Permiteme quererte

16

Danna estaba aterrada y paralizada como de costumbre. Se sentía como un pequeño ratoncito en la cueva de un gigante y tenía el presentimiento de que en cualquier momento la aplastarían.

Junto a su hermano, guardaba silencio, quería correr pero eso implicaría romper las reglas que la habían salvado en tantas ocasiones. Sin embargo, no pudo evitar apartarse suavemente cuando Zayn quiso cerrar su brazo a su alrededor.

El moreno sintió una punzada en el pecho y un velo de tristeza surcó su rostro al posar sus ojos en ella. ¿Acaso le temía?

-Mañana por la tarde, -dijo la mujer intentando eliminar la tensión. -Mis nietos van a venir y queremos hacer una pequeña reunión con nuestros amigos. Están invitados, por supuesto. Va a ser un gran día.

-Ahí estaremos.-Dijo Niall amablemente mientras la acompañaba a la puerta.

-Si queres, -susurró Zayn en el oído de su hermana.- podes irte.

Ella corrió escaleras arriba sin pensarlo dos veces, dejando a su hermano solo y destrozado.

-¿Cómo pudiste?- preguntó a Niall cuando este regresó.

-¿De qué hablas? Vos la estás tratando mal.

-¿La besaste?

-Zayn...

-¡¿Besaste a mi hermana?!- gritó furioso aproximándose al rubio.

-Si, la besé. - Dijo Niall enojado.- ¿Y sabes qué? La quiero y no me importa lo que vos digas.

Cuando el moreno estaba por abalanzarse sobre él, un fuerte ruido llegó del piso superior, haciendo que ambos corrieran escaleras arriba.

-Danna abrí la puerta.-pidió Zayn al notar que había cerrado con llave.

-No pasó nada.-Dijo ella y él sabía que lloraba por el temblor de su voz.

-¡Abrí la puerta!

Al no obtener resultado alguno buscó sus llaves y comenzó a probarlas. Al dar con la correcta, abrió y la encontró con un florero roto en el piso y sangre a lo largo de su brazo. Danna lloraba presionando el brazo herido y juntando los cristales.

-No quise romperlo.- sollozó.- Se me cayó. Perdón. Fui muy torpe.

Niall apareció con una toalla que presionó sobre la herida ayudándola a pararse y obligándola a soltar los cristales.

-Está bien, princesa. A nadie le importa el florero. Tenemos que llevarte al hospital.

-Me duele.- Lloró ella y Zayn se aproximó a su lado, tomándola en brazos con cuidado y dejándola ocultarse en su pecho. Estaba blanca del susto y sollozaba moviendo sus hombros suavemente, como si no quisiera que nadie lo notara.

Su hermano la tomó con fuerza, quería protegerla pero solo veía a aquella pequeña de seis años con la cual peleaba por un autito roto.