Repetición

104 11 5
                                    

Negaba con la cabeza todo el camino mientras conducía. No estaba seguro de porqué iba hacia allí, pero seguía haciéndolo de todos modos.

¿Es que acaso me había aburrido ya de tres semanas de estar vivo y quería volver al modo zombie? ¿O ahora era masoquista y encontraba placer en torturarme? Al fin había acabado la semana escolar, era viernes y debería haberme ido directo a La Push después de clase, pero no, aquí estaba actuando como un demente, conduciendo por un camino prácticamente invisible y lleno de maleza. Los árboles se inclinaban sobre mí creando un túnel verde que en otra ocasión me habría resultado bonito, pero ahora sólo parecía dirigirme a mi propio vacío.

Cuando volví a la escuela el martes, al día siguiente de mi inesperada intervención a la hora del almuerzo, no sabía qué esperar. Pero fue agradable encontrar a Allen y McKayla muy dispuestos a perdonarme por mi abandono. Ambos se mantuvieron a mi lado en las clases que compartíamos y durante el almuerzo. Incluso Becca, una vez superada su gripe estomacal, me dio la bienvenida tímidamente y no se quejó de la atención que Allen, siempre perceptivo, me prestó durante la semana, seguramente atento ante cualquier cambio en mi comportamiento, esperando poder ayudarme si me volvía a retraer. Tomé nota de aquello. Allen era un buen amigo, y podían serlo también McKayla y Becca.

Jeremy, por otro lado, parecía no haber superado el episodio de Port Angeles y se mantenía como fiel paladín de Logan. Me pregunté si esperaba una disculpa por escrito, publicada en el diario escolar.

Sin embargo, ahora lo que me preocupaba era algo más. Mientras manejaba intenté meditar la razón de mi absurda decisión. Probablemente se debía a mi pesadilla, buscando algo a través del bosque. Tal vez era esto lo que buscaba en sueños y tenía que verlo con mis propios ojos para dejar de soñar. O quizás, se debía a la extraña sensación de déjà vú que sentía desde el lunes, cuando me di cuenta de que había cumplido un año de haber llegado a Forks. La repetición del presentimiento de que era la persona más rara que había en el instituto.

Será como si nunca hubiera existido.

No. Eso no había funcionado. Ni siquiera el aturdimiento que me había impuesto para sobrellevar mi depresión había hecho que olvidara. Me había tomado meses salir a la superficie y respirar, convencerme de que la vida no se había acabado y que quisiera o no, tenía que seguir. Pero no era como si nunca hubiera existido. Ansiaba escuchar su voz, como lo había hecho la noche de cine con Jeremy. Esa voz musical, como el sonido de un carillón de viento un día de primavera. Aún no había descifrado la razón de esa "experiencia", pero sabía que quería repetirla.

La maleza del camino no mermaba y empecé a sentirme nervioso, tal vez no la encontraría. O la habían demolido. O me había equivocado de camino. Lo mejor sería dar la vuelta y salir por donde había venido, pero seguí adelante. Y entonces apareció el hueco entre los árboles que estaba esperando ver, sólo que no era tan visible como antes. La vegetación reclamaba cualquier espacio abandonado con rapidez. Un mar de helechos había crecido por todo el exterior, llegando incluso al porche.

La casa estaba ahí, pero no parecía la misma. Era la misma estructura, pero estaba claramente abandonada, como una casa fantasma. Era espeluznante. Algún pájaro cercano dio una especie de grito y me dio escalofríos. Ahora sí parecía una guarida perfecta para una familia de vampiros.

Me bajé de la camioneta y me abrí paso hasta el porche. Subí las escaleras lentamente, mirando el suelo. No ocurrió nada, ninguna voz en mi cabeza. Lo único que oía era el viento y los sonidos del bosque. Tuve miedo de levantar la mirada y ver a través de los cristales, recordando el funeral del abuelo, cuando me dijeron que era mejor no verlo en su ataúd, para que pudiera recordarlo como era en vida. ¿Qué sería peor? Una opción era ver la casa completamente vacía, como un triste cascarón. Pero la otra, era verla intacta, con todos sus muebles... El piano...

Luna Nueva (Versión Vida y Muerte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora