No me dejes, tonta...

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Engfa pov

Por la tarde me costó mucho terminar mi trabajo, ya que mi corazón realmente se encogió cuando la vi irse.

Realmente tenía muchas preguntas en mí cabeza, porque no entendía todavía el hecho de que ella tenía que hablar con él ¿De verdad era más importante que quedarse a mi lado y hablar conmigo?

Estaba celosa, pero lo que más me dolía era eso.

Cuando terminé mi trabajo fui al bar y conversé un rato con Chompu, ella también parecía estar triste. Pasaron las horas y cuando me di cuenta, era hora de irme a casa.

Quería buscarla en su habitación y dormir a su lado, ya no importaba que me dejara sola, solo la necesitaba conmigo.

Mi amor por Charlotte era muy fuerte, no podía dejar de pensar en ella. Mi corazón no se detenía cada vez que recordaba su sonrisa.

“Voy por ti”  susurré para mí.

Entonces fue horrible cuando la vi allí en el suelo, me detuve y corrí hacia ella.

...

"¿A dónde me llevas?", susurró suavemente como si le doliera hablar.

La miré en mis brazos, se me partía el alma verla así.

Sabía que algo grave estaba pasando, porque mi Charlotte había sufrido un ataque de ansiedad. Sabía lo horrible que se sentía, así que estaba preocupada.

Nunca la he visto así y realmente duele.

"No te preocupes, todo estará bien, Nu", besé su cabeza.

Luego puse su cuerpo cuidadosamente en el auto y conduje.

De vez en cuando la miraba por el espejo retrovisor, ahora dormía mientras de alguna manera abrazaba mi sombrero con fuerza.

Me sentía rara, algo estaba mal y lo descubría.

...

Conducí por un tiempo hasta que llegamos a la cabaña que estaba en la montaña.

Valió la pena el recorrido, ella necesita estar en este lugar... En éste lugar está llenó, de demasiada tranquilidad y paz.

Cuando la volví a tomar en mis brazos con cuidado, entramos, y ella se aferró a mí.

Bese sus mejillas cuando su cuerpo estuvo finalmente en la cama de la habitación del lugar.

Rápidamente tomé un vaso de agua fría para ella y lo bebió con calma, todavía estaba débil y algo triste, sí, lo podía ver en sus ojos que se abrieron ligeramente para verme.

"Te amo", bese sus labios cuando estuvimos juntas y abrazadas. "No sé qué está pasando, mi amor, pero estaré aquí. Todo estará bien", la besé de nuevo con suavidad.

Tenía que ser sincera, al principio me costó un poco dormir, aunque no fue mucho porque tenerla aquí, conmigo llenaba mi corazón de calidez.

...

Cuando desperté, la miré, ella seguía dormida en mis brazos, sus piernas y brazos me rodaban también con fuerza como si realmente tuviera miedo de dejarme ir o de soltarme.

𝐒𝐔𝐂𝐇 𝐀 𝐒𝐖𝐄𝐄𝐓 𝐋𝐎𝐕𝐄Donde viven las historias. Descúbrelo ahora