𝘽𝙖𝙙 𝙇𝙪𝙘𝙠| WenClair AU

▐ 𝙲𝙰𝙿 43▐

— E-enid.

— Levanta los brazos, Merlina.

— N-No.

Enid retiró de una sola vez tanto el suéter como la remera de Merlina, dejando su torso desnudo, la pálida y suave piel de su cuerpo lo distrajeron un poco.

— Mierda— murmuró la rubia—, hace calor— añadió, tragó saliva duramente.

Apretó los labios y llevó sus manos al pantalón de la híbrida, quién maullaba con ganas de huir del baño, desde que Enid había comenzado a llenar la bañera, el sonido del agua la asustaba y no había dejado de llorar en maullidos lastimero que su humana ignoraba.

Enid bajó los pantalones de Merlina, decidió dejar los calzoncillos de la gatita puestos.

— Levanta una pierna, Mer.

— Por favor...

— Ahora a otra.

— No me hagas bañarme...

Enid arrojó el pantalón junto con el resto de la ropa, en un rincón del baño, se irguió para ver a su novia, quién temblaba, quizás de frío o quizás de miedo, y sorbía su nariz cada tanto para controlar las ganas de llorar.

La humana la tomó por la cintura, sintiendo la suave piel de la híbrida, sin soltarla para que no se escapara, acercó a ambas hacia la bañera, sintiendo el agua más caliente que tibia, cerró el grifo.

— Merlina, ¿Te metes?

— ¿N-No tengo que estar desnuda? — preguntó, algo confundida por tener los calzoncillos puestos.

Enid sintió más calor.

— No molesta, Meriie, cuando te cambies te colocas uno nuevo.

Merlina asintió un poco, sus manos habían ido a los hombros de su humana, y clavaba sus cortas uñas en estos, Enid las sentía a través de la fina tela de su remera, pero no dijo nada.

— Bien, Merly— dijo la humana, viendo que la gatita no se movía, la alzó, dejando un brazo en su espalda y llevando el otro detrás de sus rodillas, se inclinó hacia la bañera para dejar a Merlina en el agua.

— Miauu~— lloró cuando el agua tocó su piel, se aferró con más fuerza a Enid, quien perdió el equilibrio por el abrazo haciendo que la mitad superior de su cuerpo cayera al agua, mojándose.

Enid soltó una maldición, que no pudo terminar al soltar a la gatita y mirarla.

Mejillas rojas, cabello medio húmedo, pegado a su frente, labios entre abiertos que dejaban salir respiraciones agitadas y unos brillantes ojos grisáceos, sus pupilas estaban completamente dilatadas y totalmente enfocadas en ella; el delicado cuerpo de la híbrida estaba debajo del suyo, con su piel expuesta y tan tentadora para tocarla, en una imagen hermosa que no pudo evitar relacionar con algo para nada inocente.

Enid sintió su corazón desbocar un momento.

Hacía calor.

Inconscientemente, Enid mordió su labio inferior, Merlina relamió los suyos al ver el gesto.

— Mierda, no hagas eso— Enid se apartó de arriba de la híbrida, sintiendo cómo su entrepierna comenzaba a doler.

Merlina sintió su nariz picar un poco, se sentó cómodamente en la bañadera, miró a Enid con cierta vergüenza.

— Lo siento— murmuró Merlina.

Enid negó.

— Está bien, Mer— dijo, negó suavemente—... ¿Puedes bañarte sólo, gatita?

Merlina asintió levemente, apartó la vista de su humana, concentrándose en el agua, que estaba a una temperatura cómoda.

El baño no era tan terrible.

Enid asintió sin decir nada, saliendo del baño, cerrando la puerta a sus espaldas, concentrándose en pensar en cualquier otra cosa que no fuera la imagen de Merlina debajo de su cuerpo.