𝑵𝒆𝒐𝒇𝒐𝒃𝒊𝒂 - 𝑾𝑩𝑵𝑺! 𝑪3𝒋𝒐𝒄𝒉𝒐𝒏

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Cejo miraba atentamente el lugar se sentía un poco aterrado, su casco se llenaba de muchas burbujas producto a la ansiedad que sentía en ese mismo momento

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Cejo miraba atentamente el lugar se sentía un poco aterrado, su casco se llenaba de muchas burbujas producto a la ansiedad que sentía en ese mismo momento.

Sabía que no fue buena idea salir a la superficie pero las ganas de conocer el lugar le ganaron, la sensación de experimentar nuevas emociones le nublaron el juicio. Caminaba de forma temblorosa y nerviosa, miraba sus alrededores completamente cautivado al punto que todo esto era tan novedoso para los ojos de Cejo.

El lugar era extraño en todo los sentidos que por segundos se sintió completamente perdido al punto que quiso regresar pero al voltear se dio cuenta que se había perdido. Su casco casi se rompe ante el grito que había pegado.

Empezó a correr como un loco siguiendo un camino que parecía haber sido creado por alguien que parece tener mucho tiempo libro a diferencia de él, llego a un gran acantilado.

"Salta"

Pudo escuchar ese susurro cerca de su oído, algo estaba tentando a Cejo a saltar del acantilado, empezó a quitarse su casco se sentía hipnotizado. Estaba a punto de saltar pero fue salvado por alguien quien emitía un fuerte gruñido en señal de repudio ante aquella voz.

Se giro para ver quien lo había salvado, se sorprendió al ver a un hibrido de lobo abrazarlo de forma protectora, sintió el aliento entrecortado del hibrido que dejo ver sus lentes rotos pero con una extraña marca que parecía un reloj de arena.

El tiempo empezó a pasar y con ello la costumbre que cada mes aquellos híbridos se encontraran en aquel acantilado reforzando su amistad con noches llenas de mucho amor teniendo como testigo a la luna que se sentía avergonzada.

"Te amo, yo mataría por ti...lo haría para tenerte a mi lado..."

Locochón era un maldito loco, que hablaba de forma literaria por parte de Cejo este lo tomaba a juego...¿de verdad seria loco para matar a la gente?

Esa pregunta se le formo al ver como Locochón atravesaba al mago de ojos bicolor de nombre Soarinng quien lo había querido atacar, aterrado retrocedió, su corazón se detuvo.

"Corre"

Sus piernas temblaban como gelatinas ante el simple hecho que ahora estaba siendo cazado por el lobo de ojos gris pizarra que reía como un loco y soltaba algún que otro aullido al mirar la luna que lo miraba con sus ojos color vino.

Llego al acantilado, su respiración era entrecortada, su casco estaba roto y su dignidad y orgullo destrozados. Ahora estaba encima de él, este era su fin. Los dientes filosos del lobo rozaron su cuello, sus manos lo tocaban de forma lasciva y brusca mientras le dejaba algunas heridas en el proceso; solo podía llorar sin más al sentirse traicionado.

Cejo hijo del rey de las profundidades ahora estaba a punto de ser devorado por Locochón apodado como el cazador un chico que había perdido mucho al llegar a esta isla de locos.

"No llores, vas a saber horrible..."

Sus gritos no se hicieron esperar igual que sus suplicas por el dolor, no entendía que pasaba sentía que el lobo lo estaba matando pero no era así...el lobo lo miraba triste...e impotente.

"Me traicionaste, eres un maldito bastardo el día de nuestra boda...tu...tu"

Una espada apareció en las manos de Cejo quien miraba fríamente al lobo que solo negaba aquello que no había sido su culpa. Solo podía sentir como era atravesado por aquella espada de netherita que lo iba quemando y partiendo vivió.

"Maldita escoria, yo te vi...te besaste con el...lo hiciste con el...maldito!"

"No...el...lo hizo..."

Mentiras, el lobo lo miraba impotentemente, su cuerpo estaba destrozado pero su alma lo miraba y gritaba al ver como Cejo dejaba caer su casco. Podía respirar tranquilamente, empezó a caminar en dirección al acantilado.

"Traidor..."

Su cuerpo estaba completamente dañado, podía sentir a su pareja llorar a mares rogándole que no lo hiciera pero seria imposible que lo oyera...Cejo lo había matado meses atrás.

Las olas chocaban fuertemente contra el acantilado susurrándole que se lanzara y sea feliz, Cejo empezó a reír como un loco al ver el anillo de bodas pero sus risas acabaron al ver a la luna de ojos color vino reírse de el mientras se lamia suavemente sus labios en forma de burla.

"Hahahaha, perdóname...pero ese hibrido de lobo fue tan delicioso...fue el mejor festín~"

"...si así son las cosas...yo Cejo prometo quitarte algo...Luna"

Su rumbo cambio, la luna altera miro a donde se dirigía pero gracias a aquellas cadenas no podía moverse, empezó a gritar. Aquino abrió sus ojos, lo único que diviso fue los ojos color oliva de Cejo antes que este mismo lo decapitara siendo testigo la luna que gritaba horrorizada.

"Estamos a mano...Duxorethey..."

La luna en su furia empezó a gritarle a la tierra que lo tragara y lo matara, pero la tierra no le hizo caso sus ojos color canela lo miraban igualmente furiosa; dándole razón a Cejo que dejaba ver su sonrisa crecer. Y lo hizo se tiro por acantilado siendo tragado por el mar que furioso empezó a golpear mas y mas fuerte el acantilado.

Locochón abrió sus ojos y miro que estaba en su habitación, se sacó sus audífonos y miro a todos lados; miro la computadora donde estaba escribiendo una historia sobre dioses la cual empezó a cobrar sentido desde que conoció a su pareja.

La cual entro a la habitación sonriendo con un pastel para celebrar el cumpleaños de Locochón quien lo lleno de muchos besos, dejando en claro que su sueño había sido muy extraño, miro la pecera donde estaba su pequeño pececito.

"Tuve una pesadilla..."

"lo sé, por eso también vine a ver, estas a salvo mi amado Locochón estas a salvo"

Respondió Cejo quien le sonrió y lo abrazo, el lobo correspondió al abrazo pero se sintió extraño, se sentía observado. Cejo miro directamente a la ventana y le saco el dedo medio a la luna quien de forma muy celosa protegía a su amado que se sentía acosado por la luna.

"Yo te voy a proteger, no importa donde estes yo te voy a proteger aunque eso implique tener que matar a algunas personas en el camino"

Locochón se tensó, el agua de la pesera se salió formando un reloj de arena y un tridente dejando ver los ojos color oliva de Cejo quien ahora lo besaba de forma apasionada dejando en ver que el es capas de todo; aunque ese le provoque miedo al probar nuevas cosas.

fin

One-Shots [Historias Únicas]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora