𝑨𝒄𝒓𝒐𝒇𝒐𝒃𝒊𝒂 - 𝑺𝒑𝒓𝒆𝒆𝒏𝑫𝑴𝑪

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Para el hibrido de oso todo lo que le sucedida se había vuelto casi en una maldita rutina, como si su destino fuera el ser seguido por las flechas de cupido y luego por la muerte

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Para el hibrido de oso todo lo que le sucedida se había vuelto casi en una maldita rutina, como si su destino fuera el ser seguido por las flechas de cupido y luego por la muerte.

Miraba su diario que estaba casi dañado, este mismo guardaba todos sus pecados [por no decir sus amores y desamores]. El era conocido por muchos, como un empresario exitoso, como un buen guerrero y por ser.

"El elegido por la desgracia"

Spreen tiro aquel diario contra la pared con tanta fuerza que algunas hojas salieron del mismo, mostrando fotos y frases cortas muy románticas.

"Para mi el tiempo se detuvo al concerté, tu eres mi mago que me enamoro de todas las formas"

Empezó a llorar amargamente ante aquella frase, miro la otra con cierto recelo.

"Pensé que serias uno mas del numero de personas que me señalaba como asesino, pero fuiste diferente"

Recordó al chico, Karl que alguna vez quiso algo con el pero solo quedo en amistad.

"Tu fuiste mi arañita Charlotte, que me dejo embobado...te quisiera ver devuelta"

Y mas frases se presentaron, se sentía impotente, estresado y enojado. Bajo a su sala, agarro aquella gabardina que estaba tirada en su sofá y se la coloco con cuidado; procedió a ponerse sus característicos lentes y su sombrero.

Salió de su casa y empezó a caminar rumbo al Spawn mirando su alrededor. Llegando al punto, en que ya esto era su rutina.

Miro atentamente como de aquel portal entraba un chico de máscara dejando ver una actitud soberbia y juguetona, este mismo abrazo a Spreen y se fueron al bosque prohibido.

Spreen ahora miraba el cielo nocturno mientras su cabeza reposaba sobre el regazo de Quackity conocido por estos lares como Big Q.

-¿Aun te sigues lamentando?

-Si, pero no tanto como hace años...

-Aun me sorprende que quisiste algo con Karl...jajaja, osito~

Quackity hizo burla ante aquel apodo que el chico anteriormente mencionado lo llamaba.

-Cállate boludo de mierda...eso solo...solo fue un error

-¿un error?, dices que ¿enamorarte fue un error?~...

Pregunto Quackity mientras acariciaba el cabello de Spreen quien solo asintió levemente dejando escapar algunas lágrimas.

-entonces...¿Por qué tan sentimental?

-Porque es algo normal, ¿acaso tu no sufres o te haces el pelotudo?

Quackity le jalo la oreja levemente a Spreen quien se quejó, mirando como Quackity sonreía de forma enojada.

-Obviamente yo también sufro, pero a diferencia tuyo no ando demostrándolo a los cuatro vientos como si fuera un puto fantasma

Spreen rio levemente cerrando sus ojos, Quackity solo seguía acariciando el cabello del oso que se terminó quedando dormido.

Spreen despertó en su cama, podía mirar su habitación y unos ojos morados...¡¿Ojos morados?!

Se levanto completamente asustado notando que era Duxo, un chico que vivía con él.

-Hola, un amigo te trajo ya que dijo que te habías dormido

Comento calmadamente mientras le entregaba una taza de café.

Su día fue el mismo, revisar papeles, firmarlos e ir a aquel abismo...su cuerpo temblaba y su corazón late con demasiada fuerza exigiéndole que retroceda.

-Yo...enserio me siento solo...

Spreen por unos eventos desafortunados desarrollo un miedo casi inexplicable ante los lugares altos, pero gracias a su amigo Shadoune descubrió que sufría acrofobia.

Empezó a caminar tomando una distancia reservada con el abismo, mirando el paisaje mientras empezaba a sudar frio y a sentirse alterado. Empezó a reír y a llorar seguidamente de bailar como si estuviera bailando con alguien más; llego un punto en el que empezó a acercarse al abismo.

Reía como nunca, reía por rabia, amargura y sobre todo dolor era un dolor intenso en su corazón que ahora lloraba junto a él en esa melodía de vals mental en el que estaba.

Spreen DMC no podía mas con esta soledad, él se sentía solo como un receptor y sus anteriores amores se lo demostraron.

El solo podía aceptar, negar, odiar, amar y gozar si su emisor lo pedía; se sentía vacía en este punto. Su maldita rutina le dejo claro que el solo era un receptor.

-Ya recibí tu mensaje, ok, ok...copiado~

Spreen bailaba de forma lenta y sincronizada con su corazón que late por momentos rápidamente.

-Entiendo tu miedo, ok, ok...lo tengo~

Se acerco mucho al abismo, su cuerpo se tensó su visión se volvió borrosa, las lágrimas se presentaron sin pecado alguno.

-No estarás solo, ok, ok...te escucho~

La luna podía ver el lamento de aquel oso que ahora lloraba amargamente maldiciendo a los cuatro vientos todas sus desgracias, agradeciendo todas sus victorias, cuestionando su vida.

-Yo...volveré a ser uno con este mundo que ahora me rechaza con todo lo que alguna vez ame~

Hizo una reverencia, sonriendo cálidamente dejando ver su rostro afligido, y dio un paso atrás...empezó a caer por aquel abismo que era tan alto que parecía que el tiempo se detenga.

Un grito provoco que abriera sus ojos, dos ángeles estaban en su rescate.

-déjenme por favor...

-Nunca, no estás solo Spreen

Los ángeles lo agarraron a tiempo, sentían el cuerpo del oso temblar por el pavor del momento, lloraba ahora de felicidad al saber que al fin era escuchado, lloraba por saber que ahora podía ser un emisor con dos receptores lo cuales le daban consuelo.

-desahógate, nosotros te acompañaremos...

Spreen miro al cielo llorando como un pequeño niño, mirando la altura desde la que había caído.

-Gracias...

Spreen cerro sus ojos, desmayándose por todo el estrés que se había desahogado. 

One-Shots [Historias Únicas]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora