𝐒𝐔𝐂𝐇 𝐀 𝐒𝐖𝐄𝐄𝐓 𝐋𝐎𝐕𝐄

Lamento haberte lastimado...

"Win, ¿qué estás haciendo?", preguntó Nessa.

El chico finalmente levantó la cara y miró la castaña frente a él. Los ojos del pelinegro, estaban nublados por las lágrimas.

"Nada... Déjame en paz", pidió tomando más de su vaso.

Nessa lo miró confundida y algo preocupada.

"¿Pudiste encontrar a Char?", preguntó, mirándolo.

De pronto, se exaltó, apretando su mandíbula. Él se levantó de su asiento y miró los ojos de la castaña.

"No, ahora no, esta mierda me tiene mal, ¿puedes dejarme en paz?", volvió a pedir.

Nessa lo miró sorprendida, nunca había visto al chico así, ni siquiera bebía tanto, y al parecer hoy lo estaba haciendo.

"Como quieras, tómatelo con calma" Le dio unas palmaditas en el hombro y sin darle mucha importancia a la situación se fue.

• • •

Charlotte había llegado después de su escapada con Engfa, al parecer ni siquiera le importó salir de la hacienda sin decir a dónde iba, pero sus primeros pensamientos esa mañana cuando se despertó abrazada por el amor de su vida, fueron esas preocupaciones.

“¿En que me he metido?” , se preguntó, ahora qué iba a entrar a su casa.

Su corazón seguía latiendo, pero no era felicidad, era angustia lo que sentía su corazón.

En lugar de haberle contado todo Engfa, lo que hizo fue callarse y comprometerse con ella, no pienses mal, estaba realmente emocionada por eso, era lo que más quería en su vida, tal vez finalmente dejaría todo y a todos por ella.

“Tengo que hablar con Win”,  fue su último pensamiento.

Dejó escapar un fuerte y doloroso suspiró, mientras seguía caminando, ahora hacia la habitación de sus padres.

Llegó, empujó suave y silenciosamente la puerta, sus ojos encontraron rápidamente a sus padres dormidos y que se abrazaban. Debió adivinarlo, aún era muy temprano, sonrió y se alejó de allí con la misma suavidad con la que llegó.

Caminó a su habitación, pero antes de ello, se detuvo en la de su amiga, cuando entró, no había nadie.

Génial estaba sola. Rió con sarcasmo.

“Esa pequeña castaña tonta, se escabulló con la bailarina esa”,  fue su pensamiento.

Bueno, salió de allí y continuó su camino a su habitación, entró y encontró a Win acostado en su cama.

“¿Qué, qué hace aquí?”

Sus ojos se abrieron con sorpresa y rápidamente se acercó a él, lo observó confundida y luego lo movió con suavidad.

"¡Win!", murmuró cuando lo miró al abrir ligeramente sus ojos. "¿Qué estás haciendo, porque estás aquí?", preguntó sin entender.

Él chico volvió en sí y se sentó, miró a Charlotte con los ojos un poco más oscuros de lo que eran, pero luego se relajó y su mirada se volvió suave.

"Char", murmuró con una sonrisa.

Charlotte no dejaba de mirarlo fijamente, algo estaba mal, ella lo sintió, sin poder comprenderlo.

"¿Qué haces aquí?", preguntó en voz baja.

Win siguió con su sonrisa en su rostro mientras se levantaba torpemente de la cama. Estuvo a punto de caerse por ello, pero Charlotte lo tomó del brazo para ayudarlo.