba en ambos para mantener todo en algo de orden.

— ¿Y Pericles?

— No lo sé... Siempre está afuera, sé que se la pasa en el techo y bueno, o Ajax o Tyler le dan comida, supongo... No salgo del cuarto, en verdad, esta es la primera vez que salgo de la casa... Sólo me quedo en la cama, pocas veces como en la mesa... O como en realidad... Es una mierda, Yok....

Yoko abrió sus brazos hacia ella y Enid no tardó ningún segundo en dejarse abrazar, no pudo evitar que las lágrimas surgieran de nuevo, y su amiga dejó caricias en su cabello mientras la dejaba llorar.

— La recuperaremos, Enid. Y todo eso va a terminar, amiga.