"¿Entonces puedo besarte? Que más dá..."

806 70 13
                                    

Esto estaba confundiendo más a la castaña, estaba tratando de leer los pensamientos de su madre, pero obviamente no podía, rápidamente pensó que su madre se estaba volviendo loca o tal vez había descubierto su secreto y tenía miedo.

Pero, ¿por qué tenía miedo? Ya no era una niña pequeña y tonta.

"¿Qué pasa mamá?"

"Tu padre está muy enfermo, por eso estaba realmente preocupada, no llegaste, él puede tener una recaída más grave, en cualquier momento, hija", susurró con dolor en sus palabras.

Charlotte dejó de respirar por un momento y todo su mundo dejó de girar.

"¿Qué, qué tiene mi padre?", preguntó con miedo y preocupación.

Finalmente, después de un minuto de silencio que fue realmente largo para ella, su madre habló y le contó todo sobre la enfermedad de su padre.

Charlotte estaba realmente destrozada y se sentía tan culpable.

Escuchar cada una de esas palabras la hizo sentir como la peor persona del mundo y odió a su madre, odió que la hayan alejado de ellos durante mucho tiempo, no compartió mucho con su padre y eso realmente duele.

Pero ella se odiaba más a sí misma...

"No tienes que llorar ahora hija mía, tu padre estará con nosotros, solo fue una pequeña recaída... pero no te dejes caer, sé fuerte para ti, para él y para mí... Lo siento por ser una madre dura".

Charlotte miró a su madre que la rodeó con sus brazos. Un cálido abrazó, qué extraño y necesito desde hace mucho tiempo.

"Gracias mamá..." Eso fue todo lo que pudo decir.

Su madre sonrió y besó su mejilla cariñosamente, secó sus lágrimas y volvió a hablar en voz baja.

"Ve, ve con tu padre, estaba realmente preocupado por ti, al igual que yo"

La castaña la miró a los ojos, y la culpa la consumió de nuevo.

"Perdón por ocultar que me iba, eso no va a volver a suceder..."

"Está bien, lo importante ahora, es qué estás aquí, te amo, hija mía", susurró.

• • •

Charlotte pov

Aunque me dolió, me obligué a no llorar más y a esconder mis sentimientos en lo profundo de mi corazón, tal como lo había hecho antes, siempre lo hacía, qué importa si lo vuelvo a hacer.

Mi madre tiene razón, no tengo que llorar ahora, él está bien y está aquí con nosotros.

Mi padre estará bien. Yo me encargaré de eso.

Caminé por los pasillos mientras los recuerdos me volvieron a torturar, mis ojos ardían eso significaba que las lágrimas querían volver a salir pero no puedo, el nudo en mi garganta no me lo permite.

Realmente me sentí perdida e impotente.

Dejé escapar un profundo suspiró cuando llegué a la puerta de la habitación de mis padres. Juro que tenía miedo de todo ésto, tenía miedo de perderlo y me dolía tanto el pecho, pero me seguí obligando a ser fuerte de nuevo.

"Tú puedes, siempre has sido capaz Charlotte"

Abrí un poco la puerta y miré adentro.

"¿Papá?" Susurré cuidadosamente.

Él también asomó la cabeza, y sonríe cuando nos miramos. Esa sonrisa me hizo sentir una tranquilidad indescriptible.

"Cariño...", sonrió. "Has vuelto. Estoy tan feliz"

𝐒𝐔𝐂𝐇 𝐀 𝐒𝐖𝐄𝐄𝐓 𝐋𝐎𝐕𝐄Donde viven las historias. Descúbrelo ahora