Fanboy Draco Malfoy Convinces Harry Potter to Marry Him

Capítulo 44: Incluso los muertos están cansados de escuchar sobre Drarry

Sirius silbó mientras caminaba por los pasillos de Grimmauld Place. Cissy había llevado a Draco al pantano y eso lo dejó pasar todo el día con su ahijado sin el mocoso alrededor. Entró en el salón y encontró a Severus tratando de trenzar el cabello de Harry. El otro hombre obviamente nunca lo había intentado antes porque Sirius nunca había visto tantos nudos antes en su vida.
"Sev, ¿estás tratando de enredar cada pedazo de cabello?" Preguntó, divertido con su compañero luchando.
"¡Siri! ¡Creo que está haciendo un buen trabajo!" Harry trató de defenderlo, pero su mueca lo delató.
"¡No te preocupes cachorro! ¡Solía trenzar el cabello de Lily todo el tiempo! Incluso puedo hacer algunos complicados". Se jactó, sentado en el regazo de Severus para hacerse cargo. Después de que logró desenredar todo, hizo una elegante corona trenzada. ¡Su cachorro se veía tan lindo!
"¡Déjame ir a cambiar y luego podemos irnos!" Harry gritó antes de salir corriendo de la habitación.
"Gracias cariño. Parece que mis dedos simplemente no están cortados de una tarea tan delicada". Severus dijo con tristeza, sus manos en las caderas de Sirius. Le dio una lectura y dijo: "Está bien, nena. Sé algo más que puedes hacer con tus manos". Escuchó los pies de Harry pisoteando las escaleras y se levantó rápidamente. Todo lo que necesitaba era otra conferencia de Draco sobre decoro. Su cachorro llevaba pantalones cortos de mezclilla y una camisa abierta con botones con una camiseta blanca sin mangas debajo.
"Harry, ¿es esa la camisa de Draco?" Sirius no sabía por qué se molestó en preguntar mientras Harry asintió. "Dijo que podía usarlo, ¿no me veo genial?" Hizo una pose, su mano lanzada en el aire mientras la otra descansaba sobre su cadera.
"¡Gran pose cachorro! ¡Como tu viejo!" Sirius le dijo con orgullo. James solía pavonearse por su dormitorio con sus atuendos favoritos, haciendo que todos los Merodeadores se rieran de él.
"¡Vamos!" Harry vitoreó y agarró sus manos.

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A Harry le encantaba ir al Callejón Diagon. El Sr. Severus tuvo que conseguir algunos ingredientes de pociones y Sirius dijo que podían mirar la tienda de mascotas. Siguió a sus guardianes por la calle hacia Knockturn Alley.
"Harry, asegúrate de estar cerca". Sirius le dijo. Harry pensó que el callejón estaba un poco sucio, ¡pero no parecía tan malo! Entraron por la puerta del boticario y Harry comenzó a mirar a su alrededor mientras el Sr. Severus regateaba con el dueño de la tienda.
"Hola, papá quedó realmente impresionado con que derribaras un edificio en nombre del amor". Una chica estaba hablando con él, sus ojos grandes y distantes.
"Gracias. Fue para demostrar un punto". Harry le dijo, con la espalda recta. No se avergonzaba de lo que hacía y lo volvería a hacer.
"¿Sabías que usar tus calcetines al revés mantiene alejados a los vampiros?" Ella preguntó, sosteniendo su collar.
"¿En serio?" Harry estaba impresionado. ¡Esta chica sabía muchas cosas!
"Mi nombre es Harry, ¿cuál es el tuyo?" Ella le dirigió una mirada sorprendida antes de decir "Luna Lovegood. Sin embargo, la mayoría de la gente simplemente me llama Looney Luna". Harry frunció el ceño ante su apodo, eso no parecía muy agradable.
"Bueno, Luna, si está bien con tus padres, ¿quieres venir a la tienda de mascotas con nosotros? ¡Voy a tratar de convencer a Sirius de que deberíamos comprar todas las serpientes!" Ella le recordó a Fleur con su cabello rubio, pero su voz era brumosa, como si estuviera medio dormida.
"A papá no le importará. Fue a buscar un Snorkack de cuernos arrugados". Harry no sabía qué era eso y no pudo evitar preguntarle. ¡Pronto ella le estaba contando todo sobre diferentes criaturas mágicas!
"¡Estaría feliz de hacerte un amuleto que mantenga alejados a los Nargles!" Antes de que Harry pudiera responder, Sirius y el Sr. Severus se acercaron, terminados con sus asuntos.
"¿Quién es tu nuevo amigo, Harry?" Preguntó Sirius, su voz resignada.
"¡Esta es Luna!"

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Draco sintió que algo crujía bajo su pie y se sacudió los pedazos de hueso que había pisado. Su madre continuó y él la siguió más profundamente en el pantano. La mayoría de la gente asumió que era solo una pequeña parcela de tierra, pero el pantano era enorme. Si alguien alguna vez se escapara, no llegaría muy lejos. Solo un negro podía atravesar el pantano con seguridad.
"Draco, ¿estás listo?" Él asintió con la cabeza a su madre. Entraron en el agua del pantano y esperaron. Lentamente los cuerpos emergieron de las profundidades y los inferi se apiñaron a su alrededor. Tomó un cubo de su madre y comenzó a tirar el contenido en el agua turbia. Tenían que alimentar a los inferi una vez al mes o se ponían irritables. Una mano agarró su pierna y vio a Dave, un inferi que nombró cuando era más joven. El hombre tiró de su pierna de nuevo y le dio más comida.
"¡Merlín Dave, vas a engordar y no podrás arrastrar a nadie hacia abajo!" Él reprendió al hombre. Dave hizo un sonido sibilante que tomó para "Piss off" "
¡Oh Dave! ¡Déjame contarte todo sobre el regalo de Harry que me dio por mi cumpleaños!" Los otros inferi desaparecieron rápidamente hasta que solo quedó Dave. De alguna manera logró darles una mirada traicionada con la mitad de su rostro perdido.
"¡Y su cabello! Fue hermoso". Draco continuó, ignorando la risa de su madre. Veinte minutos después, estaba hablando de su próxima unión.
"Por supuesto, él es todo lo que podría soñar. Eso me recuerda, ¿qué piensas de una boda de verano? ¡Harry se vería magnífico a la luz del sol! ¿O una boda de invierno? Imagina la nieve cayendo lentamente a su alrededor". Dave jadeó antes de caer en el agua. Draco solo frunció el ceño y dijo: "¡No volveré a caer en tu falso truco de ahogamiento, Dave! Ya estás muerto". Los inferi lo fulminaron con la mirada, pero continuaron escuchándolo.
"Si has terminado de torturar a Dave, tenemos que ir a ver el lethifold y luego podemos irnos". Draco se animó. ¡A Mandy le encantaba escuchar sobre Harry!
"¡Lidera el camino, madre!"

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Lucius cortó enojado el pergamino. ¡No, no, no! ¡Era la celebración del primer cumpleaños de su segundo hijo con ellos y tenía que ser perfecto! ¡Solo cumplió doce años una vez!
"¡Remo!" Gritó por el pasillo y entró el hombre en cuestión. Parecía completamente relajado y Lucius vio algunos moretones en su cuello.
"¡Necesito tu ayuda! También asegúrate de cubrir esos hickies antes de que Draco los vea. Severo me dijo que su conferencia sobre el comportamiento apropiado aburriría a una monja". Dijo, poniendo los ojos en blanco ante el comportamiento de su hijo. Estaría cantando una melodía diferente una vez que él y Harry llegaran a la pubertad, Lucius estaba seguro.
"Muchas gracias. Ahora, ¿con qué necesitas ayuda?" Remus respondió, su voz seca. Lucius volvió sus ojos frenéticos hacia él y gritó "¡Se acerca el cumpleaños de Harry y tenemos que planear una fiesta perfecta!" Remus cerró la puerta y se sirvió una bebida.
"Está bien, dime qué tienes hasta ahora".
"¡Lucius! ¡No puedes secuestrar a Dumbledore y dejar que los niños le arrojen huevos!" Remus dijo por quinta vez, sus palabras arrastrando juntas.
"¡Vamos, Rem! ¡Sería divertido!" Lucius no fue mejor, ya que dramáticamente levantó los brazos en el aire.
"¿Y si le compré Gringotts? A Harry le gustan los duendes y es tan dulce que probablemente les daría un aumento como su nuevo jefe". Remus lo miró con los ojos entrecerrados y realmente lo pensó.
"Creo que lo pondría bajo demasiado estrés, todas esas tonterías de gestión". Finalmente dijo y Lucius suspiró. Tenía razón, eso era demasiada presión sobre su querido niño.
"¡Lo tengo! ¡Los muggles tienen este artilugio llamado casa de rebote! ¡Es un material suave y los niños rebotan en él!" ¡Lucius no había pensado en usar recursos muggles!
"¡Brillante Rem! ¡Puedo marcar una cosa de mi lista! ¡Ahora hablemos de regalos! Estaba pensando en sobornar a Charlie Weasley para que sacara a escondidas a un dragón de la reserva. Sé cuánto le encantó a Harry verlos". Remus se rió a carcajadas, su voz resonaba en la habitación.
"¡Estás literalmente loca, Lucy!" Lucius le dio una sonrisa salvaje y dijo "gracias, cariño".