Fanboy Draco Malfoy Convinces Harry Potter to Marry Him

Capítulo 88: Disfraces y ver a Double-Hermione es un icono

Draco miró al techo mientras deseaba que terminara la noche. Después de que Harry ganó el juego, Madame Pomfrey lo arrastró al ala del hospital. Había logrado gritarle a su vicepresidente que vigilara su amor. No sabía quién había maldecido al aporreador, pero no importaba. Un enemigo era un enemigo. Una vez que mostraban su rostro, Draco les golpeaba la mierda. Conseguir que su hueso volviera a crecer era un dolor en su trasero. Estaba tan aburrido. Harry probablemente estaba celebrando con su casa y Draco estaba celoso de que se lo estuviera perdiendo. Su esposo siempre brillaba tan intensamente. Parpadeó mientras miraba la invención que había creado. Parecía que su mente drogada había evocado a Harry, pero llevaba un traje de enfermera. Se frotó los ojos, pero Harry todavía estaba allí.
"¿Estás bien, Draco?" Se quitó el estetoscopio del cuello y se lo llevó al pecho.
"Tu corazón late bastante rápido". Draco no lo dudó ni por un segundo.
"Estoy muerto". Declaró pero sonrió a su querida.
"Estoy muerto y esta es mi vida después de la muerte. Enfermera Harry para que me cuide por la eternidad". Suspiró contento. Fue una pena que muriera, pero esta fue una recompensa maravillosa.
"No estás muerto". Harry se rió mientras se sentaba en el borde de su cama.
"Por supuesto que lo estoy. Así es como pensé que sería la vida después de la muerte". Dijo seriamente.
"Draco, si estás muerto, eso significa que estoy muerto". Harry respondió y sus pensamientos se detuvieron estrepitosamente. Se lanzó fuera de su catre y miró a su alrededor frenéticamente.
"¡Draco querido, recuéstate!" Harry gritó y sacudió la cabeza.
"¡Absolutamente no! ¡Necesito hablar con la persona a cargo y hacerle saber que ha cometido un error! No puedes estar muerto, no lo permitiré". Él siseó. Madame Pomfrey sacó la cabeza de su oficina.
"¿Qué está pasando aquí? Si vas a irritar al Sr. Malfoy, tendrás que irte". Ella habló con Harry y Draco se sentó en su catre en silencio mientras envolvía sus brazos alrededor de la cintura de Harry.
"Harry no me está molestando, señora". Él dijo al instante y ella les dio a ambos una mirada sospechosa antes de cerrar la puerta.
"Ninguno de nosotros está muerto". Harry dijo con firmeza. Draco trató de concentrarse en lo que Harry dijo, pero su mente se sentía nublada.
"Te ves encantador, mi corazón. ¿Te vestirás así cada vez que esté enfermo?" Él lo miró con recelo.
"¡Claro!" Draco decidió que haría ricos a los gemelos Weasley comprando el paquete de enfermedad. Vino con múltiples opciones, desde hemorragias nasales hasta vomitar. Harry prácticamente viviría con su atuendo, si Draco tuviera algo que decir al respecto.
"Pero no tienes que estar enfermo para que yo lo use". Draco se inclinó más cerca mientras miraba a los ojos de Harry. Le encantaba mirarlos. Tendría que convencer al Ministro para que hiciera del cumpleaños de Harry un feriado nacional. Todos deberían celebrar el día en que nació su corazón.
"¿Draco?" Harry agitó su mano frente a su rostro y Draco la agarró ansiosamente antes de darle un beso en la parte posterior.
"Te amo, Harry". Él le sonrió dócilmente.
"Veo que la poción todavía está funcionando". Harry se acurrucó contra él y Draco se durmió rápidamente mientras soñaba con un lindo conejito de ojos verdes con uniforme de enfermera.

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Ginny sonrió mientras se arreglaba el cabello. Ella había convencido al club de que debían disfrazarse para Halloween este año y Herm se había vuelto absolutamente salvaje ante la sugerencia. Resulta que había amado Halloween desde que era una niña. Herm había marchado a la oficina de la directora ese día con un ensayo de trece páginas sobre por qué se les debería permitir vestirse. No tuvo el corazón para decirle a la niña mayor que no estaba en contra de las reglas usar disfraces, la mayoría de los estudiantes simplemente decidieron no hacerlo. ¡Herm había terminado convenciendo a McGonagall de que deberían hacer un concurso! La pareja que ganara obtendría un pase para salir de la detención. Daphne la había sobornado para que compitiera. Se enderezó la camisa negra antes de arreglarse el cinturón. Estaba vestida como una muggle llamada Kim Possible. Herm le había asegurado que era una ruda total, así que Ginny lo había aceptado. Daphne estaba vestida como su némesis, Shego. Salió de su dormitorio y encontró a Herm sentado en el sofá. Su cabello estaba en rizos por la espalda y llevaba un hermoso vestido blanco con un corsé. Las mangas colgaban de sus hombros y Ginny podía ver su media blanca asomándose por la hendidura lateral. Ella dio un silbido agudo antes de quejarse en voz alta.
"¡No es justo, Herm! Te ves caliente. No sabía que podíamos hacer disfraces sexys". Hermione la olisqueó antes de responder.
"Soy Christine de El Fantasma de la Ópera. Si gano el concurso, es porque es un personaje icónico que merece el reconocimiento".
"Claro, Herm. Lo que sea que digas". Su hermano bajó saltando por las escaleras y ella lo miró con los ojos entrecerrados. Vestía todo de negro con una capa larga. También tenía la mitad de una máscara blanca cubriendo su rostro.
"¡Oi! Snape estará furioso de que te hayas vestido como él". Gryffindor no podía permitirse perder más puntos si querían ganar la Copa de la Casa al final del año.
"¡No estoy vestido como Snape! No tengo un deseo de muerte. Soy el Fantasma". Él dijo misteriosamente y ella puso los ojos en blanco.
"¿Herm te intimidó?"
"Ella dijo que me ahogaría en el baño de Myrtle si no estaba de acuerdo". Él le susurró.