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Kim Taehyung frunció el ceño y tocó su cabeza un tanto adolorido, se trató de sentar pero su cuerpo estaba muy cansado: "¿Hace cuántos días que había entrado a esa habitación?"

Al contemplar a su derecha pudo ver a Park Jimin que dormí con una sonrisa en su rostro, el menor suspiró aturdido—No puedo más, este hombre me matará—susurró asustado.Jimin se removió y abrió los ojos con lentitud, al ver al humano, sonrió espléndido, se puso rápido encima de él y presionó sobre el pene ajeno.

—Buenos días—saludó el mayor con suma inocencia.

—Joven Park, llevamos cuatro dias seguido en esto, dejeme descansar. No puedo estar teniendo sexo como si fuera desayuno, almuerzo y cena—suplicó Taehyung muy cansado. Si su cuerpo seguía bien, debía ser gracias a la sangre de licántropo. Park Jimin era un incontrolable a la hora del sexo y deseaba siempre más—¿Quiere que muera acaso?

—¿Quién muere por algo así?—sonrió socarrón Park Jimin para acariciar sobre el pecho desnudo de aquel hombre, gustoso—.No es mi culpa, quien me metió en esto fuiste tú, yo solo conocí ese...placer y bueno, me gustó mucho.

Park Jimin rodeó sus manos alrededor del cuello de Kim Taehyung y cuando notó que la erección ajena se había activado, se acomodó lo mejor posible y se introdujo aquel miembro. Kim Taehyung soltó un quejido empezando a sentir el peso de Park Jimin y como se embestía gustoso. Park Jimin se siguió moviendo de forma desenfrenada, el menor tomó de las caderas ajenas, para presionar sus dedos sobre el redondeado trasero cuando sintió que llegaría por fin a su clímax.

Kim Taehyung ya no pudo aguantar más y eyaculó, Jimin soltó un quejido y cuando iba a llegar también a su propio placer, notó como las manos de Kim Taehyung se deslizaron y sus ojos se cerraron.

—¿Taehyung...oye, Taehyung?—el vampiro se bajó de aquel cuerpo dando suaves bofetadas, al imaginar lo peor, miró asustado en dirección de la puerta, tomó su bata y se cubrió para luego cubrir el cuerpo del humano—¡Irene, Irene, llama al médico!


Minutos después, el doctor revisaba al joven que se encontraba inconsciente en la cama, el vampiro contempló a la ama de llaves, la cual enarcó ambas cejas, el hombre suspiró viendo en dirección de la puerta.

—Joven Park—Jimin ingresó con una sonrisa de inocencia total, batiendo sus pestañas hacia el médico y juntó sus manos, jugueteando entre ellas—. No puede seguir así.

—¿Así como?—inquirió haciéndose el tonto.

—Va a matar a este joven a estas alturas—exclamó con sorpresa el doctor. Jimin hizo una mala cara y se sentó con un puchero sobre una de las sillas que se mantenían en aquel cuarto—. Debe recordar que usted tiene sangre de vampiros y de demonio, no cualquier demonio, si no de un incubo, los cuales consumen el alma mediante el sexo y tienen un líbido sexual fuerte. Ya es sorprendente que el joven Kim no haya muerto a estas alturas, por suerte solo está débil, con medicina y comida que le ayude a renovar sus energías podrá mejorar.

—¿Y cuándo mejor puedo estar de nuevo con él?—sonrió espléndido aquel híbrido.

—No, joven Park—le aconsejó aquel sangre pura y se tocó la sien al darse cuenta de lo necio que podía ser aquel Conde—. Debe descansar un buen tiempo, le puedo dar unos supresores para calmar su celo.

—Pero-...

—Es una orden, Conde—sonrió con dulzura aquel médico para luego hacer un gesto al mayor de que saliera. Jimin puso los ojos en blanco, saliendo a zancadas.

Irene solo siguió con su vista a su amo, un tanto preocupada por toda aquella situación, parecía que su amo no tenía ningún control y estaba muy empedernido con ese simple humano, ahora que se habían hecho amantes, la noticia no se tardaría en correr por todo el castillo y nadie le podía hacer daño.

Vmin|| Saudé.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora