Alex Claremont-Diaz y Luke Morrow provienen de mundos radicalmente diferentes, pero encuentran una conexión profunda y transformadora en medio de circunstancias extraordinarias.
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Bienvenide seas a esta idea que nació de un video de tiktok...
Han pasado unos días desde el elegante evento de caridad en la Casa Blanca. Luke Morrow se encontraba en su base militar, intentando concentrarse en sus deberes y operaciones. Sin embargo, su mente seguía regresando a la conversación que había tenido con Alex Claremont-Díaz. Habían sido solo unos minutos, pero esas palabras y miradas habían dejado una impresión profunda en él.
Caminaba por los pasillos del cuartel general, sumido en sus pensamientos, cuando su teléfono vibró en su bolsillo. Sacándolo, vio un mensaje de su amigo James.
James: ¿Pensando en el hijo de la Presidenta otra vez?
Luke: No sé de qué estás hablando.
James: Solo recuerda que la curiosidad no mató al gato.
Luke suspiró y guardó su teléfono, frustrado por el hecho de que sus pensamientos fueran tan transparentes. No estaba seguro de por qué Alex lo había afectado de esta manera, pero no podía negar que su mente seguía regresando a él.
Mientras tanto, Alex estaba ocupado en su propia búsqueda. Había pasado los últimos días tratando de encontrar una oportunidad para volver a ver a Luke. Había investigado un poco sobre las bases militares cercanas y había descubierto que Luke estaba estacionado en una de ellas. Aunque sabía que no sería apropiado aparecer sin previo aviso y simplemente decir "Hola", estaba decidido a encontrar una manera de coincidir con él nuevamente.
En la tarde, mientras Alex navegaba por las redes sociales, vio un anuncio sobre una exposición de arte contemporáneo que se llevaría a cabo en un centro cultural cercano. Era un evento abierto al público y pensó que podría ser una oportunidad para encontrarse con Luke de manera "casual".
Con la determinación de encontrarlo, Alex se preparó y se dirigió al centro cultural esa noche. Caminó por las galerías, admirando las obras de arte mientras su corazón latía con anticipación. No estaba seguro de si Luke estaría allí, pero estaba dispuesto a intentarlo.
Mientras observaba una instalación de arte abstracto, su atención se desvió hacia una figura conocida. No podía creer lo que veía: Luke Morrow estaba parado cerca, observando una de las piezas. Alex sintió una mezcla de emoción y nerviosismo mientras se acercaba a él.
—¿Luke?—, lo llamó, con su voz cargada de sorpresa y esperanza.
Luke giró hacia él, sus ojos claros encontrándose con los de Alex. Pareció sorprendido por el encuentro, pero también mostró una pequeña sonrisa.
—Alex, ¿verdad?— respondió Luke haciéndose el desentendido, su voz resonando con su característica seriedad.
Alex asintió con una sonrisa. —Sí, soy yo. No sabía que también estarías aquí.
Luke se encogió de hombros, como si fuera un encuentro completamente casual. —Parecía un buen lugar para relajarse después del trabajo.
Alex asintió, aunque su corazón latía con fuerza. —Sí, lo es. Las obras son muy interesantes.
Luke observó una de las pinturas cercanas. —Sí, definitivamente tienen un atractivo único.
¿Seguían hablando de las obras?
Los dos hombres se quedaron mirando las obras de arte por un momento, una especie de tensión flotando en el aire entre ellos. Alex sabía que este era un momento importante, una oportunidad para profundizar su conexión con Luke.
—¿Te gustaría tomar un café después de esto? —propuso Alex, tomando la iniciativa. —Podríamos hablar más y conocer mejor nuestras respectivas vidas.
Luke lo miró por un momento.
—No tiene que ser hoy, especificamente —se apresuró a decir con nerviosismo—, es sólo que supongo que el deber llama, debes estar ocupado y con muchos pendientes, yo solo...
—Eso suena bien —interrumpió Luke.
Alex sintió un alivio mezclado con emoción. Intercambiaron números de teléfono y acordaron encontrarse en un café cercano después.
A medida que caminaba por las galerías con Luke, Alex no podía evitar sentir que este encuentro casual podría ser el comienzo de algo más profundo. A pesar de las diferencias entre sus mundos, había una conexión entre ellos que no podían ignorar.
—Te, te llamo más tarde —siseó Alex saliendo de la galería, seguido de su equipo de seguridad.
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James y Luke se encontraban en la cafetería de la base militar, compartiendo un momento de descanso después de una larga jornada. James notó que la expresión de Luke estaba más seria de lo habitual y decidió abordar el tema.
—¿Todo bien, Luke?—, preguntó James, tomando un sorbo de su café.
Luke suspiró y jugueteó con su taza antes de responder. —No, no está bien. No sé lo que estoy sintiendo últimamente.
James levantó una ceja, su mirada llena de interés y preocupación. —¿A qué te refieres?
Luke miró a su amigo, buscando las palabras adecuadas. —Es Alex. Desde que lo conocí en ese evento, no puedo dejar de pensar en él. Y no es solo eso, es... es como si estuviera experimentando algo que nunca había sentido antes.
James asintió, entendiendo la gravedad de la situación. —¿Estás diciendo que sientes algo por él? ¿De esa manera?
Luke suspiró nuevamente, su expresión reflejando su confusión interna. —Sí, pero no sé si puedo etiquetarlo. No es solo atracción física. Es más profundo que eso. Y eso me asusta.
James apoyó su mano en el hombro de Luke en un gesto de apoyo. —Entiendo por qué podrías estar asustado. Pero, Luke, a veces la vida nos presenta situaciones que desafían nuestras expectativas. Lo importante es escuchar tus propios sentimientos y decidir lo que es mejor para ti."
Luke asintió, agradecido por la comprensión de su amigo. —Es solo que él es una figura pública, siempre bajo el escrutinio de los medios y la política. No sé si puedo manejar eso, ni siquiera sé si podría hacer que funcione.
James sonrió amablemente. —Lo entiendo, pero también he visto lo fuerte que eres. Si decides que es algo que vale la pena, estoy seguro de que podrás enfrentarlo juntos. Además, nunca sabemos cómo podría evolucionar. Las conexiones inesperadas son a menudo las más significativas.
Luke asintió lentamente, sintiéndose más en paz con sus propias emociones después de hablar con James. —Gracias, amigo. Aprecio tu consejo.
James le dio una palmadita en el hombro. —Estoy aquí para apoyarte, pase lo que pase. Y recuerda, lo más importante es ser sincero contigo mismo.
La conversación con James le dejó a Luke con una sensación de claridad y entendimiento. Aunque las emociones que sentía por Alex eran nuevas y desafiantes, sabía que tenía a un amigo en quien confiar.
_____ Aprovecho este capítulo para preguntar, ¿a qué hora les gustaría que actualizara los capítulos?
