╚ Porque ya tienes a alguien que en casa te espera
Ella sí tiene todo lo que yo quisiera
A mí no me importaba que todos supieran
Solo me importó que tú no me entendieras ╗
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Aunque habían tenido un resultado favorable en casa, Lionel hacia borron y cuenta nueva, ahora enfocándose en el partido con Bolivia.
La altura era complicada, pero por suerte varios del plantel, ya estaban acostumbrados. Llegaron con tiempo para entrenar un día, dormir por la noche y enfocarse en el partido.
Pablo había venido, era su trabajo estar presente, pero esta vez Roma se habia quedado en España, Agustin tenía un partido muy importante que jugar y decidieron que lo mejor es que ella se quede.
Esto significaba que ahora Gala era la única mujer lidiando con tanta testosterona. Nada que Roma no haya hecho antes.
Boludo yo no soy la más atlética pero ni siquiera corrí, estoy que me muero.- dice Gala tirandose al piso de la cancha, al lado de los asientos donde se encontraba el equipo técnico.
Lionel estaba parado, dando indicaciones pero atento a las conversaciones que tenían.
Anda a la enfermería a que te tomen el oxigeno, tal vez te dan oxígeno.- le dice sin mirarla.
No, seguro es porque esta re lejos esta cancha, camine un montón.-le responde.- Pasame ese coso del oxigeno y estoy.
Teniendo razón, se mejoro y se quedo acompañándolos hasta que el último entrenamiento de la noche terminó. Los chicos la saludaron, ya que no la habían visto en todo el dia y esto ocasionó una situación no muy agradable para Lionel.
No puede ser que no hayas hecho nada y estés así.- se rie Rodrigo.
Miralo a Julián, esta fresco como una lechuga y eso que se corrió la vida.- apunta Paredes.
Este tiene tubos de oxigeno en el culo sino no se entiende.- responde Enzo quien estaba apoyado en sus rodillas intentando recuperar aire, quien se gano una cachetada en la nuca del hombre del que estaban hablando, comenzando a caminar hacia el hotel.
Vení, te llevo que sino te morís.- le dijo Otamendi, quien se agachó posibilitando que Gala se suba en su espalda.
Penso en si hacerlo o no, pero verdaderamente no quería morir, y estos hombres estaban entrenados para esto. Finalmente acató ordenes y el general la llevo.
La mandibula de Lionel estaba tensa, las manos del jugaron estaban peligrosamente cerca y la naturalidad con la que la agarraba no le gustaba un pelo. Pablo y Samuel lo miraban apartados, interiormente les daba un poco de risa ver como se sacaba con estas cosas de vez en cuando, pero siempre cuidando de que no vaya a hacer alguna estupidez.
Pero se había prometido cambiar, volver a enamorarla, y enojandose por un berretin que él tenía, no lo iba a ayudar en nada. Mucho más cuando él le pregunto sobre la relacion que tenia con el jugador y le fue sincera, no estaba en condiciones de dudar de su palabra cuando no le habia dado motivo alguno.
Con la cabeza mirando al piso los siguió, intentando pensar en cualquier cosa, menos en la escena frente a él. Pablo se acercó a él, poniendo una mano en su espalda para hacerlo caminar, todo mientras se aguantaba la risa. Él habia estado en esa situacion, y le aliviaba no ser más el que lo padece.
