{Continuación de Cuarentena}
Un nuevo año comenzaba, y la incertidumbre de aquellos planes y sueños por cumplir era abrumadora. La vida tenía que continuar de alguna manera u otra y eso Alexandra lo sabía perfectamente . Mientras que su corazón desc...
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Segunda semana de Diciembre, 2023.
"¡Awww! ¡Hola nena hermosa! ¡Es la Tia Alexa! ¡Ay que preciosa eres!" Alexa estaba en su elemento con la pequeña Paula entre sus brazos.
Reí observando a la pequeña bebé balbucear en respuesta. Habíamos hecho una parada en Carolina del Norte para visitar a Fer y Sam.
"Pero mira todo lo que has crecido en unos meses..." Alexa seguía hablándole y acariciando sus regordetas mejillas como si de eso dependiera su vida.
Yo solo estaba ahí mirándola interactuar con la bebé comenzando a imaginar un futuro en donde fuera un bebé nuestro entre sus brazos.
"Sorpresivamente esta tranquila, ha sido un total desastre al dormir en las noches estas últimas semanas, ni siquiera se como estoy de pie justo ahora..." Sam, quien en realidad si lucia algo cansada, llegó a la estancia con un biberón lleno de leche y se lo entregó a Alexa.
"Dios, no me lo quiero imaginar" Ella tomó la botella y la bebé ansiosa comenzó a succionar en cuanto se la acercó. Estaba hambrienta. Yo solo la admiré en silencio al lado de mi esposa.
"El pediatra dijo que quizás pronto se le pase, sobre todo porque desde el primer día que llegó a casa siempre fue muy buena para dormir por las noches..."
"Aww pero con una carita tan hermosa como la tuya se te perdona todo ¿No es así preciosa?" Alexa hacia su voz tierna cuando se dirigía a la bebé y yo amaba eso.
"Ajá, cuando tengan uno ya veré si dices lo mismo" Sam habló divertida y reí sabiendo que probablemente sería cierto.
"Ya veremos, aún no es el momento de todas formas..." Alzó los hombros y yo asentí.
Este año realmente nos había golpeado con una ola de bebés que no nos esperábamos por parte de muchas personas cercanas y creo que en ciertos momentos el ánimo de Alexa cuando nos enterábamos, descendía un poco.
Lo comprendía perfectamente y no la juzgaba en lo absoluto. Al contrario, me encargaba de hacerla sentir mejor tanto como me fuera posible.
"¿A que hora planea llegar mi hermano?" Preguntó Alexa sin dejar de ver a la bebé que también la observaba mientras devoraba su cena.
"No creo que tarde. De nuevo les invito a pasar la noche aquí, les juro que son bienvenidos..." Sam ofreció de nuevo y apreté los labios.
"Gracias Sam, en serio. Nuestro vuelo sale hoy en la noche y aunque quisiéramos quedarnos más tiempo tenemos que irnos... Pero me voy satisfecha de haber estado con esta hermosa y preciosa nena"
"Definitivamente te quiere, se comporta muy bien contigo" Dijo Sam divertida y regresé la vista a mi chica.
La pequeña bebé que compartía nombre con la mamá de mi esposa realmente la veía intrigada. Probablemente por la voz aguda que Alexa hacía para hablarle casi todo el tiempo.