20.0

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🌫️

Habían pasado exactamente 5 días desde que visitó las favelas de los niños.

En ese tiempo sus dolores de cabeza habían ido de mal en peor. Era como si algo dentro de él quisiera salir, como si algo lo obligase a despertar de una pesadilla.

Y hablando de pesadillas, estás eran algo nuevo también pues aquella noche después de hablar con Dapper tuvo un sueño; En el huía de algun mounstro, corría con todas sus fuerzas pero al final era alcanzado.

No le había dicho a nadie sobre eso y tampoco tenía planeado hacerlo pero sentía que aquel sueño tenía algún significado.

En cuato a los niños, la situación, por lo que había estado "investigando" había comenzado a cambiar. Los más grandes eran enviados a distintas alas para practicar sus transformaciones en dragones o eso le había dicho Bobby hace dos días cuado lo encontró cerca del ala donde residía.

También había notado que había más doctores llendo de aquí allá.

Por las noches ideaba un plan para ayudarlos pero sinceramente tenía un tanto de miedo al ser descubierto. No sabía hasta donde llegaría o si realmente podría ser de ayuda pero de algo si estaba seguro, si alguien se daba cuenta que intentaba sacar a los niños de la prisión, lo más seguro es que pasaría algo muy malo con él.

Suspiro viendo sus notas, el dolor comenzaba a llegar nuevamente. El estrés lo tenía con las garras de afuera y ni que decir de su ansiedad por ayudar a los niños lo más rápido posible.

- Piensa, piensa - se obligaba para poner a flote su pequeño plan.

Hasta el momento solo sabía que debía de sacarlos cuado volviera a ser el día sin guardias para ellos, también está el hecho de que debía de parar el suministro de suero pero no sabía cómo, o el hecho de llevar a tantos niños con él sin que nadie se diera cuenta.

"Solo llevan a los niños de 12 a 17 años a practicar nuestras transformaciónes"

Las palabras dichas por Bobby le refrescaron las ideas.

"Si solo llevan a los niños más grandes eso quiere decir que los más pequeños aún no están listos para pelear. Entonces podría solo ayudar a salir a los más grandes y después volver por los menores, una huida de dos partes.

¿Pero cómo lo haría? Necesito ayuda de alguien más si o si ¿Pero de quién? ¿Quien podría ser mi aliado en este lugar? Nadie entabla una conversación conmigo, o bueno, solo mi padre, Cellbit, Cucurucho (Pero él solo habla con malditas señas y mensajes mediante papelitos) y algunas veces el hombre tiburón.

"Cochi y Beni ya no los veo tanto y aún así, no puedo arriesgarme a decirle a ellos ¡Vamos! Son los guardaespaldas de mamá"

Y precisamente eso era algo que estaba en su contra, eso y que nadie se le acercara para hablar.

¿Debería decirle a Cellbit? ¿Podía confiar en él?

Cellbit era tan caballeroso con él, tan lindo y atento. Alguna veces incluso pensaría que él quiere ser su amante, pero nah

Aún así, por lo que había observado, Cellbit solo era un "guardia" nada más, tal vez tenía la noción de lo que pasaba ahí pero solo superficialmente, eso o en verdad actúa bastante bien.

- Carajo ¿Qué hago? - dijo para si mismo

- ¿Qué haces de qué?

Salto en su asiento dando un ligero grito de sorpresa para nada masculino. Cerrando su libreta rápidamente volteo a ver viendo a Cellbit quien estaba en el marco de la puerta mirandolo con una sonrisa burlona.

𝙻í𝚗𝚎𝚊 𝚍𝚎 𝚏𝚞𝚎𝚐𝚘 ~Sproier~ 🔞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora