Fanboy Draco Malfoy Convinces Harry Potter to Marry Him

Capítulo 70: Arbustos sensibles y tostadas-Reunidos y se siente tan bien

Draco esperó impaciente a que su madre terminara de empacar sus cosas. El período escolar comenzó mañana y finalmente iba a ver a su amada.
"Dragón, ¿por qué arrastras los pies? ¡Vamos!" Él puso los ojos en blanco antes de agarrarla del brazo. Solo podías entrar y salir del pantano, una medida de seguridad que uno de los antepasados agregó. Se fueron con un pop y aparecieron en la mansión. Podía oír los pies golpeando el suelo y apareció su Padre.
"¡Mi familia!" Gritó antes de abordarlos a ambos en un abrazo. Draco se tomó un momento para abrazar a su padre antes de que lo empujara.
"¿Dónde está Harry?" Su padre abrió la boca antes de ver la cicatriz en su rostro.
"Merlín cariño, ¿qué pasó?" Gritó, tratando de trazar la cicatriz debajo de su ojo. Terminó a la mitad de su mejilla en línea recta.
"No es nada, padre. ¿Dónde está Harry?" Repitió y su madre comenzó a reírse de su lado.
"¡Draco estaba soñando despierto con Harry y tropezó! ¡Aterrizó en uno de los arbustos sensibles y no apreció que cayera sobre él!" Se sonrojó y se alejó.
"Bueno, mamá estaba entusiasmada contigo con Dave y él trató de arrancarse las orejas". Gritó antes de continuar hacia el floo. Todavía era temprano en la mañana, así que Harry todavía podría estar en la cama.
"¡Grimmauld Place!" Gritó y dejó que el floo lo llevara a su amada. Escuchó voces una vez que salió del floo y corrió hacia la cocina. Encontró a su padrino y Lord Black besándose sobre un montón de panqueques.
"¡Pequeño Malfoy! Has vuelto. Qué maravilloso que Matilda no te haya comido". Lord Black dijo sarcásticamente y lo ignoró.
"¿Dónde está Harry?"
"Hola Draco. Estamos felices de verte. Harry está en su ro-" no dejó que su tío terminara antes de irse. Tomó las escaleras de dos en dos y estaba frente a la puerta de Harry. Las serpientes lo miraron antes de que dijera: "Harry es el chico más lindo del mundo". Como no podía hablar Parseltongue para abrirlo, Harry les había dicho a las serpientes que siempre lo dejaran entrar si decía su contraseña secreta. La puerta de piedra crujió y dio un paso adelante. Harry se cepillaba el pelo en el espejo y le silbaba a Snappy. Su hijo había crecido desde que se había ido. Ahora era del tamaño de un corgi, sus escamas brillaban a la luz de la mañana. Harry se detuvo repentinamente antes de darse la vuelta. Lo miró como si hubiera visto un fantasma. Draco se tomó este tiempo para mirar a su amada. Sus pómulos se habían vuelto más afilados y su cabello colgaba de su espalda. No pudo evitar su sonrisa cursiva. Su querida se veía encantadora como siempre.
"¿Draco?" Susurró antes de arrojarse hacia él. Draco lo atrapó fácilmente y lo abrazó con fuerza. Harry olía a flores silvestres y Draco enterró su cabeza en su cabello.
"¡Has vuelto! Te he extrañado mucho". Harry siguió hablando y lo levantó antes de ponerlo en su cama. Pasaron las siguientes dos horas abrazando a Snappy entre ellos y Harry le contó todo sobre su verano. Iba a asesinar a su padre si no tenía fotos de su desfile de modas. ¡No podía creer que se lo hubiera perdido!
"-¡y luego Sirius propuso!" Terminó y le sonrió alegremente antes de sonrojarse.
"Tu cicatriz se ve muy encantadora". Dijo tímidamente y Draco infló su pecho.
"Gracias, cariño. ¡Me metí en una pelea con un árbol sensible! Tenía miedo de que se llevara lo mejor de mí, pero pensé en ti y logré superarlo". Se jactó y Harry lo miró con estrellas en los ojos. Estaba tan feliz de finalmente estar al lado de Harry, donde pertenecía.

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Sirius miró a la puerta de la serpiente. ¡Había estado tratando de adivinar la contraseña durante más de treinta minutos! Había intentado llamar, pero la puerta era de piedra sólida. No entraba ni salía ningún sonido. Hizo una mueca mientras trataba de no imaginar lo que su precioso bebé estaba haciendo con Malfoy. ¡El niño había regresado con el pelo largo y una cicatriz! Odiaba admitirlo, pero Draco se veía tan genial.
"Amor, déjalos en paz. ¡Se están poniendo al día!" Sev dijo mientras lo arrastraba.
"¡Solo iba a ofrecerles un bocadillo! Harry se perdió el desayuno". Él hizo un puchero y Severo le dio un beso.
"Estará bien. Ya tiene trece años".
"¡No me lo recuerdes! Será un adulto en cuatro años". Golpeó la cabeza sobre la mesa y suspiró. Los pies bajaron las escaleras y los niños finalmente aparecieron. Harry llevaba un skort con una de sus viejas camisetas de banda metida en ella. Su cabello estaba en dos coletas con pinzas de mariposa colocadas al azar por todas partes. ¡Se veía tan adorable!
"¡Hola papá! ¡Hola padre!" Dijo y su sonrisa era tan brillante que Sirius no podía estar enojado con Draco. Harry se había perdido sin el otro niño.
"¡Harbear! Mira lo lindo que te ves. Ya que Draco ha vuelto, ¿por qué no vamos de compras?" Se ofreció y Harry dio un chillido.
"¡Podemos mirar a las serpientes! ¡Creo que Bubbles quiere un compañero!" Harry anunció y Severus dejó caer el cuchillo que estaba usando para cortar algo de fruta para él.
"Uh amor, ¿crees que un basilisco puede reproducirse con una serpiente normal?" Severus preguntó y Harry pareció pensarlo antes de encogerse de hombros.
"¡Solo una forma de averiguarlo!" Un silbido vino de debajo de la mesa y la serpiente con gafas se deslizó por la pierna.
"¡Absolutamente no! ¡No hay serpientes sobre la mesa!" Dijo bruscamente y la pequeña amenaza le devolvió el silbido.
"¡Burbujas, Harry no te salvará! Abajo." La serpiente siseó un poco más antes de caer al suelo y alejarse. ¡Sabía que el bugger podía entenderlo! Harry se sonrojó y evitó su mirada.
"Cachorro, ¿qué pasa?" Buscó a tientas con su bocadillo antes de decir: "Bubbles dijo que es grosero que no pueda estar en la mesa porque ha visto lo que tú y tu padre hacen en ella". Draco inmediatamente apartó el plato de Harry antes de recogerlo y salir de la habitación.
"¡Dobby! ¡Saca esta mesa afuera y quémala!"
"¡Te dije que la serpiente era un pervertido!" Gimió, su rostro tan rojo como el de Harry.